Capítulo 33

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Lucía esperaba a Elena en la tienda que de juguetes que tanto le gustaban a las dos y se decía una y otra vez ¿por qué cuando su vida estaba tranquila volvía el pasado a hacerse presente para atormentarla? pero  no dejaría que el imbécil de Lucas venga de nuevo a hacer de las suyas como ya intento en aquel tiempo ahora es una mujer adulta y por suerte tenia en su vida a Alex.
Cuando iba a coger el móvil para llamar a Elena esta aparecía tan campante y le dijo:
     -Por fin llegas hija estaba por llamarte para decirte que me iba.
     -Pero si aún no hemos terminado de comprar ¿por qué te quieres ir?¿es por Lucas?
     -Si es por él no quiero tenerlo cerca porque no me fío de él.
      -No dejes que Lucas te atormente y dejes de hacer tus cosas porque se te aparezca y además sabes que cuentas con todos para defenderte y ahora vamos a comprar para irnos a comer con Alex.
       -¿Comer con Alex pero sino yo no he quedado con él hoy?
       -Jajaja aún no me conoces yo si he quedado con él mientras venía para acá porque sabía que ibas a necesitar su apoyo.
       -Tu siempre siendo tan cotilla hija no cambias.
        -Genio y figura hasta la sepultura Lucía.
Ambas se echaron a reír ante lo dicho por Elena.
Mientras tanto Lucas estaba en su casa contento por su encuentro con Lucía y sobretodo por el cabreo que está había cogido lo que le hacia desear volverse a encontrar pero esta vez tendría que estar ese novio suyo para empezar con mi plan de separarlos. Estaba tan distraído en sus pensamientos que no vio que su amante de turno le estaba hablando:
     -Pero Lucas me quieres escuchar ya que llevo rato hablándote y tú como si nada.
     -No sabía que estabas aquí.
     -Se te ve contento ya ¿te has visto con esa tal Lucía?
     -Eso no es asunto tuyo.
     -Claro que es asunto mio ya que soy tu mujer y no quiero compartirte con esa zorra.
Lucas al escuchar que llamaban zorra a Lucía se puso de pie y agarrándola del brazo le dijo:
      -Nunca más en tu asquerosa vida la vuelvas a llamar así porque ella vale diez mil veces más que tú y tu no eres mi mujer solo una zorra a la que me follo.
       -Sueltame Lucas me estas haciendo daño.
       -¿Te crees que me importa que te duela? Sabes quiero que te vayas de mi casa ya no me sirves para nada y me canse de ti.
       -Te equivocas Lucas yo no me voy a ninguna parte porque tú eres mio y te conviene tenerme a tu lado porque sino esa tal Lucía sabrá quien soy yo.
       -¿Me estás amenazando?
       -Tomalo como quieras pero ten por seguro que estas atado a mi para siempre porque se muchas cosas de ti que pueden hundirte en la mierda.
       -¿Además de amenazarme me estas chantajeando con hundirme? Eres patética.
      -Seré todo lo patética que quieras pero aquí me tendrás siempre a tu lado porque estas solo como yo porque personas como nosotros nacimos para estar solo y sabes que llevo razón.
       -Esa es una carga que por desgracia tengo que llevar a cuesta pero no esperes nada más de mi porque solo recibirás mi desprecio.
       -Eso me da lo mismo Luquitas pero tengo la certeza que nunca podrás estar con tu Lucía porque no podrás compartir tu vida con la suya.
       -Será mejor que te calles porque no responderé de lo que te pueda hacer.
       -Te duele saber que ella si estará acompañada por su novio y será feliz cuando este la tenga en su cama haciéndole el amor mientras tu te retuerces de los celos sin poder hacer nada.
       -Ojalá te mordieras la lengua hija porque eres malvada.
       -Dices querer vengarte de ella porque te humilló siendo niño pero tú mismo sabes que no podrás hacerlo porque estas perdidamente enamorado de ella pero tu conciencia no esta tranquila desde aquella noche que nos conocimos y de lo que hicimos.
Lucas sabia que ella tenia razón pero por ningún motivo iba a reconocerlo delante de ella porque eso sería ponerse la soga al cuello él solito fue por eso que se marcho para no seguir atormentándose por lo que le había dicho pero mientras se iba puedo escuchar una cosa más:
      -Eso vete como el cobarde que eres pero piensa que ella esta noche estará en los brazos de otro mientras que tú estarás solo o en los mios así que vete asumiéndolo Luquitas.
Cuando había desaparecido Lucas en su habitación esta se dijo para si misma(ahora es mi turno de encontrarme con esa zorra y dejarle bien claro que Lucas es mio y siempre lo será)
Ajena a todo estaba Lucía que comía junto a su novio y a su hermana y los tres estaban riéndose de las tonterías que decía Elena que sabia como hacer para ponerle una sonrisa a Lucía en su cara pero cuando estaban por irse Elena empezó a marearse y gracias que Alez estaba a su lado que la pudo agarrar y sentarla en la silla de nuevo le dijo:
     -¿Elena estas bien?
     -Si solo fue un mareo que me dio al levantarme.
     -Nos vamos para casa Elena de mi mama y me da igual que patalees o protestes porque te llevare a rastras sin importarme nada,le dijo Lucía un poco asustada al verla marearse.
Cuando los tres llegaron a casa de Ángela esta al escuchar a Elena protestar con Lucía se acercó a ellas y le dijo:
      -¿Pero que os pasa niñas?
Fue Lucía quien habló y le dijo a su madre:
      -Hola mama espero que no te moleste que hayamos traído a Elena porque estábamos en el centro comercial y se ha mareado y esta loca no se quiere echar a descansar sino que quiere seguir comprando.
      -Loca tu Lucía que yo estoy bien y no quiero estar tumbada.
      -A ver Elena sabes que te tienes que cuidar y un mareo no es para tomárselo a la ligera pero quien debe decirnos si debes descansar es tu médico y mira por donde esta aquí.
Las tres mujeres lo miraron para que dijera algo ya que estaba apartado sin decir nada pero él estaba con Lucía y Ángela así que le dijo a Elena:
      -Elena como tu médico y amigo te recomiendo descansar el resto del día dejando los agobios de las compras para otro día y mañana quisiera verte en la consulta para ver lo de tus maeros.
      -Otro aguafiestas y vale me iré a la cama como las enfermas e inútiles, dijo Elena antes de subirse a su habitación.
Una vez Elena hubo subido Alex sabia que tanto Lucía como su madre le harían preguntas y les dijo antes que abrieran la boca:
      -¿Me vais a preguntar sobre esos mareos a que si?
      -Si Alex queremos saber si son normales esos mareos.
      -Voy a ser sincero con ustedes esos mareos irán a más porque Elena necesita su medicación pero por su estado es imposible que la tome además ella es reacia a interrumpir o hacer daño a su bebe.
      -¿Ella te ha dicho en estos meses si ha sufrido otros mareos y dime la verdad?
      -Lucía yo no tengo porque mentirte pero yo no tengo constancia que haya sufrido otros mareos.
      -Se que me estas ocultando algo más Alex y no te creo.
      -No me gusta que dudes de mi Lucía y te he dicho que no se nada más de sus mareos y para que te quedes más segura debería ser ella quien te diga si los ha tenido o no.
      -Hija Alex no tiene la culpa de nada y no esta bien que dudes de él así como así porque él también se ve que esta preocupado por ella y además estoy segura que Elena no nos ocultaría algo así sabiendo que nos preocupamos por ella.
       -Mama aún no conoces a Elena pues claro que nos ocultaría algo así porque no quiere que le tengamos pena y Alex siento haber dudado de ti pero entiendeme esa loca que esta ahí arriba es mi hermana y no quiero que le pase algo.
       -Te entiendo Lucía porque yo estoy igual de preocupado por ella porque somos amigos desde hace tiempo y quiero que este bien.
        -Ya que todo esta claro dejemos a Elena descansar un rato y nosotros vamos a tomar un café ¿os apetece? le preguntó Ángela a la pareja.
       -¿Y papa y mi pequeña donde están mama?
       -Pues fueron a comprar algo para merendar pero conociendo a esos dos dios sabrá donde se habrán metido.
       -Pues entonces me parece a mi que nos quedamos sin merendar solo el café mama.
Los tres se echaron a reír ante lo que había dicho Lucía y mientras Ángela iba a la cocina a preparar el café Alex le preguntó a Lucía:
       -¿Me vas a decir ahora que estamos solos porque Elena me llamo diciéndome que necesitabas mi apoyo?
       -No debió llamarte pero ya la conoces y no era por nada.
       -Sabes ahora soy yo quien no te cree porque te conozco lo suficientemente bien para saber que mientes pero ya sabes que puedes decirme lo que sea y que cuentas conmigo para lo que sea Lucía.
       -Lo se Alex que puedo contar contigo pero estate tranquilo que no me paso nada.
       -Si tu lo dices esta bien pero se que me estas mintiendo.
       -Esta bien te lo diré solo tuve un encontronazo con el pasado.
       -¿El pasado? Es la persona que te manda esos mensajes.
Lucía al escuchar lo de los mensajes pudo ponerle a esa L y no era otro que el imbécil de Lucas.
Alex vio que Lucía se quedo callada cuando le recordó lo de los mensajes y le dijo:
       -Bingo acerté a que si porque te has quedado callada y pensando.
       -Si me encontré con alguien y ahora al decir lo de los mensajes le puse nombre y rostro.
        -¿Y no pensabas decírmelo cierto?
        -Si pensaba hacerlo pero con lo de Elena se me ha pasado.
        -Venga chicos que ya esta el café listo.
        -Tú e yo debemos hablar más tarde.
        -Vale.
Lucía y Alex fueron a sentarse junto a Ángela que los esperaba en el salón con el café recién hecho y cuando estaban sentándose llegaban Samuel y Mónica que al ver alli a Lucía salió corriendo para darle un abrazo y le dijo:
      -¡Que bien que estés aqui!
      -Princesa ya pensaba que no te veríamos ya que me dijo mama que fuisteis a comprar algo para la merienda pero tardabais mucho.
      -Esta niña que se entretiene en todos los escaparates y con sus amigas así que la próxima vez me iré solo.
      -Pero papa viste que vestido más chulo vimos ¿me lo comprarás?
      -Uy no se yo me lo pensaré y ¿cómo que ustedes están aquí pero no veo a Elena por ninguna parte ella no vino?
       -Porque estábamos de compras y después de comer íbamos a seguir comprando cosas para el bebé y se mareo por eso la traimos aquí por suerte Alex estaba con nosotras.
     -¿Y no seria mejor llevarla al hospital Alex?
     -No te preocupes Samuel solo fue un pequeño mareo debido a los ajetreos de las compras y ya mañana le he dicho que vaya a mi consulta.
     -Cosa que no haré ¿para que me digas otra vez que me deshaga de mi bebé?
Todos se sorprendieron al escuchar a Elena ya que la hacían descansando pero cuando Lucía fue a hablar Samuel le hizo una señal y dijo:
      -Claro que iras Elena y es más yo te acompañare porque debes cuidarte por ti y por ese bebé que crece dentro de ti.
       -Tío no te metas en esto porque es mi vida he tomado la decisión de no ir.
       -¿Qué no me meta en tu vida? Para mi eres una hija más como lo son Lucía y Mónica y se muy bien que eres una mujer adulta pero cuando te conocí y me case con tu tía me prometí a mi mismo que no dejaría que os pasara nada malo a ninguna de las dos así que  no me vengas diciéndome que no me meta en tu vida porque lo haré una y mil veces Elena,dijo Samuel algo cabreado antes de irse.
      -No me miréis así vale me he equivocado al decirle eso al tío pero nadie se pone en mi lugar porque todos me aconsejan que interrumpa mi embarazo porque creen que es lo mejor para mi salud pero yo se que eso no valdrá para nada porque me moriré de igual modo así que yo quiero darle la oportunidad a mi bebé que nazca.
      -¿Te vas a morir Elena? le preguntó Mónica llorando.
La pequeña corrió hacia los brazos de su madre que se la llevo para su cuarto para calmarla. Ni Lucía ni Elena decían nada solo se miraban sin decirse nada y Alex para romper el silencio dijo:
     -Lucía debemos irnos y Elena te espero mañana en mi consulta.
     -¿Os vais sin mi?
     -Claro que nos vamos sin ti porque esta noche te quedas aquí además debes solucionar lo de mi papa y sobretodo hablar con Mónica.
Elena vio como la pareja se iba sin ella pero Lucía tenia razón y debía solventar ese problemilla que había tenido con su tío.

    

   

      

Un Regalo Para Lucía Where stories live. Discover now