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Llevo más de media hora tocando la puerta de la casa de Jeno, quiero suponer que sigue dormido, son vacaciones ¿no?, debo ser la única lunatica que esta aquí a las 7 a.m.

¿Por que  nadie me abre?

He demorado casi dos días en armarme de el valor suficiente para venir hasta aquí y decirle a Jeno todo lo que siento y ¡nadie me abre!

No quiero pensar que esta molesto, aunque eso ocupa una gran cantidad de porcentaje sobre el motivo por el cual no me abre y esta bien si está molesto, yo me quede parada ahí como una estúpida sin decir nada y dejé que se fuera.

Di un último golpe a la puerta con mi cabeza para luego darme la vuelta y sentarme al pie de esta.

Me encogi y oculte mi rostro en medio de mis rodillas.

Debía llamarlo.

Saqué mi móvil del bolsillo de mi polera y marqué su número.

La contestadora me mando al buzón de voz más rápido de lo que me di cuenta que había metido la pata bien profundo.

Golpee mi cabeza más veces en la puerta. Estoy molesta, molesta conmigo.

—¿___?— una voz me llamo.

Abrí rápidamente mis ojos para ver de quién se trataba.

—Jaemin— susurre en cuanto lo vi parado a unos metros de mi con su bicicleta.

—¿Que haces?— preguntó con extrañeza al verme. Supongo que debió ver como me golpeaba en la puerta.

—Soy una tonta— me quejé para luego volver a esconder mi rostro en medio de mis rodillas.

Lo oi reír un poco, no me molesta, esta bien que se ría, merezco la burla de todos.

Escuché que se acercaba más y se sentaba a mi lado en el batiente al pie de la puerta.

—No digas eso, no eres una tonta— palmeo mi espalda con su mano.

—Jeno, lo heche a perder todo con él— hablé sin levantar mi vista aún —¿Tu sabes donde está?— está vez levanté mi cabeza con gran velocidad esperando que me de una respuesta que me aliviara.

—Él se ha ido.

[...]

—Entonces Jeno se declaró.

Le conté todo a Jaemin, en estos momentos era mi único apoyo.

—Soy una tonta— volvía a repetir.

—Es cierto— giré mi cabeza para ver a Jaemin quien después de repetir por quinta vez aquello recién me daba la razón.

Este solo sonrió.

—A Jeno le gustaste desde el primer momento en el que te vio, por mucho tiempo te seguía a donde fueras, él sabe mucho más de ti de lo que tú misma puedes llegar a saber. Y nunca te dijo nada por que él es así, puede verse alguien seguro y atractivo pero en realidad es alguien tímido e introvertido. Debió de haberse demorado mucho en tomar la decisión de declararse y en lugar de tratar de sacarte una respuesta el muy idiota se fue.

Jaemin negaba con la cabeza y daba un suspiro de frustración.

—Me haces sentir peor— me quejaba al borde de las lágrimas.

Jaemin se paró rápido y se posicionó frente mío, me tendió la mano para que la tomara.

Vi su mano algo dudosa, no entendía que es lo que quería hacer. No demoré demasiado en tomarla y pararme.

YOU SMILE  | Jeno & ___ |Donde viven las historias. Descúbrelo ahora