Inseguros Deseos

Entre Sombras

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A la mañana siguiente todo fue monótono. Me fui con Agatha, quien se dignó en ir a dejarme a la puerta del departamento de mi abuela, para luego marcharse deseándome que mis heridas mejoraran y esperando verme pronto en la Universidad.
¿Cómo contestar a aquello? Simplemente le sonreí desabrida y cerré la puerta.

Y así fueron pasando los días.
Mi abuela me ha preguntado bastante y le dije que volvió a su casa por asuntos de su familia. Pero no me cree, e insiste en que le cuente que ha sucedido entre las dos y simplemente no sé qué decir. He mantenido en secreto los cortes que Wilma me hizo.
Cobarde, siempre he sido una cobarde. Pero después de esto, ¿Quién seguiría con este tipo de relación? Si... no es culpa de ella. Pero así es su entorno y me siento un insecto entre tantos gigantes con esa vida ajetreada.

<<¿Terminar? ¿Eso fue lo que hice en realidad? Mi corazón se niega a aceptarlo. >>

Un día estábamos almorzando en casa mientras mi padre había puesto las noticias. Y un deja vu sucedió.
El padre de Kate salía hablando de las nuevas reformas que estarán para lo que es la salud del ciudadano, los nuevos planes que se les ofrecerá a las personas para que tengan mejores opciones y oportunidades.
Y en un momento mi corazón comenzó a latir fuertemente al verla a ella junto a otras personas, quienes ayudaran a llevar todo esto a cabo.
Se veía muy hermosa con ese pelo brillante, ondulado que caía por sus senos. Llevaba unos pendientes grandes y relucientes. Su maquillaje hacia resaltar su hermosura y ese vestido blanco que la hacía ver una persona muy elegante y seria.
En un momento le sonrió a una persona cuando le dio la mano y desee que esa sonrisa fuera mía.
Sentí un revuelo en mi estómago y un dolor en mi pecho. Llevaba dos brazaletes elegantes en ambas muñecas y por mi cabeza paso la imagen de sus muñecas heridas por ese metal.
Ahí está, como si nada hubiera pasado. Ahí está, siendo un títere de su familia, llevando esa mascara que muy bien sabe usar. ¿Pero qué tan destruida esta en realidad?

-Se ve hermosa - soltó mi hermana mientras la observaba.

-Hay que admitir que es bonita - dijo mi madre para luego quedarme mirando.

-Lo siento, no tengo hambre - dije levantándome y yéndome.

-Hija, come más por favor -

-Iré a guardar lo último que me queda -

-¿A qué hora sale el avión? Te iré a dejar - dijo mi padre mientras me miraba.

-Hay tiempo. Quiero ir a despedirme de mi abuela -

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Los días pasan y aquí estoy.
Volví a casa después de terminar los asuntos con mi padre y en estos momentos en los que estoy a oscuras en mi habitación mientras intento dormir, sus palabras vuelan abriendo mis heridas. "Es lamentable" "La sangre que llevas... trae desgracias a los que se te acercan" "que tediosa"
Soy de lo peor y comprendo que esto ha superado la barrera de lo que somos.
<<No se merece esto>>
Se perfectamente que debo hacer, pero mi corazón me detiene porque no quiero dejarla ir. Deseo ir tras ella, pero la amo y sé que solo le he traído problemas. Su vida era tranquila y desde que estoy cerca, las cosas no han salido muy bien. Me pregunto una y otra vez "que debo hacer" pero no es que no lo sepa. Simplemente no quiero aceptarlo.

La herida aun me duele, me ha quedado bastante sensible la zona y debo pedirle a Mary que me ayude cuando la ropa es apretada, pero mi corazón está más dolido frente a esta situación. Y en mi mente, ahora que han pasado varias semanas, no he podido quitar de mi cabeza el hecho de que no puedo correr a ella... por su bien. Deseo ir y decirle que todo estará bien... y no es así.