El es mi Alfa...【YoonMin】【Omegaverse】/CORRECCIÓN/

〇-ˏˋCapitulo 1ˎˊ-

 Era un noche fría y oscura gracias que los bombillos de los faroles no respondían; por estas calles caminaba un bajito omega con ganas de ser alfa, el en verdad odiaba su casta ¿por que tenia que ser omega? se cuestionaba todos los días. Rabia agarrado esa peligrosa calle para tomar un atajo hacia su casa, del frió soplo sus manos regordetas y pequeñas mientras se encogía un poco de frió. el omega miraba su al rededor para ver si se acercaba algún problema pero no fue así, pero eso si, camino mas rápido hacia su casa.

Al llegar a su pequeño departamento tiro lo zapatos para un lado a la vez que se quita su pesado saco y camino hacia su sofá y se tiro en el, el joven peli-negro estaba analizando su día, estaba agotado y eso no había duda, solo quería llegar y acostarse a dormir por un siglo o mas...pero no podía hacer eso. Por su mente paso toda la mierda que le había pasado antes; abuso laboral. acoso sexual, maltrato tanto físico como mental, todo eso para un salario mínimo ¿es enserio? esa era unas de las razones que odiaba ser un omega, los alfas eran los de alto rango los de la "realeza" eso le perecía tan ridículo que le daba risa. era explotado cada día y ellos bien cómodos en sus "cunas de oro". no todos eran así, conocía a un alfa llamado Kim SeokJin, el era un alfa muy amable y encantador que todo omega quiere en eso se encontró con su media mandarina; Kim Namjoon un omega algo especial, había perdido la vista por su accidente automovilístico. un golpe duro para el y la familia. eso en realidad si era una gran historia de amor.

Antes de caer rendido le llego un mensaje a su teléfono con pereza lo saco de su bolsillo derecho y lo reviso y tenia un mensaje de Jin preguntándole si ya había llegado a su casa, le respondió que ya había llegado y apago el celular. se levanto del sofá y camino hacia su habitación se arres costo y al rato se había quedado dormido.

Eran las cuatro y media de la mañana cuando tocaban de manera brusca su puerta de entrada, Jimin se despertó medio dormido y se levanto para ver quien era, miro antes por el hueco de la puerta al ver un hombre de gafas negras se asusto, ¿que hace ese hombre en mi puerta?.

Se alejo un poco de la puerta su omega le gritaba PELIGRO y el lo sabia pero no sabia para donde ir corrió de manera sigilosa mientras escuchaba los golpes aumentar de fuerza llego a su habitación y busco en su armario un bate de béisbol.

<Gracias Jin>.

Se tiro a la cama para buscar su teléfono al encontrarlo lo prendió y se escondió en el armario. de un momento a otro ya no se escuchaba mas golpes y eso hizo rebajarlo un poco pero no duro mucho; un golpe seco para escuchar como otro al caer algo al piso.

<Maldita sea me jodieron la puerta>.

Agarro fuertemente el bate y se tapo la boca para disminuir su aliento trato de relajar su corazón y su olor de omega en peligro, otro punto mas para odiar. se escucho unos pasos subir rápido las escalera y caer nuevamente la puerta de su habitación, soltó un pequeño salto por el susto; sus latidos que antes había tratado de calmar estaban peor que antes y su olor ni se diga.

-El omega esta aquí, alfa-escucho Jimin había un olor bastante atractivo como a café y chocolate...una rara combinación unos pasos se acercaron a su escondite y sintió su corazón parar de latir un momento.

-¿Aquí?-se escucho la voz del olor a café, del momento a otro la puerta del armario había sido abierta haciendo Jimin respondiera rápido y le diera un golpe con el bate al alfa, este soltó un gemido de dolor y el como pudo salio corriendo hacia la primera planta. Escucho pasos siguiéndolo pero el apuro los suyos.

Gracias que la puerta estaba tirada en el piso pudo salir fácil de la casa pero no dio en cuenta había mas gente de negro afuera, agarro con mas fuerza el bate y se giro al escuchar la voz del alfa-

-Todavía no entiendo lo que te vio Min, eres un omega cualquiera-Jimin al escuchar eso soltó un sonoro gruñido, se acerco a paso decidido hacia el alfa, este era bastante guapo tenia unos lindos labio de color rosita una nariz algo prolongada pero le quedaba, su ojos eran de color marrón bastante oscuro igual que su pelo.

-Yo por lo menos no soy mensajero de nadie, no soy un cualquiera con tu que va agarrando a cualquiera para tus actos-le respondió con voz tosca y seca, apretó sus dientes para no soltar mas veneno, el alfa solo rió-

-Muchachos-hizo un chasquido con su dedos y Jimin sintió una aguja en su cuello y se sintió algo mareado y cayó desmayado.

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