8

93.4K 4.8K 862
                                    

"A ti te veo en todos mis planes, incluso en los que pensé que no invitaría a nadie"

***


Ya es la tarde del domingo, el día esta mas tranquilo de lo normal, el verano por fin ha llegado a su fin y eso me alegra, otoño es mi segunda estación del año favorita después del invierno.

No he visto a los chicos desde el viernes, todos salieron con sus familias, me han estado mandando fotos de lo que están haciendo y los lugares que están visitando, yo solo les mando fotos de mis pies arriba de la mesa de noche.

Desde el viernes en la noche no he podido dejar de pensar en Jefferson, en la forma en la que trata de ser rudo conmigo pero termina tratando de besarme. Cada que estoy con el siento una adrenalina por que sé que tal vez no este bien que me relacione con él.

Escucho el timbre y me asomo para ver quien es, como si supiera que estaba pensando en él, en cuanto me ve a través de la ventana sonríe y sin pensarlo le regreso la sonrisa. Bajo las escaleras, no sin antes peinarme un poco, he estado todo el día acostada así que tengo el cabello un poco enredado, traigo puesto un short y una sudadera aguada, me pongo unos tenis rápido y salgo para verlo recargado en la reja.

  —Hola—  le digo en cuanto voltea a verme.

— Hola—  sonríe y hace que mis piernas tiemblen — vine por algo que es mío—  frunzo el ceño — mi chaqueta— 

— Ah—  abro la puerta y entra, camino atrás de él hasta llegar a la otra puerta y espera a que yo entre — esta arriba en mi cuarto, si quieres siéntate en lo que voy por ella  —  subo las escaleras de dos en dos, agradezco que mis piernas reacciones correctamente, sé ve tan bien con esos pantalones de mezclilla y su playera negra que deja ver sus tatuajes en su brazo derecho bien formado, aclaro mi mente para pensar en donde la deje.

¿La lave? ¿ o esta en la ropa sucia? busco en el cesto sacando todo y aventando la ropa a la cama, no esta ahí, demonios, salgo de mi cuarto y lo veo sentado con su celular, voltea para arriba en cuanto me ve pero sigo mi camino hasta la terraza, creo que la colgué ahí, abro la puerta y siento el aire frío tocando mis piernas, la busco con la mirada y si, suspiro aliviada, no me gustaría perder algo que no es mío, me estiro para quitarla del tendedero, debí recordar que por mi estatura tenia que haber traído un banquillo, me estiro aun más y estoy por alcanzarla pero unas manos se me adelantan zafando la chaqueta de un tirón.

Me volteo para ver a Jeff pero me toma de la cintura y me gira para darle la espalda de nuevo.

  — Me gusto esa vista— sus manos me rodean y me da un jalón pegándome completamente a el, siento su entrepierna dura y su respiración acelerada, un escalofrío recorre todo mi cuerpo, el frío que sentía desapareció por completo — ¿esta vez también saldrás corriendo?— chupa el lóbulo de mi oreja y un gemido sale de mi boca — esto no es ni la mitad de lo que puedo hacerte sentir—  su voz sale mas roca, siento que mi cara arde por sus palabras, sube una de sus manos hasta mi pecho y lo masajea, instintivamente me muevo para atrás haciendo que un gruñido salga de su garganta — no hagas eso o te haré mía aquí afuera— hace un camino de besos desde mi oreja hasta el cuello, ladeo mi cabeza y quita mi cabello para seguir con sus besos, su otra mano también sube hasta mi otro pecho, siento su lengua fría y me estremezco, su mano baja moldeando mi cuerpo y llega al broche mi short, abro los ojos y tomo su mano para detenerlo.

— No—  me sorprendo al escucharme, eso sonó más como un gemido.

— ¿No que?—  se detiene pero sigue pegado a mi, no respondo — ¿no quieres que te toque?—  niego con la cabeza — no lo haré si no quieres—  me da un ultimo beso en el cuello y el frío regresa a mi en cuanto se separa, me volteo apenada, no es que no lo haya hecho antes, pero el me hace sentir de una forma diferente y eso me asusta, me asusta desearlo — ¿sabes que cada que me rechazas solo haces que te quiera mas?—

— Lo se—  me muerdo el labio tratando de parecer sexy, me mira unos segundos y después sonríe, se da vuelta y camina para entrar pero se detiene y voltea a verme.

— No quería hacer esto por que sé que te desearé más — 

No entiendo a que se refiere hasta que lo veo acercarse a mi y estampa sus labios en los míos, me toma por sorpresa, sus manos están en mi cintura pegándome a el, no se que hacer hasta que su lengua toca mis labios tratando de que le de acceso, abro un poco y siento sus labios fríos en los míos, un hormigueo recorre mi cuerpo y subo mis manos hasta su cuello acercándolo más, nuestras bocas se mueven lento pero apasionado, le doy un mordisco y lo siento reírse, vuelve a mi boca dando un ultimo beso y se endereza, sus labios se ven rojos y un poco mojados.

Me siento nerviosa, no sé que decir o hacer, el me mira sin decir nada y bajo la mirada a mis pies, una sonrisa sale de mi boca sin darme cuenta. Entro y el camina detrás de mi, lo acompaño hasta la puerta sin decir nada.

   — Gracias por prestármela—  es lo único que se me ocurre decir antes de que se vaya.

  — Cuando quieras— se acerca, me agarra del mentón y me da un beso rápido —nos vemos— se da vuelta y camina alejándose de mi, lo observo unos momentos y sin darme cuenta llevo mi mano hasta mi boca, siento cosquilleo.

No te puedes enamorar Elanie...

  — Lo sabia—  volteo y a un metro de mi esta Alex con la boca abierta

Mierda...

NO ES UN MONSTRUODonde viven las historias. Descúbrelo ahora