MY FAVORITE BAD BOY | Na Jaemin |

【 41 】

TE ODIO.

Así es Na Jaemin, te odio. Te odio por ser tan perfecto, tan lindo, por tenerme tan estúpida; te odio por amarte.

¿Por qué me tienes que gustar?
No lo entiendo.

¡No, no debes gustarme!
Esto solo terminará en un rechazo y un corazón roto, y créeme, no quiero llorar más.

Realmente lo estoy intentado, cada vez que te veo, lucho conmigo misma y trato de verte como alguien más, trato de dominar mis latidos y mis nervios estomacales, pero cuando sonríes lo mandas todo al carajo y vuelvo a tener ese leve sonrojo cuando tu mirada se fija en mí. Te agradecería enormemente que no juegues de esa forma conmigo, por favor no vuelvas a besar mi mejilla o a cargarme de esa forma frente a los demás, no tomes mi mano y sobre todo, no las entrelaces. No estés en mi cabeza todo el tiempo.

Hace unos días, mientra comíamos y reíamos, tu mirada se escapó de tu café y se centró en una chica, vestido corto, lindas piernas, una figura sinceramente envidiable y un rostro muy hermoso; fingi no haberme dado cuenta y me sentí muy tonta por querer romper en llanto ahí mismo. Y esa es la verdad, yo soy demasiado simple, ¿cierto?, nada bonita y mucho menos llamativa, dudo que alguien como tú se enamore de mí.
Nunca antes alguien ha dado alguna opinión respecto a mi aspecto físico, pero si consideras que aquella chica es linda entonces yo debo ser un mutante.

Es difícil para mí verte, y por más que intento esquivarte, eres tan insistente que termino cediendo a tus caprichos. No se me da bien eso de ser cortante, pero voy a aprender a serlo para evitarte.

¿Debería madurar, cierto?
Este diario me hace recordar la forma en la que nos conocimos y es imposible no soltar una sonrisa al recordarlo.

Na Jaemin, que triste que no seas para mi.

Esta era la quinta nota en la que intentaba desfogar mis sentimientos hacia Jaemin y no había algún tipo de cambio, por el contrario, siento que cada vez que escribo soy un poco más consciente de cuanto me atrae.

Faltan aún algunos días para volver a la escuela y quisiera que ese momento no llegue nunca, el solo pensarlo me aburría y casaba.

Cruce mis brazos sobre el diario y enterre mi cabeza sobre estos.

¿Por qué es tan difícil amar? ¿Por qué el sentimiento a veces no es mutuo?

No debía ponerme a pensar demasiado en eso, terminaría igual que otras veces que he intentado resolver mis dudas existenciales; con un hermoso dolor de cabeza.

Justo cuando empezaba a dormirme el timbre de casa sonó y levanté de golpe mi cabeza.

Jaehyun debía estar durmiendo y papá y mamá no están, ¿serían ellos?, no lo creo, ellos llevan sus llaves siempre.

Con gran pereza me levanté de mi cómoda silla y salí de la habitación. Era cierto que no hacía nada en estos días, pero sin algún motivo me sentía cansada y solo quería estar en un lugar sin la necesidad de moverme.

Estuve a punto de darme media vuelta y volver a mi habitación cuando vi la distancia entre el pie de las escaleras y la puerta principal, tuve que seguir con mi camino cuando el timbre sonó tres veces seguidas.

Tomé la perilla y puse mi cara más desganada antes de recibir a quién sea que estuviera del otro lado.

—¡Hola!