Capítulo 5

29 3 6
                                    



Al entrar al apartamento, me dirigí de inmediato a mi habitación, no tenia deseos de hablar con alguien, aquella escena me había bajado demasiado los ánimos. Sin darme cuenta me había quedado dormida con los audífonos y la música puesta.

Tipo 7:30 P.M me desperté, tenía demasiada hambre, así que me dirigí a la cocina en busca de comida, al entrar pude observar que estaba Fernanda preparando panqueques mientras sonaba la canción Sex de Cheat Codes, bailaba al unísono de la música, fui inevitable reírme, al escuchar mi risa volteo a verme.

-Ya te despertaste dormilona- dijo mientras le daba la vuelta a un panqueque

-Si- dije mientras buscaba algo que comer en el refrigerador

-¿Está todo bien?- pregunto, al instante la voltee a verla, ella tenía sus ojos fijos en mí.

-Si- dije sin mayor expresión en mi rostro

- Eres mala mintiendo, tienes que practicar más en ello- dijo riéndose mientras me daba la espalda para seguir cocinando.

Por unos minutos quedo un silencio algo incómodo, no quería comentarle nada del tema, aun no me sentía preparada para hablar de ello con ella.

-¿Qué pasa Julieta? Yo sé que no estás bien, entraste con una cara larga al apartamento y al parecer ibas tan sumergida en tus pensamientos que no te diste cuenta de mi presencia, quise hablar contigo pero al entrar a tu cuarto estabas dormida- dijo mientras ponía los panqueques en una montañita sobre un plato.

- Mario pasa- dije con un tono triste, al escuchar eso Fernanda casi botaba la espátula con todo y un panqueque.

-¿Qué te hizo?- pregunto enojada, dejando todo sobre la estufa y dirigiendo su mirada hacia mí.

- Su novia- dije- regreso al país

- Ay mi linda, tranquila- me dijo mientras se dirigía a mí para darme un abrazo, sin sentirlo ya estaba en un mar de lagrimas

- Es que fue horrible esa escena- dije- ella es una chica tan diferente a el

- Tranquila- dijo abrazándome más fuerte- ¿Qué fue lo que paso?

Le conté todo lo que había pasado, desde el momento donde el me vino a traer, hasta que esa chica apareció mientras comíamos los panqueques.

-Y lo peor es que después de ello ya no supe nada el- dije mientras me metía el ultimo bocado de comida a mi boca.

- Wow- dijo sorprendida- Yo también me hubiera puesto mal, pero ya paso linda, tu eres mucho mejor que esa horrible. No pude evitar reírme, amaba a Fernanda siempre estaba para mí, en cada momento de mi vida.

Al terminar de cenar, me dirigí a mi habitación. Hablar con Fernanda me hacia sentir demasiado bien y tenía razón en todo, yo era una gran chica y no me tenía que poner mal por eso.

Estaba leyendo un poco, cuando en eso entro una llamada

*LLAMADA ENTRANTE: MARIO*

Dude demasiado en contestar, pero no perdía nada en hacerlo

-¿Alo?- dije

-¡Julieta!- dijo animado

- Mario- dije sin ningún tono de emoción

- ¿Estas bien?- pregunto

-Si- dije

- Mira me quería disculpar contigo por lo de hoy, yo no sabía que ella venia hoy y aparte se comportó muy mal contigo- dijo apenado

- No hay pena- dije

-¿Segura?- pregunto-

- Si, no hay pena- dije

- Por cierto, que linda te veías hoy- dijo, al instante me sonroje agradecí que no estuviera enfrente mío para observarlo.

- Gracias, tu igual- dije apenada

Por unos segundos nos quedamos callados, por alguna razón los silencios con el no eran para nada incomodos.

- ¿Qué vas hacer mañana?- pregunto

- Solo ir a la universidad- dije

- Te invito almorzar- dijo

- Jum, tu novia se va a enojar- dije riéndome

- No creo y si fuera así no importa- dijo riéndose

- Bueno está bien- dije

- Es una cita- dijo, me volví a sonrojar, siempre causaba ese efecto en mí.

- Claro, bueno te dejo, tengo que dormir- dije

- Descansa linda-dijo

- Descansa- dije

Al colgar se dibujó una hermosa sonrisa en mi rostro, Mario se estaba volviendo demasiado importante para mí. Ya estaba lista para dormir y esa sonrisa seguía en mí, estaba segura que mañana sería un gran día.

Al día siguiente me levante a la misma hora, cogí todas las cosas necesarias para bañarme, tarde aproximadamente 15 minutos. Decidí ponerme un vestido floreado de manga larga y unos mocasines cafés, me gustaba demasiado mi atuendo.

Baje a la cocina a desayunar, había un silencio total, las chichas aun no estaban despiertas, decidí comer algo ligero y rápido, al cabo de 10 minutos termine de comer y me dirigí a mi habitación a cepillarme los diente y coger mi bolso.

Me tarde aproximadamente 20 minutos para llegar a la universidad, las primeras clases pasaron demasiado rápido, en el receso estuve con Mitchie pero por alguna extraña razón no vi a Mario por ningún lado, la verdad me puso demasiado triste, tal vez se había olvidado de nuestra "cita". El resto de las clases pasaron igual de rápido, estaba más que convencida de que se le había olvidado a Mario nuestra cita.

Me dirigí al estacionamiento con Mitchie pensaba regresarme con ella, ya que las chichas no habían asistido. Íbamos caminando y hablando de todo un poco, cuando a lo lejos pude ver a Mario con un ramo de rosas, al observarme se dirigió hacia mí.

-Hola hermosa- dijo mientras me daba un suave beso en la mejía- esto es para ti, me entrego el ramo de rosas, al instante me sonroje.

-Bueno, yo paso a retirarme- dijo Mitchie riéndose

-Lo siento-dije apenada

-No hay pena tigresa- dijo riéndose, amaba a esa mujer

-Gracias por el detalle- dije apenada

- No hay de que, esto y más es lo que mereces-dijo viéndome a los ojos.

Nos quedamos viéndonos directamente a los ojos unos cuantos minutos, cuando un auto se parqueo a nuestro costado.

-¿Qué significa esto?- dijo Leonora saliendo del auto, al instante la cara de Mario se volvió pálida y mis ojos se quedaron en blanco.

-Leonora, tranquila-dijo apenado

-¿Cómo quieres que esté tranquila?- dijo dándole una abofeteada a Mario, todos se quedaron observando.

-Tranquila, por favor- dijo

- Terminamos Mario, ya no tolero más esta situación, espero sean felices- dijo mientras lo observaba con rabia, nos dio la espalda, se dirigió a su auto y se fue del lugar a toda velocidad.

El momento había sido mucho más incómodo que el anterior, todos nos observaban, se escuchaban murmullos, no toleraba más esto.

-Tengo que irme- dije regresándole las rosas

- Espera- dijo, no hice caso a sus palabras, solo comencé a caminar no quería permanecer un segundo más en esa escena

------------------------------------------------------------------------------

Hola, ya se que me había tardado demasiado, pero al fin, ahí esta, espero les guste. He estado un poco ocupada pero ahí vamos.

Con amor, bluegirl

You've reached the end of published parts.

⏰ Last updated: Oct 12, 2017 ⏰

Add this story to your Library to get notified about new parts!

Un amor incompleto: la historia de un primer amorWhere stories live. Discover now