You're my Hope [Nagito Komaeda]

Capítulo 5

-¿Por qué no vives más cerca del centro? ¡Tu casa está en el culo del mundo! ¡Los pies de Ibuki están destrozados!- se quejó. Sólo me limité a ignorar su parloteo de una niña de cinco años enrabietada al no conseguir el juguete que quería.

Abrí la puerta sin mucha dificultad, dándole paso a la quejica de mi amiga. Tiró sus cosas en medio del pasillo, como si de su propia casa se tratase. Entré detrás de ella, dando un portazo -involuntario- que hizo que Ibuki se sobresaltase un poco. Ahogué una risilla.

-¡Cómo extrañaba esta casa...!- observó todo, quizá comprobando si había algo nuevo.

-Solo ha pasado un año y medio desde la última vez que pisaste esta casa, ¡no exageres!- golpeé su hombro.

-¿Y te parece poco?- me fulminó con la mirada.

Me encogí de hombros. - ¿Vas a dejar tus cosas ahí tiradas o...?-

-Sí, sí. Ahora las subo.- puso los ojos en blanco. -¿Y dónde está la mujer que trajo a mi mejor amiga al mundo?-

Miré por unos segundos las puntas de mis zapatos. -En el hospital.- me miró horrorizada. -Mi abuela vuelve a estar enferma...ya sabes, es mayor y tiene las defensas muy bajas.-

Puso su mano sobre mi hombro, tratando de tranquilizarme. -¡Tranquila, saldrá de esta! Tu abuela es más fuerte que un roble, puede caerle una bomba nuclear en la cabeza y sobrevive, en serio.-

Y sí, tenía toda la razón del mundo. Mi abuela era la mujer más fuerte de este planeta, le habían pasado cosas horribles y había salido hacia delante; sonreí. Me sentía mucho mejor. -Lleva tus cosas arriba o duermes en la bañera.-

Cogió su maleta del suelo a regañadientes, murmurando algo que no llegué a escuchar, aunque seguramente estuviera deseándome la muerte. Miró hacia mi dirección con un puchero, me preguntó con la mirada ''¿En serio tengo que subir las escaleras?'' Asentí burlándome de ella. Si hubiera tenido las manos desocupadas de seguro me hubiera ahorcado ahí mismo, pero por suerte, tenía sus cosas apunto de cargarlas escaleras arriba.

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Después de colocar toda su ropa en un cajón vacío de mi habitación, se tiró en mi cama de forma muy bruta -poco más y la rompe- y dejó escapar un largo suspiro de varios segundos.
Inspeccionó cada rincón de mi amplio cuarto. Me di cuenta que miraba con atención mi nuevo peluche de felpa, supuse que le había gustado. Se levantó lentamente y se posicionó frente a la estantería.

-Me resulta muy familiar, ¿dónde lo has conseguido?- preguntó señalando con su dedo índice a Monokuma.

-Me lo regaló una chica muy maja.- dije sentándome en la silla de mi viejo escritorio sin apartar la vista de Ibuki.

Dejó escapar un casi inaudible 'Oh' mientras asentía levemente. -Pues en serio que me es familiar; creo que ya lo había visto antes.-

-¡Lo habrás visto en alguna tienda, deja de ser tan paranoica!-

Me miró un poco triste y agachó la cabeza. -No sé, no me gusta. Parece malo, Mai. No me siento... ¿segura? Parece como un amuleto de mala suerte. Y sé que lo he visto antes pero no en una situación muy agradable.- era la primera vez que la escuché hablar tan seria, es más, me creí que realmente no era bueno tener a Monokuma ahí. -Bah, serán imaginaciones mías, ayer no dormí muy bien.- hizo un gesto con la mano restándole importancia al asunto.

Esta Ibuki...

Nos quedamos segundos en silencio, o quizás minutos. Varios minutos. Empecé a hacer círculos en el suelo con mis pies del aburrimiento. El ambiente ahora era un silencio muy incómodo. Empezaba a ponerme nerviosa.

-Hagamos algo, Mai. Ibuki se aburre mazo.- dijo con la palma de su mano sujetando su mejilla izquierda. Me levanté rápidamente de mi silla.

-Bien, hagamos el almuerzo nosotras mismas. ¡Demostremos que tenemos a unas cocineras expertas dentro de nosotras!-

-¡Es una buena idea! pero si se quema la cocina ni se te ocurra echarme las culpas a mí, que te conozco.- me señaló acusadora. Reí.

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-Bate el huelvo, ¡bate el huevo! Y luego echa 5 kg de harina en el recipiente.- ordenó mi amiga, ojeando el manual de cocina de mi madre.

-Pero a ver, ¿cómo que 5 kg de harina? ¿Estamos locos o qué?- arrugué la nariz, confusa. Miré el libro mientras batía los huevos. -¡Ibuki, tienes el manual del revés! No me digas que has estado leyéndolo así desde el principio.-

-Ahora que lo dices, es verdad. No me había dado cuenta.- se rascó la nuca. Estuve a punto de saltarle a la cara y arrancarle los ojos, pero me contuve y toqué el puente de mi nariz con dos dedos.

-Pon el maldito libro bien y dime qué tengo que hacer.- esperé pacientemente tratando de no perder la calma.

-Tú mezcla todo, que seguro que sale algo.- bostezó. -Hazme caso.-

Puse los ojos en blanco. No tenía nada que perder, ¿verdad? O esperaba que fuera así.
Tal como dijo mi amiga, mezclé los ingredientes que teníamos preparados para hacer un no-sé-qué de bizcocho, o algo parecido.

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-Nota mental: no volver a cocinar contigo nunca más.- dije pinchando con el tenedor los espaguetis resecos que habíamos optado por hacer después de que nuestro ''experimento'' anterior se convirtiera en una masa que servía como cemento.

-¿Acaso fue mi culpa?- preguntó haciéndose la ofendida.

-Sí.- respondí con desinterés.

-Pues sí, para qué mentir.- soltó los cubiertos con una notable molestia. -Cuando vuelva a ver a Teruteru le pediré unas clases de cocina. ¡Ya verás!-

-¿Ese es el chef que iba a tu misma clase...?- asintió. La verdad es que yo no conocía a los amigos de Ibuki, excepto a Nagito. Ella me había hablado muchísimo de ellos y de lo divertidas que eran sus clases. Ojalá yo tuviera un talento para ir a una academia como ésa...

-¿Y si le rompemos el cristal de las ventanas a tus vecinos?- preguntó de repente. Sacándome de mis pensamientos.

-¿Tú estás loca? ¡La que se lleva la denuncia soy yo!-

-Por eso mismo.- pateé su espinilla. -¡Auch! Eso dolió.- saqué el dedo corazón y miré hacia otro lado para no ver su carota. -Ahora en serio, me aburro muchísimo.-

-¿Qué propones que hagamos?-

-Tengo una buena idea, que seguro te gustará.- dijo con una gran sonrisa pícara la cual me contagió al instante.

-Cuenta.-

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Capítulo un poco de relleno, pero a partir de ahora saldrá más Nagito ✌

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