Nerius

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Faltaba un día y medio para llegar a Nerius y Kyungsoo se pasó la mayor parte en silencio, viendo como Heechul se sacudía constantemente y se quejaba con Jongin, quien estaba muy contento con su temperamento. El príncipe podía decir que el chico estaba perdiendo la paciencia con su tío e incluso cuando hubo un completo silencio, Heechul debió haber estado pensando en algo extraño porque el estado de ánimo de Jongin parecía reducirse mientras se acercaban a Nerius.

"¡Tío Heechul por favor!" Jongin finalmente estalló. Kyungsoo no había oído nada, por lo que supuso que Heechul había pensado en algo particularmente malo o burlón.

"¿Puedes dejar mi cabeza en paz por un minuto?" Jongin continuó con un rostro molesto. "Este viaje me ha agotado lo suficiente y por solo un miserable minuto me gustaría tener solo mis pensamientos en mi cabeza". Kyungsoo se sintió culpable de nuevo. Había hecho todo lo posible por no pensar en Jongin, pero a veces su anhelo por el otro hombre se escapaba seguido de una breve disculpa y su caballo se quedaba atrás un poco a cierta distancia. Esta fue una idea horrible. Debería haberse ido a casa a Drakon.

"Oh, lo siento niño" se disculpó Heechul, una mirada sincera en su rostro. "No me di cuenta de que te estaba molestando tanto".

"Solo déjalo" contestó Jongin atontado. "Solo quiero irme a casa."

Cabalgaron todo el viaje sin tomarse un descanso, solo disminuyendo la velocidad para ir más lento con los caballos. Jongin era su líder y no mostraba signos de detenerse y Kyungsoo no se atrevía a molestarlo aún más. En algún momento cerca del anochecer, el príncipe cabeceó y cerró los ojos. Sus manos se soltaron alrededor de sus riendas y estuvo a punto de caerse, pero su caballo se sacudió y lo despertó. Había pasado períodos más largos sin dormir antes. Esto no era nada para él, se dijo a sí mismo. Cuando se acercaron a Nerius cerca del atardecer, una llovizna salada comenzó a impregnar el aire y Kyungsoo inhaló profundamente, descubriendo que le gustaba el refrescante aroma. Jongin y Heechul parecían estar inhalando el aire también. Una pequeña sonrisa reemplazó inmediatamente a la expresión estoica de Jongin y el corazón de Kyungsoo vibró. No había visto al otro hombre sonreír así en dos días. Él debe haber estado muy emocionado por ir a casa. Ni siquiera los pensamientos amorosos de Kyungsoo borraron la sonrisa de su rostro.

El sonido de las olas chocando contra la orilla también hizo eco en los oídos de Kyungsoo y sintió una emoción atraparlo. Él nunca había visto el océano antes. Sus misiones anteriores nunca le habían permitido viajar tan al sur antes. Tal vez podría embotellar un poco de arena o agua de mar y llevárselo a casa como recuerdo. O si tenía suerte, podría encontrar algunas conchas bonitas y llevárselas también a su niñera. Tuvo el repentino impulso de estar envuelto en una gran ola y ser apartado de esta vida. Pensó en la historia que Jongin le había contado sobre la sirena y tal vez no era tan malo convertirse en espuma marina.

"Ahh, no hay nada como el hogar" suspiró Heechul felizmente mientras estiraba los brazos para tocar el cielo rosa anaranjado. "Apuesto a que el cielo no se pone así de bonito en Drakon" se dirigió a Kyungsoo.

"Solo a veces" respondió Kyungsoo, "en el verano a veces el cielo se ve así. En el invierno, si tenemos suerte, podemos ver las auroras boreales. Sin embargo, no estamos lo suficientemente lejos al norte para verlos todos los inviernos ".

"Iré a visitar a Drakon en el invierno" asintió Heechul. "¿Cómo está tu primo? Conocí al Príncipe Taewoon una vez cuando estaba celebrando su decimoctavo cumpleaños en Pandemos."

"El Príncipe real está bien" respondió Kyungsoo. "Justo antes de irme, él también había salido en un viaje a uno de los reinos del este para cortejar a una princesa. Hay muchas posibilidades de que ella pueda ser la próxima reina de Drakon "

Good Graces (Kaisoo) - TraducciónWhere stories live. Discover now