v e i n t e

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Abrí lentamente la puerta de la habitación del hospital. Eran las cinco de la madrugada y apenas acaba de llegar de estar con Yoongi toda la noche. Me estaba enseñando algunos de sus proyectos para canciones de los próximos mini-álbumes. Nada del otro mundo. Yoongi también me contó que el perrito de Jin, Jjangu, falleció hace algunos días y que su humor no era el mejor de todos. Ahora entiendo porque ha estado desaparecido. Entré y pude notar que el televisor estaba prendido, pero Jungkook dormía serenamente. Suspiré, me quité los zapatos y me tiré en el sofá. Quería dormir hasta las doce de la tarde, más la voz de Jungkook me interrumpió.

—¿Sigues emputada conmigo?— su voz era ronca y grave, más de lo normal. Eso era sexy.

—No lo sé.— me quedé viendo el techo.

—No sé si tomarme eso como un si o como un no.— puse una de mis manos en mi estómago.

—Tómatelo como un tal vez.

—¿Por qué reaccionaste así?— si supiera la verdadera respuesta a esa pregunta...

—No lo sé.— Jungkook chasqueó su lengua.

—¿Sólo me responderás con eso?— solté un risita.

—Vaya humor. Cuando te digo no lo sé es porque en serio no lo sé.— sentí su suspiro.

—Descansa, Hee.— cerré mis ojos y me cubrí con mi sábana.

—Igual tú, Kook. Y espero que haya aprovechado que no estuve aquí toda la noche para cogerte a la enfermera.— escuché su risa y una sonrisa se formó en mis labios.

—No lo hice.— fruncí mi entrecejo y me volteé, viendo el piso tapizado del hospital.

—¿Por qué?— bajé mi mano y con mi dedo índice empecé a pasarlo por el tapizado.

—Por ti.— paré en seco y sonreí.

—No.— me levanté y fui hasta su camilla, en la cual me senté.—Yo no debo ser un impedimento por comportarme como una malcriada.

Él se enderezó, sentándose a mi lado.— Es lo que quiero hacer.— me miraba directamente a los ojos y yo a él. Había un brillo diferente en ellos. Levemente sentí como se iba acercando a mi, tomó mi mejilla y plantó un leve beso en mis labios.

-.-.-.-

—¡Oye, Hee! Despiértate.—  me levanté de golpe y sentí como todo mi cuello estaba sudado. ¿Eso fue un sueño? Jungkook estaba parado al frente mío con ayuda de su muleta y me veía algo triste.—¿Sigues molesta conmigo?— suspiré y pasé mi mano por mi frente.

—No, Kookie.

Suspiró aliviado.— Es que como ayer llegaste y te dormiste sin más.

—Estaba muy cansada.— sonreí.

—¿Y a donde fuiste ayer?— empecé a restregar mis ojos.  ¿Qué clase de sueño era el que acababa de tener?

—Llamé a Yoongi y fuimos a dar un paseo por ahí. Me enseñó algunos de los proyectos del próximo mini-álbum.— Jungkook asintió.

—¿Y por qué no llamaste a Jimin?

—La verdad es que no lo sé. ¿Jimin no se molestará, cierto?— Jungkook se sentó en un espacio vacío en el sofá.

—No si no se entera. A veces tiende a ser celoso.— yo asentí y él mostró una sonrisa ladina.

—¿Te puedo preguntar por qué me despertaste?— él soltó una leve risa.

—Ya son las doce de la tarde, Hee. Además de que me quería burlar de ti porque al parecer soñaste con Jimin.

—¿Eh? ¿Por qué lo dices?— él me miró picaro y empezó hacer morritos.

Accident ; jjk {Book #1} » BTS. ✔ (En Edición)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora