Sin darse cuenta .

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Monic se encontraba en su trabajo , un tanto apurada por salir ya del turno que , le mataba , le jodia los pies y la cintura de estar todo el día sentada .

Ella tenía la esperanza de llegar a casa y dejarse caer sobre su cama , pero sus pensamientos fueron interrumpidos por el teléfono que  la avisó que el jefe la buscaba.
De inmediato y sin pensarlo dos veces , corrió por todo el largo pasillo hasta la oficina de su jefe , el cual , hoy llevaba un humor de perros .

Mónic abrió la puerta de la oficina de su jefe y aclaro su voz .

— dígame señor .

— monic , mañana necesito que llegue temprano por favor , tenemos junta urgente con los japoneses , acaba de llamarme el señor tumo para confirmar la hora , vienen en camino .

El hombre alto y de corbata color vino a juego con sus zapatos de charol estaba mirando hacia la ventana , con las manos dentro de los bolsillos y su perfecto traje planchado .

Adivinen qué , Monic estaba tan enamorada de él que , como ahora mismo , no prestaba atención a lo que la voz ronca le hablaba.

— ¿entendió ? .

Pregunto una vez más al ver que no obtenía respuesta de la chica .
La Morena aclaro su voz y rascó su frente con nerviosísimo .

— perdone , estoy cansada , ¿podría repetírmelo ? .

Pidió amablemente a lo que el oji verde rodo los ojos y bufó .

— necesito que haga un escrito y que lo deje después de la junta , que me haga un espacio en la agenda para salir a comer con diana y que me consiga un anillo .

Monic pasó saliva al escuchar la palabra anillo .
Y es que , su querido jefe , llevaba tiempo saliendo con una súper modelo , la cual trabajaba para una de las compañías asociadas a la de él.

Sintió su corazón abandonarla , puesto que ella llevaba siete años trabajando para el , tenían diferencia de edades , ella había entrado a trabajar con dieciocho años de edad , le había entregado su juventud mientras que el señor styles le había dado la oportunidad por qué había algo dentro de esa chiquilla que le llamaba la atención . El señor styles le llevaba seis  años , Monic veinticuatro ,  el treinta años . Además de que Monic regalaba su trabajo por un sueldo un tanto miserable .

Monic suspiró internamente y quiso lanzarse por la ventana del alto edificio .

— ¿ha entendido ? .

Pregunto de nuevo la voz .
Ella simplemente asintió y después se despidió .

Llegó a su casa hecha un mar de lagrimas , el amor de su vida se iba a casar y ella simplemente sería despechada de la única oportunidad de verlo como algo más .
Ella le había aguantado bastantes cosas , malos tratos , horas extras sin paga , horas de comida saltadas , sin embargo el no parecía notar ni siquiera de qué color eran los ojos de la Morena .
Unos lindos ojos color hazel que , para hacer juego con su pelo , resaltaban increíblemente impactantes .

Llegó a su casa hecha un mar de lagrimas , agradeció vivir sola por qué , no tendría que darle explicaciones a nadie .
Se tiró en su cama y comenzó a llorar con tal fuerza que poco a poco se quedó dormida .

Al día siguiente , Monic no iba a estar del todo bien , ya que , su despertador no sonó haciendo que llegase tarde .
Corrió por los pasillos de la empresa , su tacón se atoró en un desperfecto de la alfombra , haciendo que esta se cayera , las hojas de su informe salieron volando y para agregarle la cereza al pastel , su falda corte lápiz , se abrió de un costado dejando ver el borde de las bragas rojas de encaje que llevaba hoy.

ONE SHOTS || HARRY STYLES || LIBRO 1 (en edición Próximamente) Donde viven las historias. Descúbrelo ahora