2.4K 176 5
                                    


Cada mañana era un regalo poder ver aquellos bonitos ojos, aunque estos jamás los vieran a él. A Jihoon jamás lo abandonó su sonrisa pues solo debía recordar lo feliz que Soonyoung siempre se ponía cuando le regalaban cualquier cosa por más insignificante que fuera, pero su corazón no podía dejar de romperse cuando miraba como este se alejaba de él y todo porque había encontrado al chico perfecto y no había nada peor que escuchar todas las historias que ya habían vivido juntos.

Las últimas semanas Jihoon solo pensaba en aquellos días donde solo, eran Soonyoung y el. No había nadie más en el mundo.

—¿Me has escuchado?—el mayor miraba con detenimiento a su amigo quien tenía una expresión confundida.

—No, perdón.—respondió con sinceridad Jihoon.

—¿Qué es lo que te pasa? ¿A caso mi Jihoon está enfermo?—Soonyoung tenía una sonrisa en su rostro mientras tocaba la frente de su amigo.

—Estoy bien.—Jihoon apartó bruscamente la mano del mayor.

—Si, si estas bien ya eres de nuevo tu.—El mayor sonrió haciendo desaparecer sus ojos.—Entonces ¿crees que deba llevar a Minghao a la competencia de baile?

—¿Por que me preguntas a mi?.—cuestionó Jihoon algo molesto.

—Porque eres mi amigo.—dijo Soonyoung sin pensarlo mucho.—y eres como mi cerebro, siempre sabes lo que es mejor para mi.

—Soonyoung, no sé, no soy Minghao.—Jihoon odiaba cuando terminaba comparándose con MingHao pues habían mil cosas en las que eran muy diferentes.

Soonyoung podía pasar todo el día hablando sobre él y lo maravilloso que era sin saber que lastimaba a Jihoon, siempre terminaba diciendo algo en lo que él bajito era bueno, pero MingHao era mucho mejor. Hacía comparaciones sin darse cuenta del daño que causaba.

—Lo llevaré, a ambos nos gusta el baile así que será la cita perfecta.—aquella sonrisa parecía que jamás lo abandonaría.

—Haz lo que quieras.— Jihoon se alejó que aquel lugar.

—¡¿A donde vas?!—Soonyoung sonrió para sí mismo porque Jihoon siempre le hacía lo mismo.—Jamás cambias.

Él se preocupaba por el pequeño Jihoon, ya tenía bastante tiempo sin salir con alguien y sentía que debía buscarle a alguien para que fuera igual de feliz que el, pero el problema era encontrar a alguien que pudiera aguantarlo.

—¿Te volvió a dejar?—Soonyoung al ver llegar a MingHao sonrió ampliamente.

—Ya sabes cómo es Jihoon.—Sin pedirle permiso el mayor entrelazo sus manos.—Pero tengo un plan para que cambie.

—¿Un plan?—pregunto MingHao curioso.

—Le buscaremos un novio.—el más joven sonrió ante la idea de buscarle un novio a Jihoon.

Love is obviousDonde viven las historias. Descúbrelo ahora