The Truth Behind Bad

2 | 17 | Explicaciónes

Habían pasado los días y se estaban acercando los días de exámenes para mitad de año. Estos días eran los días en que la mayoría de los estudiantes se la pasaban todo el día estudiando ya que como era de esperarse de nosotros, todos debíamos aprobar los examenes o de otra manera esto traería una mala imagen a nuestra persona y nuestros padres siempre se preocupaban por eso. Nuestros padres siempre se la pasaban hablando de nosotros incluso en sus trabajos y diciendo lo tan estudiosos que éramos. Ademas, todos éramos hijos de trabajadores de una gran compañía la cual se había ofrecido a ayudarnos a pagar la mitad de la colegiatura con la condición de que hiciéramos bien en todos los exámenes.

Habían grupos de estudiantes por toda la escuela, en la cafeteria, la biblioteca, y en cada clase que se encontrara vacía. Incluso habían estudiantes sentados en el suelo recargados frente a sus casillero con libros alrededor de ellos. Exámenes son algo que nos tomábamos muy enserio que incluso nosotros nos encontrábamos muy ocupados estudiando en la cafetería.

Estas eran unas de las semanas en las que los estudiantes nos preocupabamos más por estudiar que nuestra propia apariencia. Literalmente, el noventa porciento de los estudiantes se veía fatal. Con tan sólo vernos, alguien que no estuviera en nuestra escuela pensaría que no habíamos dormido en semanas

-Me rindo. -dice Brigitte cerrando el libro frente a ella. -Ya no puedo continuar estudiando. Creo que si leo una palabra más de este libro, mi cabeza explotará. Mi cabeza sólo puede retener cierta cantidad de información y ya he llegado al límite por hoy.

-Yo igual. -dijo Landon. Cruzó sus manos sobre la mesa y reposó su cabeza en sus brazos. -Nunca había estudiado tanto en mi vida.

Dejé de tomar notas y levanté la mirada para ver a cada uno de mis amigos quienes se encontraban estudiando para diferentes clases.

-Yo no entiendo nada de lo que estoy leyendo. Si me preguntan, más de la mitad de lo que acabo de leer desde que me senté aquí no sé lo que dice. -se quejó Danilo. -Y ya van tres veces que lo leo.

-Ya dejen de quejarse. -dije poniendo mi lápiz en la mesa. -Me estresan.

-A mi igual. -dijo Irwin. -Tener que estudiar me estresa, y tan sólo escuchar sus quejas me estresa aún más. Es más, de lo estresado que estoy, llegue a estresarme por los exámenes de clases que ni si quiera tengo.

-Nosotros quejandonos de los exámenes que tendremos comenzando la próxima semana, pero no he escuchado a Brad quejarse ni una sola vez en toda la semana. -Ryan volteo a ver a Brad. -¿A caso no estas preocupado?

Brad puso el libro que se encontraba leyendo en la mesa y nos miró a todos desconcertado. -¿Qué?

-Pregunto que si no estas preocupado por los exámenes.

-Oh, si lo estoy.

-¿En serio? Por que no parece. -dije esta vez yo.

-Pues lo estoy, pero la diferencia es que yo no estudio. Es por eso que no estoy tan estresado como ustedes. Si yo estudio, tiendo a olvidar todo.

-Te entiendo. -dijo Alec. -Es por eso que yo no estudio tampoco.

-Tu no estudias por que no quieres. Y aunque quisieras, no lo harías. -dijo Irwin y todos reímos. -La única razón por la que siempre apruebas los exámenes es por que tienes mucha suerte.

-Es cierto. -finalmente hablo Cameron. -Recuerdo que el año pasado Alec había estado ausente por casi dos semanas y el día que regresó, para nuestra clase de historia, teníamos que hacer un examen el cuál contaría casi la mitad de nuestra calificación final. Recuerdo que cuando una chica le preguntó a Alec lo que había sacado en el examen después de que el profesor nos los regresara, Alec respondió: "Saqué un noventa y tres".