Porque tú eres mi esperanza.

Capítulo 14.

By Bill.

- ¡Vamos chicas! El desfile esta apunto de comenzar y mis chicos ya están listos, ¿porque tardan demasiado pequeñas? ¡Recuerden que ustedes deben abrir el evento! - Andrej se paseaba de un lado a otro con evidente frustración.

Estábamos a una semana de halloween y la compañía, como cada año, hacia un evento que comenzaba con un desfile y después una subasta para cenar con los modelos y así recaudar fondos y donarlos a niños necesitados además de hacer una pequeña fiesta para ellos por noche de brujas.

Este año yo sería uno de los principales, llevaba un traje ostentoso muy bien elaborado que me había complicado el movimiento dentro del lugar.

- Tranquilo cariño, te saldrán arrugas - me acerqué a él por la espalda para comenzar a masajear sus hombros.

La tensión se sentía demasiado en aquel ligero cuerpo, instintivamente lleve mis labios a su cuello y repartí pequeños besos mariposa para ayudarme en el proceso de relajación. Todo fue un acto reflejo, ni siquiera pensé al momento de hacerlo, sólo seguí mis instintos.

- Eres divino Bill, lo juro. Tus manos son prodigiosas - alago mientras tomaba ambas manos mías y las besaba con delicadeza, después sacó un pintalabios rojo y lo pasó por mis labios para luego  corregirlo con la yema de sus dedos y colorear los propios.

- Aquí el único prodigioso eres tú, así que tranquilo. Todo saldrá bien - asegure abrazándolo por los hombros.

- No Bill, no será así - entonces su frustración volvió a flote - ¡La vida conspira en mi contra! - dramatizó.

- Nadie conspira en tu contra...

- ¡No te atrevas a negarlo Bill! - me señaló con un delgado dedo mientras me miraba con el ceño fruncido y después se llevó las manos a la cabeza dejando escapar un suspiro... se venía su descarga emocional - ¡Cielos! ¡Pedí a mis maquillistas que crearán monstruos sexys e hicieron de mis modelos monstruos aterradores! ¡Solicite, al estupido presidente de la compañía, complementos para los cosplay y parece que encontró todo en un bote de basura! ¡Mis personajes no están completos así! ¡Tengo una hora para abrir el desfile pero debo abrirlo diez minutos antes como es costumbre mía y no será posible! ¡Seré el hazmerreír del medio! ¡Mis chicas no logran terminar cambiarse para abrir el evento a mis estrellas! ¡Mis estrellas están listas... - dejo de hablar para comenzar a buscar con la mirada por detrás de mi - ¿Y Nick? ¡¿En donde está Nickolas?! - pregunto alterado.

- ¡Aquí estoy! - Nick apareció detrás de mí.

Venía luciendo un conjunto negro, un pantalón ancho y más largo para sus piernas que estaba por dentro se su calzado, no tenía una camisa y llevaba la chamarra abierta, sus rastas estaban amarradas en una coleta alta mientras una pañoleta estaba atada a su cuello acomodada sobre su pecho, tenía puesto unos pupilentes rojos y el cuerpo completamente maquillado de blanco, habia sangre falsa corriendo en finas líneas por su cuello y pecho, unas botas militares le aumentaban algunos centímetros a su estatura y arrugaba el pantalón por debajo de la rodilla, sobre sus rodillas, a la mitad de la pierna, llevaba unos arneses donde pistolas se asomaban mientras que en el cinturón de su pantalón, por la parte de adelante se asomaba un puñal.

Se veía muy bien.

- ¡Nick! - Andrej se lanzó sobre él envolviéndolo con sus brazos - Creí que no estabas aquí - comentó relajándose de pronto.

Recién deje el grupo, solicite trabajo con mis ex protectores. Ashley dijo que necesitaba diseños para remodelación de una casa, me envió fotos y planos para trabajar en ello. Lidia me pidio que me encargará de ir y venir de su casa a la compañía una vez a la semana para poder solucionar lo que en ella se presentará, apenas llevaba seis visitas desde entonces. Andrej me dio dos trabajos, el primero, formar a Nick como modelo, darle una rutina de entrenamientos y alimentación para que pudiera entrar al grupo de modelos de Andrej y la otra era recuperarme pronto para volver a ser la imagen de sus campañas. Ha Ni me pidió que enseñará inglés a Nick, quería que el aprendiera idiomas como yo. Por alguna razón, los dos últimos tenían un interés por mi hermano, tanto que se aparecían por el departamento de vez en vez para vernos.