❄Capítulo 5❄

428 43 11
                                    

Era el día, no había podido dormir muy bien esa noche; se encontraba muy nervioso.
Fubuki se había quedado a dormir en su propia habitación, sus compañeros de cuarto no estaban enterados de su enfrentamiento, así que solo salió de ahí y se dirigió al lugar acordado, estaba algo apartado del resto, cerca de donde se dejaba las bolsas con basura.

Allí todos lo esperaban, hasta Fubuki había madrugado sólo por él.

-¿Nervioso?-le preguntó el albino.

-Un poco.-contestó sinceramente mientras observaba como su oponente se estiraba.

-No deberías, como asesino no tendrías que ponerte nervioso con algo tan insignificante.-le entregó un cuchillo.-Aquí tienes, lo elegí por tí.

-¿Un cuchillo?-preguntó recibiendo el objeto.-¿La pelea no es a mano limpia?

Fubuki lo miró en silencio por unos segundos y prosiguió a contestar.

-Las peleas clandestinas casi siempre son con cuchillos, pueden haber excepciones pero esta no es una.

-Comencemos de una vez, niño.-la voz de Nagumo se escuchó.

-Buena suerte, Ishido-kun.-dijo Hiroto que estaba junto a Endou.

-Oh, gracias.

La mano de Ishido sostuvo el cuchillo con firmeza, pero no podía evitar que por momentos le temblara.
Una persona explicó la única regla que había; no matar a tu oponente, luego todo valía.

-¡Comiencen!-se escuchó y el público retrocedió unos cuantos pasos.

Ninguno se movió al principio, se miraron fijamente, aparentemente Nagumo no quería cometer su error anterior de atacar primero, algo le decía que tenía que esperar. Entonces, Ishido decidió acercarse de manera veloz. Gran error. Nagumo aprovechó esa oportunidad, esquivó con gran habilidad el primer ataque y pudo hacer un corte algo profundo en el abdomen izquierdo.

Afortunadamente Ishido retrocedió lo suficientemente rápido para que aquél metal no se introdujera más en su cuerpo.

-Wah, ahora mi uniforme tiene una gran mancha roja, que molestia.-bromeó el chico.

-Dejame que lo empareje por ti.-contestó Nagumo acercándose y atacando con la navaja.

Pudo sentir el filo pasar muy cerca de su piel, su mejilla izquierda había sido herida, por fortuna se había movido lo suficiente para no recibir un daño mayor.
Hábilmente utilizó su pie derecho para propinar una patada en el estomago a su oponente.

Bien, su rival había caído de espaldas al suelo, era su oportunidad. Intentó avanzar pero el dolor punzante en su abdomen se hizo presente y se le dificulto la tarea.

Nagumo seguía en el suelo, tenía que moverse ahora o sino perdería.
¡Su maldito cuerpo no le obedecía!

-Ishido-kun.-pudo escuchar la suave voz de Fubuki y volteó a verlo.

Se distrajo, su contrincante ya estaba de pie listo para el ataque.

-Entonces...¿quién crees que ganará?-Hiroto le preguntó al chico inexpresivo.

Fubuki lo miró de reojo, dudando un poco al principio sobre responder.

-Es obvio.-dijo.-Ishido-kun ganará.

-Je, suenas muy seguro de eso.-comentó sonriendo.

-Es que es lo que pasará.-dijo simplemente.

Hiroto paseó sus ojos alrededor suyo, primero observando como Ishido retrocedía para no recibir un buen golpe, luego hacia Nagumo quien sonreía burlón, por último su vista se posó en Shiro.

Snow and blood [Goenji x Fubuki]Where stories live. Discover now