Damn, If you didn't want me back. -(Kookmin)-

Intro.

–Ju-Jungkook.– El joven castaño se notaba demasiado nervioso. De alguna manera eso incomodaba a Jungkook. Es decir, le agradaba Jimin. Pero siempre parecía estar sobre el. Era un poco pegajoso para el pelinegro menor. Ahora sin ir más lejos, Jimin lo había prácticamente arrastrado al aula vacía de informática, en el 3° piso.

El no quería estar ahí.

Tenía hambré y quería volver a la cafetería, bufó molesto, ahora seguro para cuando volviese la fila sería larguísima y el receso habría terminado.

–¿Porque me trajiste aqui, Jimin?–

–Bueno, yo quería decirte al-algo.–

Jimin respiro hondo, dedicándole una profunda mirada a su menor. Por tanto tiempo había esperado este momento que aún no creía que fuese real. Por supuesto, talvez las cosas no saldrían como quería pero ya no aguantaba el verlo todos los días y esconder todos sus sentimientos bajo una mascara de amistad. Por otro lado, estaba Jungkook, que le devolvió la mirada con impaciencia, esperando a que Jimin soltara de una vez por todas lo que sea que tenía que decirle. – Tu...– Susurró, negando con la cabeza. No, no debía decirlo asi. Tenía que hablar con seguridad si quería ser tomado en serio, esa misma seguridad que siempre había tenido para hacerle frente a cualquier cosa. Infló su pecho y se armó de valor.– ¡Me gustas!–

El silencio duró poco.

–¿Qué?– Pregunto el pelinegro menor, atónito, creyendo haber oído mal.

–Tu me gustas, Jungkook.– Jungkook parpadeó con incredulidad.– Siempre me has gustado, bueno desde que te conozco hace unos meses. Yo sé que es raro porque ambos somos chicos pero yo no lo busque solamente sucedió y tu no tienes que acep...

–No.– Básicamente, Jungkook no había oído nada más después de la confesión de su supuesto nuevo amigo. Por alguna razon, estaba furioso.–Tu no me gustas. ¡Yo no soy un jodido maricon!–

Ahora el que creía haber escuchado mal era Jimin, quien definitivamente no esperaba esa reacción. Es decir, Jimin si bien sabia que existía la posibilidad de salir rechazado, no esperaba esto. Para nada.
Jungkook nunca le había parecido esa clase de persona intolerante y retrógrada. No, seguro que algo andaba mal aquí.

–¿Co..como has dicho?– Preguntó para asegurarse de que esas feas palabras no habían salido de la linda boquita de Jungkook.

–Que no soy puto. Es-esto es asqueroso, tu me das asco.– Okey, seguramente había una explicación lógica para todo esto. Como que alguien se estaba haciendo pasar por Jungkook. Si, seguro era eso. No podía aceptar que Jungkook estuviera siendo tan estúpido.– ¡No vuelvas a acercarte a mi! – Lamentablemente, esto estaba pasando. Jungkook le estaba gritando. Soltando cualquier tipo de mierda homofobica hacia el.-No puedo creer que te gusten las pollas, me da asco el solo pensar que todo este tiempo que fingias ser mi amigo fue solo por...

Jimin no aguanto más. No podía seguir negándolo, ese estúpido era Jungkook. Al parecer, no lo conocía tan bien.

–¡Ya callate!–Gritó el mayor, colerico y Jungkook se estremeció. Jimin jamas le habia gritado. – Tranquilo, no volvere a estar siquiera cerca de ti. – Jimin trató de sonar rudo, tratando de que el pelinegro no notara como habia roto su corazon en cientos de pedacitos.– No puedo creer que seas tan estúpido...– llevándose las manos a la cabeza, Jimin revolvió sus cabellos con molestia. Ya no tenía nada que decir. Desde el principio supo que sería rechazado, pero eso no le daba a Jungkook el derecho a ser un imbécil. A nadie se lo daba.

Aún enojado, se dirigió a la puerta. Ya no servía de nada seguir allí pero se detuvo a medio camino.

Jungkook boqueo para hablar pero Jimin lo interrumpió y con voz más calma soltó.

–No hace falta que digas más nada. Creo que estaba equivocado, porque si esto es lo que realmente eres, tú nunca podrías gustarme.– Jimin suspiró con enojó y algo de resignación.–No me molestó ser rechazado, solo creía que valorabas un poco mas está amistad.–

Jungkook se quedó estático mientras Jimin salía del aula desprendiendo una especie de furia silenciosa y cierta tristeza, azontando la puerta con fuerza al marcharse.

Con los ojos abiertos de par en par, analizando lo que fuera que había pasado. Jimin lo había asustado, el jamás le había hablado de esa manera. A pesar de ser su Hyung, Jimin siempre parecía más pequeño, algo tímido y risueño. Jamás se había enojado con nadie, mucho menos con el.

Estaba confundido, el debería ser el enojado y no al revés, Jimin le acababa de lanzar toda esa mierda de que le gustaba. Se había acercado a él solo por qué le gustaban los hombres.

Bueno, ahora aparentemente, ya no se le acercaría mas.

Eso estaba bien... ¿O no?

***

Hace rato que tenía esta historia en borradores así que decidí darle una oportunidad, espero que le guste a alguien 🙇

Perdón por cualquier error o incoherencia que pueda haber xD