Luego de dos semanas todo ha estado... ash no sé. Mingyu es muy amable conmigo y nos llevamos bien pero debo decir que a veces es tan cursi que... me dan náuseas. Antes también lo era pero ahora está a un nivel superior. Me regala cosas casi todos los días, me escribe poemas, me alimenta como bebé frente a otros e incluso hace carteles con corazones y los pega en la ventana de mis salones. Ash, me gustan los detalles ocasionalmente pero ¿todos los días?, sinceramente me da alergia.
Soy más del tipo que disfruta bromear, discutir por estupideces, molestarse y que luego hayan reconciliaciones fogosas, como me pasaba con... olvídenlo. Así que no se si decirle que no me gusta tanta melosidad, pero él es así, entonces quizás el problema sea yo, o ambos, o ash no sé.
Hablando de otros asuntos, ya tengo mi horario definitivo de la universidad, así que puedo elegir en qué curso ser tutor. Fui 2 años ayudante en partituras, uno en piano y este año me gustaría ser de canto. Por eso, ahora voy donde el profesor encargado para ver si me acepta.
- Buenos dias profesor Lee. - saludo cuando llego a su oficina.
- ¡Jungkook! ¿Qué haces por aquí? ¿No te reprobé o si? - pregunta preocupado buscando las notas en su computadora.
- No, no, de hecho me fue bastante bien.
- Cierto, cierto. Pero a veces me equivoco al poner las notas finales. - mira su computadora - Aquí está, excelentes notas. Recuerdo esa presentación final donde cantaste we don't talk anymore, fue espectacular.
- Ehm gracias - le digo algo avergonzado - Sólo venía para saber si hará su electivo de canto. Me gustaría mucho ser su ayudante.
- Pues sí haremos una versión este año pero será algo diferente
- ¿Diferente?
- Sí, asignaré a cada alumno que se inscriba un tutor para que lo apoye durante todo el curso, así será más personalizado. No sé si tienes problemas con eso.
- Para nada, suena divertido.
- Bien, déjame ver... - abrió una lista con muchos nombres - ...oh, ya tengo a todos con tutor, pero aun queda un día de inscripción, así que te avisaré en cuanto alguien se inscriba. Pondré tu nombre en la nómina de tutores para que puedan ver que estarás disponible ¿Te parece?
- Claro.
- Listo. Si es que no se inscribe nadie más, de igual forma puedes ayudarme en los talleres grupales, tu voz es realmente genial, así los chicos se motivarán más.
- De acuerdo.
- Te avisaré por mensaje el inicio de las tutorías y el nombre de la persona que tengas que apoyar.
- Ok, lo esperaré entonces. Hasta luego y gracias profesor. - me voy haciendo una reverencia.
Cuando salgo de su oficina me recorre un extraño escalofrío, como si algo inusual fuera a suceder. Ash, juntarme tanto con Yoongi me ha puesto paranoico.
En fin, ahora tengo que devolver unos libros a la biblioteca y me largo a casa. Mingyu tenía cosas que hacer, así que no nos veremos hoy, lo cual parece ser un alivio. No estoy para cursilerias hoy. Esta relación no esta siendo lo que esperaba...
Cuando llego a la biblioteca, está extrañamente vacío. Saludo a la encargada que es la viva imagen de Roz de Monsters inc jajaja, con el Hobbit solíamos burlarnos mucho de eso. Ash, kill me plz.
Comienzo a poner todos los libros en su lugar o Roz puede enloquecer, es sumamente estricta con el orden. Cuando sólo me queda el último noto que este va en la parte más alta de los estantes, así que voy por la escalera para estos casos. Cuando me subo y lo dejo en su lugar, estúpidamente piso muy fuerte uno de los escalones y la escalera se desestabiliza.
Todo pasa como en esas clásicas caídas en cámara lenta, en donde aunque al parecer eres consciente de cada movimiento no puedes hacer nada para evitar el inminente costalazo. Voy cayendo lentamente hacia un lado, botando algunos libros en el proceso, cierro los ojos entregado a mi destino pero el golpe directo no llega. Siento claramente como alguien me sostuvo entre sus brazos y cae en el suelo, evitando que sea yo el que se estrelle contra el frío y duro piso. ¿Tengo un ángel de la guarda? La biblioteca estaba tan vacía como en los duelos del viejo oeste ¿Qué demonios?.
Lentamente abro los ojos y enfoco a mi salvador. Y no es nada más ni nada menos que Park Jimin. Pienso en escabullirme como siempre hago cada vez que nos encontramos pero el golpe que se dio por mi fue tremendo. ¿Se habrá pegado en la cabeza?. Demonios.
- Park ¿estás bien? - le digo moviéndolo un poco pero no responde. - ¿Park? ¿Me escuchas? - Nada, no se mueve. Lentamente empiezo a entrar en pánico - ¡Park Jimin demonios despierta! - comienzo a samorrearlo - ¡Jimin, maldición, no puedes morir asi carajo!. - No puede estar muerto ¿o sí? Quizás sí se golpeó en la cabeza y ... ¡no puede ser!. Mis ojos se humedecen ante la posibilidad - Oh no ¡Hobbit resiste, no te mueras por favor! - le digo apretando sus mejillas y cuando estoy por levantarme me toma repentinamente del brazo y me lanza a sus brazos.
- Estoy bien Nochu, no te preocupes, aaauch.... - susurra adolorido en mi oído. Estoy tan aliviado de que no este muerto que me quedo un momento ahí, entre sus brazos, ignorando que me llamó Nochu como en los viejos tiempos, en otra circunstancia se hubiese ganado un gran golpe - ...no le digas nada a nuestro suculento caracol de jardín o nos hará hacer un montón de papeleo al respecto - Su tonto chiste me hace sonreir.
Me levanto de su pecho intentando ocultar mi sonrisa. Comienza a sentarse también pero soltando algunos quejidos y me mira con esa intensa mirada que siempre me ha puesto nervioso. Siento cómo me estoy empezando a sonrojar y eso no es bueno. Tengo que largarme de aquí pronto.
- Gracias por ayudarme, no debiste hacerlo. - le digo evitando su mirada.
- Tenía que... no puedo dejar que mi tutor se lastime.
- ¿Tutor? - pregunto extrañado volviendo a mirarlo. Él solo me sonríe. ¿De qué demonios está hablando?. En ese preciso instante recibo una notificación en mi celular. Lo abro y es un mensaje del profesor Lee.
Inicio de tutorías de canto: Viernes 25/03
Estudiante asignado: Park Jimin, 5to año de Arquitectura
Lo miro con los ojos como platos mientras él me sonrie ladino y se muerde el labio.
M-I-E-R-D-A.
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