Omegaverse:
En un mundo de amos y esclavos, Hoseok recibe un lindo regalo de cumpleaños.
-Somos iguales Taehyung.
-No, no lo somos Hoseok, por que al final del día yo soy el que trae este collar y tú eres el que jala de la correa.
Donde Hoseok es e...
Incluso si intento olvidarlo, no se puede borrar...
Por favor seca mis ojos... Por favor perdóname por mis pecados.
🌸❤🌸
Este lugar era fascinante, no podía ni siquiera ocultar lo emocionado que estaba de ver todos esos peces, si de por si ya amaba el mar, su amor se hizo infinito por las criaturas marinas, eran tan lindas con sus aletitas y sus colores brillantes.
Hoseok lo guiaba por un gran pasillo de vidrio bajo el agua, era hermoso. Cuando él dijo que lo llevaría a un lugar especial nunca se imaginó que sería al acuario.
-Hyung mira este, leí que los pulpos tienen dos corazones ¿no es eso genial?
El alfa sonrió al juntar sus miradas, le encantada la forma en la que el omega aprendía tan rápido, a veces lo sorprendía con datos muy curiosos sobre los animales u otras cosas, era muy divertido, porque nunca sabía lo que saldría de su boca, sus ojos brillaban con emoción y su corazón se sentía completo al verlo feliz.
-Oh ¿enserio? eso es genial.
-Me gusta mucho este lugar hyung, gracias por traerme.
El alfa sintió como el pulgar del omega acariciaba su mano sin romper el agarre en forma de agradecimiento, lo vio bajar su mirada avergonzado, seguro quería besarlo, el pelinegro sonrió con suficiencia. Se acercó para besar sus labios en un toque corto y suave para después deslizarse hasta su oído.
-Pensé que te gustaría, porque a mí me gusta mucho.
Las mejillas del castaño se colorearon al ser besado en público, no pudo evitar sonreír.
-Me encanta.- Susurró, para luego pestañear rápido y dar un paso atrás avergonzado.- Vamos por allá vi muchos pecesitos pequeños, son tan lindos hyung.- Balbuceó bajito.
Las pupilas del alfa se dilataron, le gustaba cuando Taehyung actuaba todo tierno e inocente y el tono de voz que usaba para decir "Hoseok hyung" era tan suave y dulce, no sabia si lo hacia intencionalmente, pero de una extraña forma lo hacía sentir excitación por cuidarlo. Dejó que lo guiara tras él.
Sintió su celular vibrar en su bolsillo, estaba tan perdido en el cabello del omega al moverse que ni siquiera vio quien era al contestar.
Pero al oír su voz se arrepintió al instante.
-Ver a casa ahora, tenemos reunión de emergencia.- Su padre del otro lado de la línea, tan distante y frío como siempre. Se detuvo y Taehyung lo miró con curiosidad.
-Tus negocios no son mi problema padre.- Dijo serio.
-Lo son cuando eres el único heredero, trae tu trasero aquí ahora.- La llamada finalizo, apretó el teléfono entre sus dedos con molestia, odiaba las reuniones con su padre, siempre cuando estaban perdiendo dinero o un negocio no salía bien lo convocaban.
-Maldición.
-¿Ya tenemos que irnos hyung?- Sus ojos grandes lo atravesaban y casi dice que no, para no tener que decepcionarlo, pero tenía responsabilidades.
-Por desgracia sí.
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