ver la liga de la justicia en un dia lluvioso comiendo helado caducado y finalmente escuchar musica deprimente. fueron los ingredientes de esta historia.
realmente, ni yo la entiendo, asi que no esperen mucho, ni si quiera es del genero que acostumb...
Vida, hacia ya más de seis semana que había obtenido otra oportunidad de pertenecer al reino de los vivos. Con mis poderes y habilidades siempre pensé que tendría una vida larga, pero incluso yo sabía que el día que mi corazón dejara de latir eso sería todo para mí.
Pero me alegro haber estado equivocado.
Sin embargo y contrario a todo lo que se podría creer, había algo diferente, no sabría decir que era, otra vez era el humilde reportero del Diario el Planeta, y cuando se me necesitaba regresaba a ser el héroe de rojo y azul, tenía mi hogar, mi familia y a Louis de vuelta. Entonces
¿Por qué no me sentía vivo del todo?
Me sentía incompleto, que algo me faltaba, pero sobre todo... insatisfecho e irritado.
Hacia todo lo posible para que aquellos que me conocían no se dieran cuenta de cómo realmente me sentía. Sobre todo Lois, ha quien es estado evitando tras las escusas de emergencias ficticias.
No se equivoquen, aun amo a Lois... solo, que siento que hay algo diferente en mí... y sea lo que sea, no quiero que ella lo descubra o peor que llegue a presenciarlo.
Para escapar de mis pensamientos, vuelo hacia la exosfera, desde allí contemplo el planeta, mi mirada recorría todos los escenarios que acontecían, las calamidades, desastres y crimines seguían siendo sucesos rutinarios. Pero también, aquellos que los enfrentaban, policías, doctores, bomberos y en aquellos sucesos donde se necesitaban habilidades especiales, aparecían aquellos héroes que ya no pertenecían al anonimato.
Era bueno ver que compartía el deseo de justicia con aquellos a los que ahora podía llamar compañeros.
Al pensar en aquella palabra, su atención se dirigió completamente a la ciudad de Gótica, el velo nocturno ya cubría la ciudad maldita y aquellos que gozaban de causar el mal ajeno, salían a cometer sus fechorías.
Sin embargo no eran los único que emergían de la sombras, el caballero oscuro cual fiero guardián sometía a toda escoria que pensara que podría salirse con la suya en su territorio.
Ver al sagas murciélago implantar castigo siempre lo embelesaba, no negaría que desde su resurrección, siempre buscaba un momento para observar desde la distancia al oscuro protector.
No sabía porque lo hacía, solo que no había podido detenerse, no entendía el sentimiento que lo embargaba, no era desconfianza, tampoco lo odiaba, pero sentía que las cosas entre ellos aun no habían terminado.
Sus pensamientos fueron interrumpido cuando escucho un aullido de dolor provenir de Batman, en el momento que se había distraído en reflexiones, el caballero oscuro había ido hacia una trampa, superado por números y herido con lo que parecía ser una flecha envenenada o como mínimo drogado para lograr debilitar al murciélago, este actualmente se veía aprisionado por dos fornidos sujetos que lo sujetaban mientras que otro tipo, que parecía un mastodonte, golpeaba con saña el rostros del héroe desvalido.
Noto el momento justo donde Batman perdió el conocimiento, sintió una ira desmedida inundar su ser y antes de poder pensar en lo que estaba haciendo, bajo cual rayo implacable y en cuestión de segundo dejo fuera de combate (y para qué negarlo, también muy mal heridos) a aquellos que osaron lastimar al murciélago.
Se dirigió al cuerpo inerte del caballero oscuro y al contemplarlo no pudo evitar que su mirada se concentrara en el hilo de sangre que salía de la esquina de la boca del héroe caído.
- Sangras
Aquella palabra se la había preguntado el caballero oscuro cuando se enfrentaron gracias a las artimañas de Lex. Misma pregunta que el mismo le pregunto al murciélago después de regresar a la vida.
Sin entender el porqué de sus acciones quita la máscara de Batman para poder ver mejor
Ver la sangre le produjo cierto deseo indebido de querer ver más... pero sobre todo ser la causa de que ella fluyera.
No – asustado por el rumbo de sus pensamientos, cargo delicadamente en sus brazos al aun inconsciente vigilante.
Levanto en vuelo para llevar su preciada carga a un lugar donde pueda ser atendido y cuidado...
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Un momento...
Acababa de pensar en Batman... como su preciada carga.
Lo mejor sería alejarse del murciélago por un tiempo. Si tan solo pudiera lograrlo
