Vientos Del Pasado (Yasuo x Riven)

20

Narra Riven:

Escuchamos pasos acercarse a nosotros, Talon me llevó hasta unos arbustos, Talon hizo un silbido parecido al de un pájaro, luego vi que Katarina se hizo presente, no veía a Yasuo, me levante rápidamente para ir hasta ella y preguntarle.

-¡Riven espera! - gritó Talon pero ya era tarde, la persona que había visto cambió drásticamente su aspecto al de Leblac.

Ella me golpeó con su bastón en el rostro y me hizo caer. Talon actuó rápido y se abalanzó sobre ella, pero ella dio un salto hacia atrás. El lanzó sus shurikens pero ella se teletransportó fuera del rango, cuando las giratorias cuchillas volvieron a manos de Talon, Leblan hizo lo mismo con su posición, para después golpear con su bastón a mi amigo en el abdomen, el avanzó para atacar con su cuchilla pero ella la detuvo con el mango de su centro y luego encestarle una patada en el rostro.

- Por un momento pensé que estaba sudando. - yo me levanté y fui a acudir a Talon. -Vaya, vaya ¿Que tenemos aquí? -

-Dejame esto a mi - le dije miágilas le ayudaba a sentarse.

-Me sorprende que hayas estado dos veces a punto de morir en esta isla, parece que no puedo mandar a un joniano a hacer el trabajo de un noxiano. - dijo poniendo una mano en su cadera.

-Fuiste tu quien les pagó para pagarme - dije retandola.

-Correcto- contestó - y también la que besó esa linda reportera rubia. - apreté los puños de la ira - tiene unos suaves y lindos labios, estoy segura que a tu amigo le hubiera encantado besarla, la miraba cada vez que tu no le veías. - esa fue la gota que derramó el vaso, sabía que solo lo decía para molestarme y lo consiguió.

Tomé mi espada y avancé para atacarla. Ella comenzó a reírse mientras esquivaba mis ataques, era demasiado ágil, una que otra vez el fierro de su bastón chocaba con la hoja rota de mi espada. En un forcejeo dejó que mi balance ganara y mi espada pego contra el suelo.

- con el cabello largo o corto sigues pareciendo mas vieja que yo. - dijo a mi oído en una pose de reverencia. La sangre me ardía, vi como su bastón se iluminó - pero aunque aparentes tener edad, solo eres una pequeña traicionera rata blanca. - una esfera de luz se formó en su bastón, rápidamente me separé de un salto, la esfera de luz me siguió, me deslicé hacia un lado y la bloqueé con mi espada, no podía ver nada. - En mi siguiente truco de magia haré desaparecer... - hubo una pausa en su frase - a una peliblanca - completó en mi oído derecho. Rápidamente la corté, pero se desvaneció en el aire. Una cadena apareció en mi cuello, la seguí pero al cabo de unos segundos no me pude mover. - oh, pobrecita, parece una rata atrapada - se acercó y me encestó una patada en el abdomen, caí sobre mis rodilla y manos. - ¿recuerdas que le hacemos a las ratas en Noxus? Permiteme recordartelo. - caí de golpe al suelo, sentía como su tacón se clavaba en mi espalda.

-¡Riven! - Escuché la voz de Yasuo a lo lejos.

-¡Oh vaya, al fin llegas! - yo no podía decir nada, el dolor era insoportable, solo podía quedarme en el suelo viendo lo que pasaba.

-¡Dejala en paz! - gritó Yasuo desenvainando su espada, pero Katarima lo detuvo al instante.

Narra Yasuo:

-¡Guarda eso si sabes lo que te conviene! -

- ¡Oh vaya, pero que tenemos aquí, una Du Couteau y no un bastardo recogido de la calle!- dijo mirando al encapuchado.

-Dejala ir Le blanc -

-¿Estas loca? Una vez haya terminado con esta rata traidora seguirás tu y toda tu familia por intentar ayudarla. - ella pisó con fuerza la espalda de Riven, noté como un hilo de sangre salia desde su espalda