Something new

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-Espero que tu estancia aquí sea de tu agrado- comentaba SungMin mientras recorrían los pasillos desolados del hospital.- no mucha gente le agrada la idea de cuidar a personas como las que atendemos en este lugar, la gente no se adapta....bien al entorno y a las reglas.

-¿Reglas?- Jan Di no entendió muy bien al comentario de su nuevo compañero, ¿a qué se refería con... reglas?

-Veras Jan Di, existen un par de reglas para el personal que está en capacitación y no llevan mucho tiempo trabando- detuvieron su caminar.- te lo diré, de hecho planeaba decírtelo una vez que llegaras con el señor Kwo para firmar tu contrato, eres una enfermera con un estudio en psicología admirable, por esa razón eres una de 100 personas en ser elegidas para cuidar del edificio restringido.

-¿Restringido?- las dudas se creaban en su cabeza. Los cables se conectaban de poco en poco para al fin llegar a una conclusión sólida y estable.

-Es el edificio donde se encuentran los casos de alto riesgo, son los pacientes más peligrosos que se presentaron en el país de Corea del Sur y necesitamos ayuda con sus tratamientos. Muchos de los enfermeros dejaron el puesto por esa razón, eran agredidos por ellos o simplemente dejaban el puesto de la noche a la mañana.- por alguna extraña razón no lograba aceptar el hecho de que fue elegida sobre 100 personas para tal tarea, la mirada de SungMin no había dudas o algún tipo de inseguridad.

-¿Es por eso que me pidieron a las 24 horas que viniera?- SungMin asintió con la cabeza afirmando su conclusión- y los demás enfermeros ¿qué pasará con ellos?

-Ellos tendrán a sus capacitadores para les apoyen en todo, tendrán los pacientes de acuerdo al área de medicina se adaptan mejor, ahora están presentando un examen para saber qué tipo de pacientes lograran más fácil adaptarse, al final sí logran pasar el examen, firmarán el contrato con el señor Kwo.- señaló una puerta decorada con pintura azul rey con detalles dorados- el señor Kwo te está esperando Jan Di.

Con un poco de miedo Jan Di llamó a la puerta, escuchó un grueso "pase" detrás de ésta, su mano tomó con miedo la perilla circular y la giró lentamente, abrió la puerta entrando a la oficina del dueño del hospital. Al pasar cerró la puerta dejando a SungMin en espera; el salón estaba pintado de un color gris acero, los muebles de cuero blanco y negro dando contraste a piezas de metal decorativas de la habitación. Su mirada se fijó a un señor canoso con la mirada más fuerte y tenebrosa que ha visto aparte de la de su padre; se acercó al escritorio sin articular una sola palabra, su garganta estaba seca en el momento que cruzaron miradas, se quedó parada entre dos sillas que se encontraban frente el escritorio de roble. El señor Kwo le señaló educadamente una silla con la mano, dándole a ofrecer el asiento, sin seguir en decir nada aceptó la oferta y prosiguió a sentarse en la silla de cuero.

-Choi Jan Di, la mejor alumna en enfermería de la Universidad de Salud en Seúl, ¿cómo siente el lugar?- su voz gruesa y firme sintió escalofríos recorrer su columna.

-Algo vacía y con olor a medicina- soltó inocente provocando una risa grave proveniente del señor Kwo.

-Lo siento, las palabras qué esperaba era "loco, con desesperación en todo el lugar" pero me he equivocado, te he juzgado mal y te pido disculpas por eso- Jan Di se sonrojó por el comentario que recibió.

-No, no creo que sea desesperante este lugar, yo creo qué hay esperanzas en los pasillos y habitaciones del hospital, el psiquiátrico no es para encerrarlos y experimentar con ellos, es para curarlos y hacerlos sentir mejor con ellos mismos para que salgan al mundo sin obstaculos.- el señor Kwo se quedo sin palabras, hace tiempo que no escuchaba ese tipo de inspiración o motivación para un lugar donde abundan las personas con problemas psicológicos.

-Me impresiona tu pensar del lugar, tal vez no nos equivocamos contigo, espero que des frutos al terminar este recorrido.- le tendió una hoja de papel y un bolígrafo negro, Jan Di leyó cada palabra, sílaba y letra del contrato, las cláusulas, los seguros, los compromisos y las reglas, llegó un punto señalado con rojo que al leer se quedo un poco pálida y sorprendida.

"El empleado no debe mostrar los expedientes de los pacientes que se le asignaron a sus compañeros ni llevarlos a las habitaciones de los mismos, si el empleado llega a romper esta regla dejará las instalaciones de inmediato y será denegado el servicio en otras instalaciones de salud."

Jan Di levantó la mirada y notó la seriedad del señor Kwo. Las dudas del por qué existe ese edificio y por qué nadie debe saber de su existencia estaba matándola, debía aclarar sus dudas paro sería en otro momento, ahora sólo debe firmar el contrato y estar oficialmente registrada en el sistema. Sin pasar un segundo más, firmo el contrato el señor Kwo le tendió la mano para cerrar el contrato, con un poco de miedo Jan Di le dio un ligero apretón de manos, la mano del señor Kwo era cálida y un poco suave. Salió de la habitación y se encontró solo el pasillo, SungMin desapareció, tal vez tuvo un emergencia o algo parecido.

Decidió recorrer los pasillos blancos sin tratar de perderse buscando a SungMin, de repente sintió un dolor agudo en cabeza, le vino a la mente: era ella tratando de protegerse con el brazo estirado de un señor que desconocía; sentía miedo y dolor por todo su cuerpo, su mirada bajo lentamente encontrandose vestida con ropa vieja, sucia y rota como si se hubiera caído de un prado. El hombre parecía molesto, su aspecto era sucio y desarreglado, en su mano llevaba un cinturón de piel con el que la golpeaba no pudo verle bien el rostro pero estaba segura de que no conocía a ese hombre. El cuarto era obscuro, no habia nada mas que ellos dos, están arrinconada en una esquina y no logró ver las paredes ni de que color era el suelo, nada y así como llego la imagen así desapareció.

¿Un déjà vu o un recuerdo?, no, el recuerdo lo descartó de inmediato, ella jamás había conocido a ese hombre y en lo poco que vió en el déjà vu era que su piel era muy pálida, como si fuese de papel cebolla, quitó ese pensamiento de su mente y prosiguió a busca de SungMin. Tal vez era un recuerdo suyo pero era muy diferente a lo que vivió en realidad, había cosas que.... no concordaban.

Hondong (혼동)Where stories live. Discover now