A Pesar Del Tiempo

3. Confundido

— Señor Stark, esta por llegar a Katmandú— le informó si IA.

— Gracias, JAR. Maldito viejo a donde tenías que venir a esconderte— se quejó.

— Señor, la verdadera pregunta es con ayuda de quien se pudo esconder tan bien.
— Tienes razón, todos los lugares donde lo hemos buscado no pusieron restricción a que pasemos sus fronteras, eso quiere decir que SHIELD esta involucrada— razonó— ya le preguntaré al tuerto después.

Llegó al lugar indicado por la IA, dejo su traje de Iron Man en la recepción del hotel y ahí pregunto por el rubio. La recepcionista le indicó el número de habitaciones y aparte le pidió un autógrafo y una foto, a lo cual Tony no se negó.

Después de recibir la información, fue en busca del capitán.

Era alrededor de las 7 p.m., Steve se encontraba tomando un relajante baño después aquella cómoda y necesitada siesta. Mientras tanto Thor y Loki estaban demostrandose amor, con besos apasionados y caricias provocadoras.

El molesto ruido de alguien tocando frenéticamente la puerta los interrumpió.

— Yo abro— dijo Loki separándose de Thor, mientras este maldecia bajo por la interrupción.

Al abrir la puerta Loki observó detenidamente al castaño, sin duda alguna era él, el bastardo mujeriego que había osado lastimar a su protegido hace ya años. Se apoyo en el marco de la puerta impidiéndole el ingreso.

— ¿qué quieres?— pregunto fastidiado el Dios.

— Busco a Rogers— le respondió el otro con el mismo tomo de voz. Por alguna extraña razón el castaño se sentía muy molesto al ver a aquel apuesto joven pelinegro con la ropa desarreglada y un poco sonrojado (debido a lo que estaba haciendo con Thor)— lamento si interrumpo algo importante, pero es necesaria la presencia de Rogers. Tiene trabajo que hacer— le habló con sarcasmo mientras se acercaba intentando entrar en la habitación.

En la mente de Loki apareció una idea para molestar al genio, tal vez no la mejor pero si lo suficientemente buena como para poder reírse como desquiciado cada vez que recuerde su hazaña.

— Pasa— cedió campo— Steve se está bañando.

Tony no necesito más, como alma que lleva el diablo entró echando chispas sin saber exactamente por qué. Cruzó la habitación hasta el cuarto de baño ignorando olímpicamente la presencia del otro rubio, quien lo miraba amenazante pues también lo había reconocido.

Sin siquiera tocar ingreso al baño encontrando a un Steve sumergido completamente en la bañera.

— Rogers!! Eres un...— se quedo atónito. Steve se había levantado y estaba saliendo de la bañera, las gotas de agua caían de su cabello; y bajaban por su espalda y pecho desapareciendo entre las líneas de su marcado abdomen, donde Tony tenía la vista fija.

Tras reaccionar y darse cuenta que se había quedado embobado viendo la desnudez del capitán, se sonrojo y desvío su mirada percatandose que aquel pelinegro que lo recibió los observaba divertido desde la entrada del cuarto de baño.

— ¿necesitas algo?— pregunto el rubio mientras se encaminaba a la salida del lugar. Seguido por Loki y el castaño se dirigieron a donde estaba Thor.

— Tenemos una nueva misión— habló el genio tratando de no mirar el perfecto trasero de Steve. *Maldito rubio oxigenado, no podías ponerte una maldita toalla...* Pensó.

— Lo siento, me tengo que ir— se disculpó con los dioses, mientras se vestía.

— No te preocupes, también debemos irnos— hablo el otro rubio.