† 𝓣𝓱𝓮 𝓑𝓲𝓻𝓭𝓼 † [NamJin † Book #1]

05

El cálido ambiente del departamento de Seok Jin los recibió, el mayor llegó castañeando los dientes por el frío de las calles, al moreno, por el contrario, parecía no afectarle.

—Prepararé un poco de café —tartamudeó Seok Jin, el medio-rubio asintió y cerró la puerta del departamento.

Seok Jin fue a la cocina, encendió la estufa y puso a hervir un poco de agua. Con manos temblorosas tomó de la vitrina dos tazas y de la alacena, sacó el café soluble y el azúcar. Cuando el agua estuvo lista, la vertió en las tazas y agregó una cucharada de café y otra de azúcar, mezcló y salió a la sala para tender una taza a Nam Joon.

—Gracias —sonrió el moreno.

Seok Jin se sentó a su lado y comenzó a dar pequeños sorbos a su café. El líquido alivió un poco el frío, a cada trago sentía el café caliente bajar por su garganta, calentándole por dentro.

—Está delicioso —comentó Nam Joon, ambos se miraron—. Mucho mejor que el de la cafetería, ¿no lo preparas tú allá?

—Sí —respondió el castaño con una sonrisa—. Pero allá se prepara en cafetera y yo no tengo.

El sonido de un celular interrumpió la plática y la conexión de miradas. Nam Joon se apresuró a sacar su celular y cuando miró el nombre en la pantalla, rechazó la llamada y volvió a tomar de su café.

—¿No vas a contestar? —preguntó Seok Jin con el ceño fruncido.

—No creo que sea importante —respondió el moreno.

—Pero... —el sonido volvió a interrumpir.

—Disculpa —Nam Joon dejó su taza en la mesa de centro, se puso de pie y fue hasta la cocina para evitar que Seok Jin escuchara.

—¡¿Por qué mierda no respondes?! —una ronca voz gritó al otro lado de la línea.

—Voy manejando —mintió el menor.

—Espero vengas para acá. Tengo que hablar contigo de Seok Jin.

Nam Joon sintió un nudo en la garganta al escuchar ese nombre ser pronunciado por aquella voz.

—Llego en hora y media. — y colgó la llamada.

Salió de la cocina y fue hasta la sala, poniéndose de pie frente a Seok Jin. El castaño alzó la mirada y le dedicó una sonrisa.

—Tienes un nuevo trabajo, Baby. Para el sábado —mintió, pero claro, eso no lo sabía Seok Jin.

Los ojos del mayor se iluminaron, dejó la taza junto a la del menor y se puso de pie.

—¿De verdad? —dio un aplauso y se aventó a los brazos de Nam Joon—. Muchas gracias. No sé cómo debo agra...

—Yo sé cómo —interrumpió Nam Joon, le alejó un poco y miró directamente a sus ojos.

Seok Jin le regresó la mirada, relamió sus labios y Nam Joon acercó su rostro, rozando su nariz con la contraria, el mayor cerró los ojos al instante, disfrutando del tacto.

Ambos pares de labios se unieron, encajando perfectamente, Seok Jin succionó el labio inferior del moreno con ansias, necesitaba ese contacto. Nam Joon siguió el beso, su diestra subió hasta la mejilla de Seok Jin y acarició con suavidad. Seok Jin mordió el grueso labio inferior del moreno y éste sintió su entrepierna vibrar.

Nam Joon alejó su rostro, rompiendo el beso y su pulgar llegó hasta la comisura de los labios de Seok Jin. El castaño sonrió y comenzó a dejar pequeños besos por el dedo, pasó su lengua por la punta y terminó por meterlo en su boca.