11 Años después de la Derrota de Naraku, Sesshomaru volverá a ver a Rin, su orgullo es mas grande que cualquier cosa así que sólo volverá para destrozar algo que nunca más podrá recuperar, y que empujará a Rin A Revelar un Gran Secreto y ... Que tal...
- ¿Qué esta sucediendo? - El emperador junto a los 4 Lores se reunieron en el patio del palacio y cada uno empezó a usar sus poderes para saber que estaba sucediendo.
- ¡Majestad! ¡Majestad! - Viene un sirviente corriendo y arrodillándose frente al Emperador - hemos encontrado un gran agujero en una pared subterránea del castillo... parece que alguien ha hecho explotar una de las antiguas paredes del palacio - Dice el sirviente agitado y con un terror que se podía ver en sus ojos.
El Emperador miro a los Lores y cada uno hizo una señal moviendo la cabeza
- Bien, ese asunto lo arreglaremos en un solo segundo -Se aleja y va en dirección al lugar del ataque mientras los 4 demonios lo siguen en silencio.
Las 3 Ladys estaban en el jardín cuando oyeron una explosión. Preocupadas regresaron al Castillo y mientras recorrían los pasillos en dirección al Salón de Tronos vieron que Rin salia de sus aposentos junto a Natsu.
- Jóvenes, creo que interrumpimos... un momento... Intimo... - Dijo Hikari la Lady del Sur.
- Eh... No no, no interrumpieron nada - Responden Natsu y Rin un poco sonrojados.
- Eso esperamos - Dicen Reiko y Akane riéndose bajito.
Las 3 Ladys, Natsu y Rin por unos minutos se habían olvidado de la situación que los había alarmado, pero entonces la Delgada, juvenil e imponente figura del Príncipe Ryo, el hermano de Rin.
- Oigan... ¿Que esta sucediendo aquí? - Dice el joven principe con curiosidad
- Nada, solo nos encontramos y.. - Lady Hikari recordó el porque estaban ahí - Oh dios... debemos apurarnos...
Todos recordaron la razón del porque estaban alarmados, miraron a Ryo y soltaron un suspiro.
- Estamos siendo atacados... Presiento que algo malo esta por suceder - Rin juega con la tela de su vestido un poco nerviosa.
- Lo mismo presiento yo - Se escucha la suave voz de la Princesa Sakura.
Todos voltean a verla y se quedan en silencio unos segundos.
- Mejor sera apurarnos - Natsu dice con seriedad.
El pequeño grupo silenciosamente asintieron con la cabeza y sin decir ni una sola palabra se encaminaron directo a la Sala del Trono.
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En la sala del trono todos estaban reunidos, incluido la Familia Imperial y los Lores con sus consortes, claro menos Sesshomaru. Este por su parte se dedicaba a Mirar a Rin y a Natsu que por nada del mundo se separaban. En el salón se escuchaban los bullicios y susurros de los ministros del Palacio Imperial.
El Emperador se sentó en el trono, su esposa, la emperatriz a su lado derecho. Rin, Natsu, Sakura y Ryo se sentaron al lado de la pareja Real. Se hizo un silencio mortal y después de unos segundos, el emperador empezó a hablar.
- Todos sabemos lo que sucedió en el palacio hace solo unos minutos. Aunque nuestro palacio y red de información es grande, es muy difícil conseguir información de los sirvientes, sobretodo por el hecho que la información ha sido reservada solo para las mas altas esferas de la realeza y lo militar. - habla el Emperador en tono serio.
- No sabemos que es lo que ha pasado esta noche, pero por la información que hemos obtenido en las últimas semanas y los últimos minutos; podemos asumir que tenemos un nuevo enemigo y trataran de atacar el castillo - agrega Tsuki.
Se vuelve a hacer un silencio total. Rin al ver esto, toma la palabra.
- Ahora debemos pensar en lo que podría estar pasando. Aun estamos tratando de restablecer comunicaciones con algunos de nuestros informantes, así que hablemos de posibilidades. ¿Cuáles son las posibilidades de que la familia real y que nuestra gente este a salvo?
- A pesar de todo, buenas - responde un ministro sentados alrededor de la mesa - El palacio tiene muchos refugios, así que mientras ellos hayan podido llegar a un refugio y esconderse, sus probabilidades son buenas. Nuestros Enemigos tendrían que destruir el palacio antes de encontrar en que refugio están.
Aquel ministro tenia una penetrante mirada, su voz era varonil y tranquila, su cabello plateado se levantaba en una coleta, su postura paciente y seria llamaba mucho la atención de la Princesa Sakura.
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- Es una buena propuesta Lord Satoshi, los refugios tienen una barrera indestructible e invisible... Nos sera de gran ayuda - habla Ryo
- Eso si no deciden esperar a que ellos salgan cuando la comida y otros recursos se acaben - agrega otro.
- Príncipe Natsu - dice el Rey silenciando a todos - ¿Qué opina?
Natsu respira profundamente y endereza su postura:
- El palacio entero esta lleno de refugios, están por todos lados. La guardia es buena y fuerte, así que es muy probable que derroten a nuestros enemigos, sobretodo si no poseen buenas armas de ataque. Los refugios, al menos los más grandes, tienen recursos para varios días o unas semanas; pero los más pequeños sólo durarán unos días.
- De acuerdo con Natsu, mi padre decía que no eran mas que una molestia. La verdad es que eran bastante inofensivos, sus ataques eran continuos pero la mayor parte del tiempo solo desaparecían cosas. La ciudad de Takamatsu al parecer no es mas que ruinas. Además no creo que este ataque venga de los enemigos que acostumbramos a derrotar. Los nuevos ataques son más violentos, y casi siempre hay muertos cada vez que atacan atacan - dice Sakura con un aire serio y pensativo.
- Por eso es que estamos planeando con ellos en mente - dice el Emperador Shiro - Estos nuevos enemigos nunca se identificaron como los demás, eso sólo quiere decir o que hay otro grupo que los controla, ellos pertenecen a uno de esos grupos, o en realidad nunca hubieron dos grupo, sino uno trabajando por separado.
Todos se quedan en silencio pensando lo que el Emperador acababa de decir. Si, había un nuevo enemigo, y este no era igual a los otros que antes habían enfrentado... Este era completamente diferente.
