15- Luchando Por Ti

428 34 3
                                    

Narra Milo

Poco después de eso,  dormí un poco y eso es como cinco horas,  el hambre me despertó pero mi sorpresa fue grande al notar como unos fuertes y cálidos brazos me envolvían juntandome a su pecho, Camus se quedó conmigo y también estaba dormido.  Mi bebé pronto se comenzó a mover,  eso siempre sucede cuando estoy con Camus.  El hambre me gana,  silencioso y con cuidado me levanto de mi camita y me acerco a mi pequeña estufa donde empiezo a hacerme mi comida y la de Camus, ambos tendremos mucha hambre.  Tarareo algo mientras cocino,  de aquí para allá me movía y en una hora ya tengo todo listo y caliente,  mi estomago ruge más.

–––Siempre me ha gustado mucho tu comida, mi escorpión ––doy un pequeño salto del susto y al voltear lo veo ahí sentado,  sonriendome a lo que me sonrojo.

–––E-Es común y corriente,  no hay nada en especial pe-pero ya deja de hacer eso y comamos,  o si no largo de mi casa,  ya bastantes atribuciones te diste al abrazarme mientras dormia ––le doy su plato de comida y tomo el mio para sentarme en la cama y comer yo en completo silencio.

–––Gracias y no es corriente,  estoy seguro que si colocas un negocio donde vendas tu comida,  te iría muy bien Milo y el otro asunto,  no me alejaste así que no iba a desperdiciar el hecho de sentirte otra vez y a nuestro bebé.  ––no respondo pero enrojezco más,  sigo comiendo o más bien devorando la comida y sin responderle.  Desgraciado solo haces que me confunda,  desearía un cofre mágico para guardar mis alborotados sentimientos y así no volver a cometer un error. Terminamos sin más platicas de por medio, después lavaría eso.

——Camus se está haciendo algo tarde y creo que has de tener mucho trabajo, eso lo se de sobra

——Milo, esta bien. Nos vemos tal vez en la noche o mañana temprano, para comer juntos. ¿Te parece? –le noto contento pero ¿Y Saga?

——Ah esto...no se si pueda Camusapenado bajo mi mirada.

——¿No podrás? ¿Por qué? –dioses que no se enoje por favor.

——Esto...es que siempre llevo mi comida y bueno también la de...

——La de quien, ¿Milo?

—— La de Saga, es una costumbre que tengo con él y con Surt, comemos los tres en nuestra hora libre. —oh no, otra vez sus ojos tristes pero después se iluminan otra vez, éste no es el Camus que conozco.

——¿Y qué tal ir a cenar? Seria algo sencillo y en nuestra casa, para que sea rápido.

——Ah pues... No se... —dudo pues no se si es buena idea, veo como se pone triste, otra vez Camus eres un desgraciado, sabes que jamás puedo decir que No si haces esos gestos tiernos— Esta bien Camus, cenaré contigo en Tu casa.

——Nuestra, aún es nuestra. No pierdo las esperanzas de que vuelvas a mi lado. Y gracias Milo, te aseguro que será excelente me abraza con cuidado y coloco mis manos en su pecho alejándolo con algo de esfuerzo, wow pensé que me costaría más.

——Jejeje si Camus pero no creas que caeré tan fácil. Además mi corazón parece que está sanando y abriendo nuevos espacios a nuevas emociones y opciones —sonrío ante esa posibilidad y si tal vez causarle algo de celos a Camus, noto una sonrisa divertida y retadora, se acerca peligrosamente hacia mi y por inercia me alejo más coloca una mano en mi nuca e impide mi retroceso, a estando demasiado cerca de mi rostro para mi gusto me susurra.

—— Entonces yo haré que esos espacios tengan mi nombre y esos sentimientos sean por mi

Y me besa.

T'aimer Fait Mal [Camus x Milo x Saga] Donde viven las historias. Descúbrelo ahora