Un hikikomori otaku y gamer en un mundo de fantasía

Comienzo el viaje solo. ¿Estarán bien? Me siento preocupado.

Y así, después de que se despidieron los unos de los otros nos fuimos en diferentes direcciones.

Yo fui hacia el oeste. Como no sabemos dónde están escondidos y las razas se pusieron a buscarlos les dije que obtuvieran información sobre su localización.

Sigo preocupado por las dos.

"No hay nada que le pueda hacer si sigo pensando en ello. Sólo caminaré hacia el oeste, oh ya tan temprano me aparecen Goblins, eso creo que es una advertencia de un mal augurio."

Desenvainé mi espada y ataqué al batallón de por lo menos cuarenta Goblins, con el casco que me puse y la armadura no me podían herir. No tienen la suficiente fuerza como los demonios o humanos.

Ahora que tengo el brazo hidráulico puedo balancear la espada enorme como si fuera normal. Es increíble el poder de esta espada. Los corta como mantequilla.

Sólo me centraba y rajaba los cuellos que es la parte más débil de tres en tres. Cada vez tengo mayor dominio de la espada, antes no hubiera podido ni cortar a dos.

Esto no es ni una batalla. Es un exterminio.

Luego de matarlos a todos los guardé en el almacenamiento.

"Mmmm no los quiero en mi almacenamiento, los venderé en el próximo pueblo para deshacerme de ellos. Vayamos rápido, March8."

Fui corriendo a una velocidad increíble, un poco más rápido que la velocidad de un dragón. Pasé un par de montañas y lo que a caballo hubiera tomado cuatro días descansando tarde poco menos de doce horas.

De verdad, este hikikomori se siente feliz de tener este cheat. ¡Lo mejor~♪!

Al oeste del pueblo de Airi está la ciudad Deyro. No quise enviar a Lily ya que la conoce y Fía no conseguiría mucho de este Rey de todas formas.

Cómo Siempre, el castillo tiene una seguridad excelente.

"Me gustaría tener una charla con el Rey. Son tan amables de decírselo."

"Oye, lárgate contratista de segunda. El Rey no tiene tiempo para escuchar tus quejas sobre monstruos o lo que sea."

Los guardias son bastante arrogantes, me recuerdan a ese Rey tirano.

"Díganle que ha venid-"

"Lárgate maldito imbécil. ¿No lo oíste la primera vez? Tal vez tengamos que enseñ..MUGGUUOO"

Su tono de voz y sus palabras arrogantes me estaban molestando, además estaba echándome el aliento encima. Le agarré la boca y le levanté con mi brazo hidráulico.

"Debes aprender a respetar cuando alguien te está hablando capullo."

"Mmmummmgguugmmm"

Los demás guardias se centran en nosotros y parecen mentalizados para defender el castillo.

Parecía querer abrir mi mano a lo desesperado. Aunque la potencia de el mecanismo no es posible forzarlo solo con fuerza humana.

"Te dije que tenía que tener una charla con tu Rey. Si no le avisas tú, tendré que ir y hacerlo YO. ¿Me entiendes guardia de segunda?"

"Zi ziiii zueltaaaa ahhh ahhh"

Se quedó en el suelo tomando desesperadamente aire. Tampoco quería hacerlo así, yo quería tener una charla pacífica con el Rey para sacarle información acerca de las escrituras.

Oh? Parece que la sirvienta que nos llevó a Lily a Julius y a mí me ha reconocido.

"Tu eras Kuro ¿verdad?"