Special feelings. | PAUSADA POR EDICIÓN.

Capítulo 36: Solo recuerda lo que ha pasado.

JACKSON.

Entre al restaurante donde había echo la reservación para que Annie y yo comiéramos. Me senté junto al ventanal donde a ella le gustaba sentarse. Todavía faltaban quince minutos para la hora acordada.

-Llegas temprano-me dijo Annie parándose a mi lado.

Me apresure a levantarme y le sonreí emocionado, me sentía tan nervioso, como sí fuera una primera cita. La abrace levemente y ella levantó su rostro y nuestros labios se unieron en un pequeño beso. Oh sólo Dios sabía como me mataba eso. La ayude a sentarse y luego me senté yo.

-Quería verte-le sonreí-después de lo de esta mañana-me encogí de hombros.

-También yo quería verte-me sonrió y se puso a ver el menú.

Minutos después, el mesero había tomado nuestra orden, ella pidió una ensalada de pollo con durazno y yo pedí pato en arándano.

-Jay... ¿Cómo estas?

-Bien, ahora todo esta mucho mejor-le sonreí.

-¿Cómo te sientes? Respecto a tus padres.

-Bueno, mi padre no quiere regresar, sigue en Montana y mis hermanos han ido por el.

-¿Tu mamá como lo lleva?

-Esta tranquila-solté un suspiro.

Nos quedamos en un silencio algo incómodo. Y entonces me arme de valor.

Pero Annie se me adelanto.

-No estoy preparada para estar contigo-me sonrió de lado-no quiero que se estropee, además con el bebé cuando nazca estaremos tanto tiempo juntos como lo desees, inclusive si quieres acompañarme a los ultrasonidos y en los meses que faltan, esta bien.

-¿No quieres volver a estar contigo?

-Ahora no, quizá mañana tampoco. Quiero pero no lo haré.

-¿Por?

-Pues, de alguna manera estaría traicionándome a mi misma, además...

-¿Annie?

-¿Sí?

-¿Por qué no?

-Ya te lo he dicho-agacho la cabeza.

-Y me dijiste que ibas a estar conmigo pasara lo que pasara. Yo aún quiero estar contigo-busque su mirada cuando ella alzó la vista nuevamente-quizá me comporte como un estúpido el día de la cena con tus abuelos, pero joder Annie... No tienes ni una mínima idea de como me siento al imaginarme que seremos padres. Que dentro de unos meses tendré a una pequeña tu en mis brazos.

Ella me sonrió conmocionada, estiro su mano sobre la mesa buscando la mía la cual le ofrecí dando un ligero apretón.

-Y debo preguntar... ¿Segura qué sólo es porque te lastime?-apreté los labios.

-Jay, ha pasado casi un mes y aún siento como sí me estuvieras gritando las cosas del otro día. Y sí tu comentario lo dices por Erick, créeme que jamás lo veré ni lo veo como lo estoy haciendo contigo. Y en este momento.

-¿Entonces porque no?-insistí entrelazando sus dedos con los míos.

-Porque quiero que funcione-dijo muy bajito-lo hago por mi seguridad y porque no quiero que el bebé crezca sin su padre.

-¿Tu seguridad? Annie, yo jamás te haría daño. Y mi hijo no estará sólo.

-¿Por qué me lo pones más difícil?-su sonrisa delato el otro sentido de su pregunta.