Capítulo 2. En el que te llaman "idiota".

895 65 97
                                    

  -Dije, ¿qué demonios estás haciendo aquí? -volvió a preguntarte el chico de ojos azules con más insistencia.

Estabas tan impresionada mirando a la persona que estaba delante de ti que no fuiste capaz de dar respuesta a su primera pregunta y ni siquiera lo habías notado.

_____: Ehh...¿q-qué? -preguntaste balbuceando. Aún no habías captado bien su pregunta.

-¿Eres idiota acaso?, es la segunda vez que te lo pregunto y no dejas de poner esa cara de tonta. Es bastante molesto.

Apenas escuchaste las palabras "idiota" y "tonta" salir de la boca de aquel chico, te diste cuenta de que en realidad tenía razón, estabas actuando como una tonta y eso te hizo sentir un poco avergonzada pero molesta a la vez.

_____: ¿Cómo me llamaste? -preguntaste irritada. Nunca te había gustado que la gente te llamara de esa manera a pesar de que muy seguido lo hacían. Probablemente eso era lo que te molestaba; la monotonía que tenían esas palabras al rededor de tu vida diaria.

-Idiota, te llamé idiota -dijo el chico con un tono desafiante.

_____: Mira, tú mocoso -te acercaste a él y comenzaste a dar pequeños golpes a su pecho con tu dedo índice en actitud de reproche. -estoy harta de que la gente me llame de esa manera cómo si se sintieran con todo el derecho de hacerlo. Sé que probablemente sea cierto, y sé que mi actitud y mis acciones no son las correctas siempre, pero, dime, ¿acaso tiene algo de malo querer ser como eres sin miedo a que los demás te juzguen?, porque eso es exactamente lo que hago yo, hago las cosas que quiero hacer sin importar las consecuencias que conlleven ni los comentarios que puedan hacer los demás sobre mis acciones, porque nunca se sabe cuando será el día en que te irás por completo a la mierda y ya no podrás volver a tener la oportunidad de hacer todo lo que alguna vez quisiste hacer. Estarás enterrado a cientos de metros bajo el suelo sin poder moverte, y ahí, justo en ese momento, pensarás "tenían razón, en verdad sí fui un idiota pero sólo por no haber aprovechado hasta el último momento de mi vida" y eso si que será realmente triste.

Para cuando terminaste de hablar, pudiste notar cómo aquel chico te miraba estupefacto ante tal discurso que acababas de darle que no tenía nada que ver con la pregunta que él te había hecho anteriormente. 

Nunca habías dicho cosas como esas a nadie. Normalmente siempre preferías mantenerte callada ante comentarios y provocaciones de los demás porque sabías que no tenía importancia discutir, pero...¿por qué justo con este chico que acabas de conocer tuviste que ser tan directa?. Tan rápido como pudiste te alejaste unos pocos paso de él ya que no habías notado que lo tenías casi completamente sometido.

____:...lo-lo siento...no era mi intención decir esas cosas. Creo que me altere un poco...

El chico te miró directamente y tu podías sentir su mirada a pesar te haber agachado la cabeza hacia el piso. Podías sentir aquellos ojos sobre ti como si estuvieran apunto de aplastarte.

-Oye, en serio, ¿tú quién demonios eres? -claramente pudiste sentir un escalofrío que recorrió por completo tu espalda al escuchar la voz firme y seria del chico.

____: Y-yo soy ____, y vengo del otro lado de ese muro que está allá -con tu dedo índice señalaste el lugar al que te estabas refiriendo pero él no volteó para nada. Parecía estar más concentrado sólo en los movimientos que producía tu boca al hablar -no quería molestarte a ti ni a tu circo, en serio, es sólo que...bueno, sentí de alguna manera la necesidad de venir aquí...bueno, no de venir precisamente aquí porque yo no tenía idea de que había un circo en este lugar pero sí que quería cruzar el muro y e-en realidad no sé porqué pero... -comenzabas a balbucear otra vez sin darte cuenta. Tu actitud, que antes había sido la de una chica enojada y temeraria había sido remplazada en un instante por la de una chica digamos...más idiota.

Al darse cuenta de esto, el chico comenzó a reír de una manera exagerada.

____: ¿Me podrías decir qué es tan gracioso? -le preguntaste, de nuevo algo molesta.

-Bueno, en realidad, tú eres lo gracioso -dijo el chico con un poco de burla saliendo aún de su boca -nunca había conocido a alguien como tú. Eres tan extraña.

____: Bueno, pienso lo mismo de ti -te cruzaste te brazos un poco indignada -además, ¿puedo hacerte una pregunta?

-Bueno, acabas de hacerme reír un rato, creo que lo menos que puedo hacer para pagarte es contestar a lo que sea que quieras preguntarme.

____: ¿Qué se supone que es este lugar y porqué estás vestido de una manera tan...peculiar?

-No sé a qué te refieras con "peculiar", pero sí puedo decirte que este lugar es un pequeño circo que he montado junto con un compañero y mi padre. Bueno, en realidad mi padre sólo vino a entrometerse.

____: Pero, ¿por qué está en medio de la nada?

-Bueno, supongo que es porque así el ambiente es más tranquilo, ¿no lo crees?

____: Tal vez, pero...¿que acaso la gente viene a verlos hasta acá?

-En realidad, no hemos tenido una visita desde hace mucho tiempo, tú eres la primera persona que veo por aquí desde hace meses.

____: ¿Y eso no les afecta?

-En realidad no, así tenemos más tiempo para practicar nuestros actos.

"Eso es algo estúpido en realidad" Pensaste, pero decidiste mejor no decirlo en voz alta por alguna razón.

-¡Ah! ¡tengo una idea! -dijo de repente el chico un poco entusiasmado- ¿por qué no vienes tú a ver nuestro acto?, estoy seguro de que te encantará.

____: ¿En serio?, ¡me encantaría! Pero... -miraste tu reloj de mano y te sobresaltaste al mirar la hora que era -oh no, ¡es muy tarde ya!, no llegaré a tiempo a la escuela.

-¿Qué es escuela? -preguntó el chico inocentemente pero tú no prestaste atención a lo que había dicho.

____: Tengo que irme, lo siento. Vendré más tarde a ver su acto, lo prometo.

-Está bien.

____: Llegaré como a las 8 de la noche así que espérame.

-Por supuesto.

____: Ah y, una última cosa...

-¿Qué?

____: ¿Me podrías decir...tu nombre? -preguntaste un poco avergonzada pero con el tono de voz más dulce que pudiste encontrar.

-Ah, me llamo Popee.

____: ¿Popee? -preguntaste extrañada.

-Sí, ¿algún problema?

____: No, no. Es un.. lindo nombre.

Él no dijo nada ante eso, sólo se quedó mirándote con aquellos ojos inciertos que te habían mirado antes.

____: Bueno, hasta más tarde -dijiste finalmente y saliste corriendo del lugar sin esperar a que Popee te respondiera.

____: Así que Popee es su nombre... -susurraste para ti misma con un extraño sentimiento de felicidad que inundaba tu pecho.

Al llegar a la escuela, no pudiste pensar en otra cosa durante todo el día más que en Popee y en que más tarde lo volverías a ver. 

A pesar de haber sido un poco dura con él al principio, no podías evitar sentir un cierto sentimiento de atracción hacía él. No podías esperar más para que ese día concluyera y pudieras volver a escalar ese complicado muro amarillo sólo con la esperanza de ver a aquel chico rubio que tanto te había cautivado. 

Siempre fuiste tú. (Popee x lectora)Where stories live. Discover now