LINEA 97 ( BTS - JEON JUNGKOOK )

CAPITULO 19

[Narra Línea 97]

—No por favor. Me siento muy cansada—tomo mi mano antes de poder colocarle el cinturón, ante toda la presión mi corazón latía débilmente al verla en ese estado; en sus ojos ya no había brillo y su rostro se había vuelto tan pálido, sin pensarlo inmediatamente me solté, pero a los segundos lleve mis manos a sus mejillas.

—No puedes morir ¡Entiendes!, aún no me has dado la oportunidad de demostrar mis sentimientos—abrió la boca para pronunciar palabra, pero de un momento a otro, los ojos se le cerraron. Temblando rápidamente le coloque el cinturón y subí al auto.

Todo el camino le hablaba pero ella no reaccionaba y su pulso era muy inestable. Trataba de pensar con la cabeza fría, quería dejar a un lado el corazón; al llegar la cargue en mis brazos e ingrese gritando el nombre de aquel doctor que ya hace un tiempo la había atendido.

Las enfermeras, se desesperaban y comenzaban a murmurar entre ellas, los doctores corrían hacia mí con una camilla, hasta que por fin él apareció, al no poder esperar a que él se asomara yo también fui hacia él.

—¡Por favor ayúdala! ¡Es intoxicación con medicamentos! —no parecía entender nada, aun así inmediatamente ordeno que le hicieran un lavado estomacal y los exámenes correspondientes.

Corrieron hacia una sala y no permitieron que ingresara, me retuvieron en la puerta y solo manifestaban que todo estaría bien, pero que debía esperar.

Los segundos eran interminables, los minutos no parecían tener fin, las horas se habían convertido en siglos mientras no tenía noticias de ella.

A las horas de haberse cerrado aquella puerta por fin se abrió, él salió y se puso delante de mí, me levante del suelo.

—Ella ya está fuera de peligro—al escuchar eso ,sentí un gran alivio—tomo una alta dosis de pastillas para conciliar el sueño ¿Ella sufre de insomnio?

—No lo sé

—Si tenía en su poder esas pastillas es porque efectivamente sufre de insomnio ¿O acaso la aqueja otro mal?—no parecía creerme nada.

—Ya te dije que no lo sé, soy su guardaespaldas ,no su niñero

—Es lo mismo, en los dos casos tú tienes control de ella—aparentemente ,yo no le caía para nada, aunque el sentimiento era recíproco.

—Se nota que solo de hospitales—pase por su costado, tan cerca que chocamos los hombros.

— ¿Por qué la trajiste hasta acá habiendo hospitales más cercanos a su casa?—repentinamente pegunto.

—Porque nadie puede enterarse que ella intento suicidarse ¡Nadie!. Lo único que tienes que hacer es dar el mismo diagnostico que la ves pasada—respondí sin voltear.

—¿Eso quiere decir que soy de confianza para ti?

—No alucines, la traje hasta acá porque eres el único medico al que conozco—seguí mi camino.

Dando tiempo que me permitan verla fui a la cafetería; me debatía entre llamar al presidente o no, pues aunque no se lo dijera él igual iba enterarse al no verla llegar a casa, ideaba cada oración que le diría y cómo se lo diría.

Mientras tanto lo único que hice fue llamar a Ho Seok, pero él no contestaba, su celular parecía estar apagado o fuera de red. Por lo tanto no tuve otra opción que llamar a su padre.

Recibí las señales de la enfermera, para que pueda pasar a verla, a lo que rápidamente obedecí. Ella estaba con los ojos cerrados, tenía conectado unas agujas a su brazo y un aparato en uno de sus dedos que medía sus pulsaciones. Con temor poco a poco me fui acercando a ella y temblando pase mi mano por su cabellera.

Segundos después comenzó a hacer expresiones faciales, parecía estar teniendo pesadillas, al observar eso puse mi dedo entre sus cejas.

—No he conocido a alguien más tonta que tú—susurre; no pude evitar seguir mirándola, aunque siempre había querido negar lo evidente ,su belleza era impresionante; las pocas veces que me había mostrado su sonrisa, me demostró que tenía una sonrisa angelical y una voz tan dulce como la miel.

[Narra Zoe]

Destellos de luz hacían que mis ojos quieran abrirse; mire hacia mi costado y note que estaba conectada a un suero y un aparato que no dejaba de sonar, luego mire al otro costado y pude verlo a él sentado al lado mío, seguramente estaba cansado porque estaba durmiendo.

La espalda me dolía demasiado y la cabeza parecía estallar, en un intento por acomodarme, cayo su celular que estaba en la camilla, de un sobre salto él interrumpió su siesta.

—¿Qué haces?—pronuncio y a la vez me ayudaba a acomodarme en la camilla.

—Solo quería poner una almohada más

—Espera—trajo una almohada y la acomodo para mí.

—Gra-ci-as— estaba muy avergonzada, al extremo que no podía mirarlo a la cara.

—¿Por qué lo hiciste?—Dijo cruzando los brazos.

—Yo...—antes de poder contestar la puerta se abrió de golpe, era papá y se veía muy furioso.

—¡¿Por qué maldita sea hay reporteros afuera?! —Grito.

¿Cómo estás?¿Qué paso?, esas hubieran sido las preguntas si hubiera tenido otra clase de padre pero este no era el caso, lo que importaba era ¿Por qué habían reporteros afuera?

—Lo siento, lo siento—Seagull se paró a mi costado e inicio con una cadena de reverencias que parecía no tener fin, no entendía porque lo hacía.

—Yo...

—Ella ingirió por descuido un helado de crema y entre sus ingredientes había piña, fui intoxicación debido a su alergia, pero ahora está fuera de peligro, no ha sido nada grave. Yo lo siento por mi descuido, si hubiera tenido más cuidado con lo que ella ingería, esto no hubiera pasado, me disculpo por eso—no podía creer lo que él estaba diciendo, se estaba echando la culpa de todo y estaba dando respuestas tan fuera del verdadero contexto.

—¿Eso fue lo que paso Zoe?—hablo mi padre.

—S-s-si— hubiera preferido decir la verdad, pero él quedaría como un mentiroso.

—Entonces no hay de qué preocuparse son cosas que pueden pasar—sonrió a gusto—ahora voy a hablar con la prensa para que no inventen rumores y que esto nos perjudique, pues ya sabes cómo son ¡Descansa! ya regreso—salió sin decir nada más.

—No debiste echarte la culpa ¡Eso no es parte de tu trabajo!¡Tú no has hecho nada mal!¿Tú ni siquiera tienes que ver con esto!—Alcé la voz, mis ojos se cristalizaron al sentirme como una verdadera basura.

—Mi trabajo tampoco es preocuparme por ti y sin embargo lo hago; mi trabajo tampoco es extrañarte cuando no te tengo cerca ,sin embargo lo sigo haciendo; mi trabajo tampoco es quererte sin embargo ¿Cómo le hago entender a mi corazón que ese no es su trabajo?

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Mil disculpas por la demora :c

Muchas muchas gracias por su espera y por tomarse el tiempo de leer lo que escribo