26. Dates and Mates

1.5K 85 144
                                    

Ian despertó y aún estaba abrazando a Brendon o algo así.

Estaba profundamente dormido aún, cosa muy extraña, ya que Brendon dormía poco y era casi imposible que Ian estuviese despierto antes que él.

Aún así Ian sabía que era normal. Sólo existían dos razones por la que Brendon dormiría horas extra, o estaba moribundo o algo lo atormentaba.

Sí no era por enfermedad era porque o estaba muy triste o tenía muchas cosas encima lo que era éste caso.

Después de una buena siesta o noche de sueño, se despertaría más calmado y con claridad en sus pensamientos por lo que Ian no hizo esfuerzo alguno por despertarlo y en su lugar le hacía cariños distraídamente.

Tomó su celular buscando qué hacer o ver, tal vez intercambiando algunos mensajes de buenos días con cierta persona.

Se entretuvo bastante conversando con él, ya se podría decir que eran buenos amigos, pero eso sí, es bastante evidente que ambos tenían intenciones de avanzar más allá de eso.

Entre varios temas incontables y sin darse cuenta, habían quedado en verse nuevamente ese mismo día.

«La verdad no debo hacer nada más luego de salir del trabajo, tendré el resto de la tarde libre» le había dicho Ian ya algo emocionado porque sabía a dónde iba a terminar aquello.

«Entonces si es así, podemos ir a algún lugar... si eso quieres claro»

Ian al leer aquello casi grita y movió las piernas en reacción.

«Por su puesto, ¿pero dónde crees que podríamos ir?»

Planearon mejor qué iban a hacer esa tarde, como iba a ser pasada la hora del almuerzo pues no era opción ir a comer, y tampoco les convencía ir a un café, ya que para ese entonces iba a ser muy temprano, además era muy típico.

«¿Qué te parece si nos encontramos en un punto exacto y luego decidimos que hacer?» le propuso.

«Me parece buena idea... ¿qué tal Barnes & Noble? acabo de recordar que me interesaba comprar algo allí y lo iba a hacer hoy»

Fue respondido de inmediato en que estaba de acuerdo con aquello, ya tenían sitio y hora... propósito aún no, ya ocurriría algo.

Ian se fijó en la hora y dijo que ya debía empezar a moverse, lo mismo le dijo el chico. Ambos se despidieron y dijeron que se verían más tarde, de todas maneras iban a estar mensajeándose si algo pasaba y para mantenerse al tanto.

Ian le emocionaba tanto la idea, eso en definitivamente era una segunda cita.

Pasó un rato y Brendon comenzó a moverse despertándose.

Ian después de asegurarse de que había despertado, lo empujó bruscamente.

—¡Agh! quítate, que encimoso eres, además duermes como si te estuvieran haciendo un exorcismo.

Brendon se talló los ojos, aún su cerebro no despertaba del todo, estaba un poco confundido.

Ciertamente se veía adorable por lo que Ian se rió.

—Ay, ¿qué pasó? —preguntó.

—Tuvimos una intensa noche de amor y pasión.

—Al parecer ese amor duro sólo un momento. —exclamó Brendon con falsa resignación debido a que Ian lo estaba empujando.

—No cariño, yo siempre te amo. —sonrió.

—Ya sé, pero nunca me apapachas, yo necesito afecto. —dijo como capricho mientras trataba de volver a abrazar a Ian.

Misery Business | BrallonWhere stories live. Discover now