CDM's conflict [Fanfic Corazón de Melón]

CDM (Parte 41)

CAPÍTULO 41

Nath's POV

Pero, ¿Cómo se me ha pasado por la cabeza lo que acabo de hacer? Realmente soy idiota, seguro que ella me odia y piensa que soy un pervertido; la verdad que no quería recordar mi primera vez de esta forma, encima de todo he sido un cobarde y en vez de afrontar las consecuencias he huido... Así... Sin más. 

Camino mirando fíjamente al suelo, tengo la mirada en blanco, siento el aire frío recorriendo tu piel por debajo de la fina camisa y haciendo que se tensen todos los músculos de mi cuerpo, bueno, hay uno que solo lo puede "tensar" Sucrette.

Comienzo a reirme y sonreir como tonto al darme cuenta de lo que acabo de pensar.

Castiel: ¿A qué viene esa sonrisa flacucho?

Nath: ¿Qué quieres?

Castiel: Vas a hacer el papel de príncipe en la obra de teatro con Sucrette

Nath: ¿Y?

Castiel se me acerca hasta quedar hombro con hombro.

Castiel: Rómpete una pierna

Y sigue caminando sin que pueda responder a esa provocación tan obvia.

Castiel's POV

Estoy caminando cuando me encuentro al lado del instituto, al parecer hace poco colocaron un tablón con todas las actividades que haríamos, bah, menuda tontería, igualmente yo no voy a participar en ninguna, son una pérdida de tiempo.

Me quedo mirando un bonito cartel azul claro con el nombre de Sucrette en rosa, espera espera espera ¿Sucrette?

Lo miro mejor, es una obra de teatro, Su va a hacer el papel de princesa, me alegro mucho por ella seguro que interpretar se le da bien como todas las cosas las cosas que hace... Si ella es princesa ¿Acaso habrá príncipe? No... No puede ser, miras alocado de nuevo el folleto y efectívamente.. hay papel de príncipe y ese papel es de... Maldito Nath, no voy a permitir que se acerque tanto a ella, no no y ¡Mil veces no!

Sucrette's POV

Has cogido rápido tu ropa y te has ido corriendo a la ducha, te has labado bien y te has puesto el pijama, ¡Esto es de locos! Comienzas a leerte el guión hasta que tus párpados pesan demasiado y te duermes en tu escritorio.

Después de varios minutos durmiendo un grito te despierta.

Tía: ¡SUCRETTE!

Te despiertas sobresaltada y miras confundida a todos lados, estás en tu escritorio, te has quedado dormida.

Tía: SUCRETTE, ¡BAJA AQUÍ AHORA MISMO!

Bajas algo confundida y al llegar al salón ves a tu tía sosteniendo en sus manos la protección que ha usado Nath para hacértelo anteriormente.

Tía: Me puedes explicar qué significa esto

Sucrette: Pues... Nath... Él... No, no se, todo pasó demasiado rápido...

Tía: Por dios Su, tienes novio... — suspira

Sucrette: Admito que fue muy placentero, pero fue él quién se tiró encima mía y comenzo a hacermelo como un condenado

Tía: Bueno, me consuela que haya usado protección...

Ahora que tu tía sabe que ha pasado con Nath, debes contarle el resto, contarle lo que ha pasado durante tanto tiempo, no te da miedo hacerlo porque es tu tía y sabes que no se lo diría a nadie, pero a la vez el pánico está llegando de algún modo a tu mente, sientes miedo, miedo a ser rechazada por ella, miedo a como pueda reaccionar, miedo a que te aleje de este lugar.

Sucrette: T-tía...

Tía: Dime Sucrette

Su voz es dulce y calmada, pero al mismo tiempo es preocupada; las palabras no salen, es complicado describir esa situción, quieres decirle ya todo, quitártelo de encima, sentirte liberada y llorar en su hombro. ¿Pero y si después de decírselo no te queda hombro sobre el que llorar?

Sucrette: Tengo que contarte algo...

Tía: ¿Algo más alocado que esto?

Sucrette: Mucho más, antes que nada, quiero decirte que te quiero muchísimo y que por eso te lo voy a contar...