Vida después de la muerte.

V

Desperté con el canto de un gallo, me escabullí silenciosamente para no interrumpir el silencio y despertarlos, me dirigí a la puerta trasera y giré con mucho cuidado la perilla, ya que esta con un movimiento brusco rechinaba.

Pero fue en vano, aquel ruido me delató haciendo un gran eco por los rincones de la casa. Mi abuela se despertó pero en vez de regañarme por ver que había pasado la noche afuera se me acercó lentamente y me abrazó

–Se que tu también sentiste lo que yo esta noche y es necesario que me cuentes todo lo que viste

–No comprendo de que hablas abuela.

–Es difícil que me mientas por que te conozco muy bien, anoche... tu padre estuvo aquí, lo pude sentir y se que tu igual

–Anoche, como siempre me puse a recordarlo y a platicar con el, pero algo peculiar ocurrió, mire la silueta de un hombre enfrente de mi pero al instante desapareció.

–Yo también he mirado ese espíritu rondando por la casa, tienes un gran don pero el no es tu padre, es un ser maligno que se oculta en las sombras, cuídate de el, debes hablar con tu padre siempre será tu protección

Sentí escalofríos recorriendo por todo mi cuerpo, estaba aún mas confundido quería averiguar quién era ese espíritu pero mi abuelo también se despertó y no pude seguir charlando, entendí que tal vez quería que yo le diera el camino a la luz.

Abrase a mi abuela con tanta ternura, pero en mi mente seguía la duda de lo que había visto.
Tenía que haber una explicación de todo esto ¿a donde se van las almas al morir?