Capitulo 11 Desconfianza.

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Ella se quedó viendo su teléfono roto, parece que aún funciona da.

—Kyoya, puede decirle a Amelia que voy para haya?—dijo limpiando sus lágrimas— estoy bien, solo dile es...
—Ella está bien, la llevaré a su casa pronto, hasta luego cuñado —dije tomando su celular y colgando— tú no te irás a ningún lado, ven vamos —la jale—
—Suéltame —susurro—

Todos en el corredor observaban como jalaba de Kaori, vieron todo incluso como le grite a Yuma, no me importaba eso, me importaba lo que ella u Yuma tenían.
La adentre al camerino y ella se sentó en el sofá.
Me senté en una silla y solté un suspiro, debo calmar mis celos, debo calmar mi enojo, debo calmarme podría incluso llegar a hacerle algo a ella.
Estuve así pesando mucho tiempo cuando alze mi rostro y la vi dormida, de había quedado dormida y nunca me di cuenta.

—Señor Kou, en 10 minutos —dijo el encargado—

Yo me quede en silencio y solté un suspiro.

—Gracias —sonreí—

Me levante y con una manta tape a Kaori, terminando el concierto estaré feliz y podré hablar bien con ella, poder pedirle disculpas por mi mal comportamiento.

—Vaya, fue agotador —me dije a mí mismo— son fantásticas todas
—Aquí tiene su botella de agua —dijo el encargado— He, señor Kou quién es la bella chica que vino con usted?

Me quede serio a esa pregunta.

—Mi futura novia —sonreí—
—Parece que se conocen muy bien
—En realidad, ya habia algo entre nosotros, y la recuperare cueste lo que cueste, y te pediría que nos encierres y no, nos molesten –guiñe un ojo—

Él me miró pícaramente y yo asentí, en realidad no haría nada que Kaori no quisiera pero quería estar a solas con ella y si intentaba salir que ella no pudiera.

Entre a el camerino y escuche como cerraron con llave. Kaori estaba nuevamente dormida, había pasado más de una hora y seguía dormida? Parece que no se mueve en absoluto para dormir, eso significa que en una vida juntos yo la tiraría de la cama.

—Kaori —la llame— estás despierta?

Ella no se movió para nada, puse mi dedo debajo de su nariz, podía sentir el aire caliente que salía de el.

Deje la botella de agua y quite mi ropa, esperaría un poco más.

—Kou?—dijo cuando estaba abrochando mi pantalón—
—Ya despertaste —sonreí—
—Que hora es?—susurro—
—Casi media noche —dije tratando de quitar mis botones—
—Debería irme —dijo levantándose—
—Espera, antes podrías quitarme la camisa? No soy bueno con los botones —dijo frustrado—

Ella se quedó sería y camino a mi, se puso entre mis piernas ocasionando un sonrojó en mi, jamás una chica se había puesto así en mi.
Con facilidad ella comenzó a desabrochar la camisa.

—Gracias —sonreí—

Ella asintió y se aventó a el sofá, debe estar muy cansada.

Me cambie muy rápidamente y vi que tenía los ojos cerrados.

—Oye —la llame— lo siento

Ella abrió los ojos y me miró sería.

—Solo olvídalo —bostezo—
—Kaori, que tienes con Yuma?—dije serio—

Ella soltó un suspiro y me tomo de el rostro besándome.
Me quede sorprendido ante ese acto, era la primera vez que ella me besaba sin que yo le dijera que lo hiciera.

—Bo responde nada, pero quería hacerlo —dijo sonrojada—

Estaba feliz, pero parecía que ella no, la verdad es que me estaba ilusionando con ese beso.

Entre platica y platica, Kaori estaba sobre la mesa que estaba ahí, mientras que por atrás yo chupaba la sangre de su cuello, podía oír cómo ella gemía del dolor, extrañaba tomar de su sangre, no es fan buena como la de Yui, pero es satisfactoria para mi sed.

El encargado pasó por afuera del camerino cuando oyó gémidos.

—Ah! Kou me duele!—dijo Kaori—
—Lo siento, eres tan deliciosa que quiero mas –dijo Kou mordiendo el cuello de Kaori por atras—

El encargado sonrío con picaría al oír eso, y se fue de ahí imaginado muchas cosas.

—Kou, basta me duele hasta el demonio!—dijo Kaori–
—No grites tanto, nucha gente pasa por aquí —dije acariciando su abdomen— podrían escucharnos y pensaran otra cosa —susurre en su oído— quiero mas, dame más de tu deliciosa sangre
—Basta, no estoy acostumbrada a esto —dijo recargando sus brazos a la mesa—
—Bien, te dejaré —sonreí—

Ella tocó su cuello, estaba muy sonrojada, también yo, estábamos en una posición donde sería fácil de levantar su falda y solo yo bajar mi cierre.

—Bo pienses cosas malas —dijo Kaori viéndome sería—

Solté una risa al pensar en mi rostro que tenía para que ella se diera cuenta de lo que pensaba.

—Lamentó los mensajes con Yuma, yo..
—Tranquila, me dejé llevar por mis impulsados de hermano, tú y yo no somos nada

Pude ver la cara de Kaori que cambio de expresión, la verdad es que eso a mí me dolió, me dolió decir algo en que yo lo quería aceptarlo.

—Si, así es tu y yo no somos nada —sonrío—

Eso había partido más mi corazón, el saber que ella esté saliendo con Yuma, que esa sangre solamente se la de a el, que él pueda hacer lo que quiera con ella.

—Kou?—dijo Yui desde las escaleras—
—gatita —sonrío— es un buen momento podrías ir a mi habitación? —dije sacudiendo el agua— Kaori déjame llevarte a una habitación —sonreí—

Ella estaba empapada de la lluvia y asintió.
La deje a una habitación aún lado de la mía y Yui entro conmigo ayudándome a secar, le pedí que durmiera conmigo, pero otra vez esos horribles recuerdos dónde marcaron mi vida. Me paré exaltado y vi a Yui, durmió lejos de mi, solté un suspire y salí de la habitación.

—Entonces, que hiciste con el?—dijo la voz de Yuma—

Me quede serio al escucharlo y pegue mi oreja a la puerta.

—Nada, cuantas veces te lo tengo que decir?
—Lo necesario para créerte, tienes mordidas, te dejaste tocar por el?—dijo serio—

Yuma parece que se a dado cuenta de que he mordido a Kaori y que ella está aquí.

—Tengo que irme —dijo Kaori—
—Déjame llevarte —dijo Yuma—

Cuando todo se quedó en silencio, solo podía escuchar pequeños ruidos.

—Kaori.. —susurro Yuma—

Y todo volvió a quedar en silencio.
La rabia había vuelto a mi, los deseos de deshacerme de ellos dos.

Kaori y Yuma saliendo de la habitación y los mire serio, me molestaba que ellos estuvieran juntos, mi corazón se partía más y más.

Un Viejo Amor; Kou Mukami Where stories live. Discover now