V: Una Mala Noticia

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V: Una Mala Noticia

A la hora del almuerzo voy directo al baño para marcarle a mi hermano y darle la buena noticia de que papá accedió a dejarme hacer ejercicio.

-¿Hola? -niego con la cabeza al escuchar a una chica contestarme.

-¿Esta mi hermano por ahí? -le pregunto, escucho murmullos y risitas para después escuchar la voz de mi hermano.

-¡Lucas! ¿Cómo estas hermano?

-No pensaba interrumpir lo que sea que estabas haciendo-su risa me hace detener por solo unos breves segundos antes de continuar-pero no podía esperar para decirte que papá me dio permiso para ir a entrenar contigo al gimnasio, ¿podemos comenzar hoy después de la escuela?

-¿Y mamá? ¿Le has preguntado?

-No pero lo hare.

-De acuerdo, pero te quiero puntual hermano, terminando tu ultima clase te espero en el gimnasio, haremos de ti un chico atractivo.

-Soy atractivo. -Le respondo honestamente.

-Claro-se burla y obviamente lo tomo como una ofensa.

-Solo tengo que cepillar mi cabello y cambiar un poco mi atuendo de ropa, se que soy atractivo.

-Y eliminar esos ridículos lentes naranjas que por alguna razón no los has dejado desde la navidad pasada.

-No te metas con mis lentes. -por instinto toco los bordes de estos.

-Opacan esos ojazos verdes que tienes, tienes que eliminarlos.

-No lo hare, y ya me voy nos vemos mas tarde.

-Estudia mucho.

Cuelgo la llamada y guardo mi celular en el bolsillo de mi pantalón, me acerco al espejo y me observo. Mi cabello rubio bastante enredado me llega a la altura de mis hombros, los lentes naranjas no poseen vidrio pero aun así Isaac tiene razón, no hacen lucir mi ojos por lo que decido quitármelos muy a mi pesar, estos lentes me traen un lindo recuerdo, no los usare mas pero los conservare.

Los guardo dentro de mi mochila y viéndome por ultima vez en el espejo salgo del baño.

Camino por el largo pasillo, acompañado por algunos estudiantes mas hasta llegar al patio de la escuela, localizo la mesa donde casi siempre me siento con Fran y Genevieve a almorzar. Pero esta vez hay algo diferente y no puedo evitar sentir mi corazón comenzar a latir con mucha emoción al ver a Geraldine sentada en la mesa y sin Pierre.

Camino a paso rápido y llego a sentarme frente a ella saludando a todos, Margie y una chica que no había visto antes se encuentran en la misma mesa.

-¿Y tus lentes? -Genevieve en la primera en preguntarme sobre lo que esperaba que lo hiciera Geraldine.

-No tiene sentido seguir usándolos.

-Tus ojos lucen muy bonitos-le sonrió en agradecimiento antes de girar a ver a la chica nueva.

-Ella es Catalina, es su primer día de clases-me dice Geraldine presentándome a la chica que no conocía, es linda; ojos cafés al igual que su cabello y un rostro pequeño que resulta amigable.

-Soy Lucas y bienvenida.

-Gracias-me responde con un acento notable y eso me da curiosidad.

-¿De donde es tu acento? -ella dudosa observa Geraldine y ella le dice algo que no logro entender.

-México.

-Genial, ¿es cierto que a todo le ponen chile o es solo un mito?-le pregunto curioso, ella ríe seguro sin entender mucho pero lo que capta mi atención no es su respuesta, es la manera en la que Geraldine parece traducirle de una manera muy dulce y paciente, joder es hermosa.

En Arlington (#0) [TERMINADA]Where stories live. Discover now