MY FAVORITE BAD BOY | Na Jaemin |

【 11 】

—¡Quita a esa perra de mi vista!

Si alguna vez cruzó por tu cabeza la alocada idea de como sería Godzilla si fuera humano yo te responderé eso ahora mismo.

¡Mamá es Godzilla!

—Mamá, ella no tiene la culpa, esas medicinas le debieron subir la adrenalina, sabes que ella es tranquila siempre— yo tratando de defender a Goon de este lío.

—Me limpio con las jodidas medicinas, ¡No la quiero ver!— intento 3,873 fallido de defender a Goon.

Suspire pesadamente, mire a Goon y mentalmente le dije que pidiera disculpas. No me entendió, que raro, generalmente esto funciona.

La cargué y subí a mi habitación, tenía que buscar algo para hacer con ella, al menos hasta que mamá se olvide de sus zapatos de Charol y se acostumbre a la idea de que Goon los va a cagar en pedazos durante los siguientes días.

— Jaehyun — canturreaba en el umbral de la puerta de su habitación.

— ¿Lograste algo? — se acerco rápidamente a nosotras con una mirada expectante.

— La sigue odiando — hice una mueca.

Jaehyun golpeó su cabeza en la puerta.

— Piensa algo rápido que se me hace tarde para ir a la escuela — hablé impaciente moviendome de un lado a otro en mi sitio.

— ¡Eso es! — dio un aplauso y me señaló — Podrías llevarla a la escuela. Yo no puedo llevarla a la universidad pero de seguro en la escuela te dejaran entrar con ella.

Mire a Goon que estaba en mis brazos.

— Jaehyun — me quejé.

— Por favor — junto sus manos en forma de ruego y colocó su rostro en modo "cachorro mojado" y ¡¿como diablos resistirse a eso?!

Bien Goon, prepárate para un largo día atada al árbol del patio de la escuela.

Era una gran suerte que no haya crecido tanto, de esa forma podría llevarla en la canasta de mi bicicleta, sí, ya tengo bicicleta de nuevo.

Tengo menos de 20 minutos para tomar desayuno y llegar a la escuela.

¡Jodida mitad de semana!

Saqué a Goon de casa. Mamá no quería ni verla en el jardín.

Tomé mi desayuno como un rayo. Saqué la correa de Goon del desván y salí a toda prisa de casa.

Metí a Goon dentro de la canasta delantera, la había llevado algunas veces de esta forma antes, espero que no odie lo suficiente su vida como para lanzarse en medio trayecto.

Pedaleé tan rápido como pude, tenía menos de 10 minutos para llegar a la escuela y no era como si fuera posible que llegue en ese tiempo.

Mi corazón agitado y el leve adormecimiento que tenía el las piernas no me impedían seguir corriendo.

Estacione mi bicicleta lo más rápido que pude, amarre a Goon en uno de los árboles del patio.

— Por favor portate bien, vendré a verte en unas horas — acaricie a Goon y salí volando a mis clases.

Corri por los pasillos y justo cuando iban a cerrar la puerta del salón logré impedirlo poniendo mi mano, que de hecho casi se hace mierda en la puerta, el profesor intentó dejarme sin aquella preciada parte de mi cuerpo.

¡¿Que le ocurre?!

— Está tarde Jung — habló con una expresión neutra. Ni por aludido se dio luego de oírme gritar.