Omegaverse:
En un mundo de amos y esclavos, Hoseok recibe un lindo regalo de cumpleaños.
-Somos iguales Taehyung.
-No, no lo somos Hoseok, por que al final del día yo soy el que trae este collar y tú eres el que jala de la correa.
Donde Hoseok es e...
"Sólo el amor nos permite transformar la esclavitud en libertad"
🌸❤🌸
Polaris, es la ciudad donde el dinero vale más que las personas, un lugar donde solo hay derechos para unos y no para otros, donde la clase social baja nace para servir a la clase alta. No importa si eres Alfa, Beta u Omega, lo único que importa es con cuanto dinero naces en los bolsillos y cuanto prestigio tiene tu familia.
A temprana edad niños y niñas son extraídos de los distritos, lugares segmentados en donde viven los más pobres, hombres y mujeres que sus amos han dejado vivir aparte para que sigan reproduciendo el sistema de clases. Alejados de sus familias para ser educados para la esclavitud.
Cuando son llevados a los campos, sí, campos de concentración, son obligados a aprender a servir a sus futuros amos, les roban su inocencia y los venden como animales, para servir como esclavos sexuales, trabajadores sin paga, limpieza, cocina, o cualquier otra actividad que pida su amo, todos y cada uno de estos niños y niñas son marcados con un collar negro metálico que les da descargas eléctricas con un control si no obedecen.
A los 18 años están listos para ser entregados al mayor postor, los esclavos solo son un cuerpo vacío para cuando cumplen la mayoría de edad, todo lo que les han enseñado es servir a otros, encerrados en los campos nunca pudieron vivir su juventud, juventud e inocencia que fue brutalmente robada desde que nacieron en la clase baja.
Oops! This image does not follow our content guidelines. To continue publishing, please remove it or upload a different image.
Su cumpleaños número 22 había llegado, por el sonido de la música, seguro sus padres habían preparado una gran fiesta en su honor, lleno de personas ricas desagradables, esclavos por doquier y música demasiado aburrida para su gusto.
Terminó de acomodar su corbata, frente al espejo, pasó la mano por su cabello negro hacia atrás, estaba fastidiado.
Hoseok era un Alfa, hijo de un prestigioso matrimonio dueño de la cadena de Hoteles más grandes de la ciudad, decir que su familia tenía dinero era poco. Estaban nadando en dinero o eso creía, al igual que muchos de los que vendrían a su fiesta.
Dio un largo suspiro cansado, siempre odió todo este lugar, se consideraba así mismo una persona simple, sin mayores ambiciones, demasiado humanista y demasiado blando para el mundo de amos y esclavos.
Y hablando de eso, él se había negado rotundamente a tener un esclavo, cuando cumplió los 18, no estaba de acuerdo con la forma en la que estaba armada la sociedad, no era justo que un sector lo tuviera todo y el otro nada. Pero como su padre decía, todos los ricos deben tener uno o más esclavos, eso mantiene la ciudad en orden, eso mantiene el orden natural de las cosas.
Tomó el pomo de la puerta con desgano, respiró profundo y salió, al bajar las escaleras y llegar al gran salón todos aplaudieron al verlo en su fino traje, el ambiente no parecía el de una fiesta sino más bien el de una reunión de negocios.
