Hay algo en ti ✨ (WARIAM)

10.

Realmente después de eso no había vuelto a saber nada más de Miriam, ni me había hablado, ni yo le había hablado a ella.
Mimi me obligó a salir y a acompañarla a la clase de baile en el gimnasio.

-Han pasado tres dias Anita, deberías hablarle. -dijo Mimi poniéndose las gafas de sol.

-Mimi, ella no me quiere hablar.

-No me extraña...-dijo Mimi susurrando.

-Gracias por tu apoyo.

-Joder Banana, esque si le dijiste todo eso, no la culpo. Que sé que no sabías todo por lo que Miriam ha pasado, pero aunque no lo supieras hay cosas que duelen mucho.

-Mira, no quiero volver a empezar con esto.

-Bueno, pues vas a tener que aceptar que te equivocaste y decírselo a la cara, porque ella no te va a ir buscando.

-Mimi, ya está, si se acaba el verano y no la vuelvo a ver me da igual. -dije mintiéndole, claro que la quería volver a ver, volver a hablar con ella, decirle que le quería besar y que lo hiciera ella, pero yo nunca aceptaba nada, y eso no iba a ser una excepción.

-Ana, mientes muy mal.-dijo Mimi.- Ahora vas a bailar y lo piensas, que bailar te despeja la mente, igual a ti te la abre. -dijo.

-Gilipollas. -dije para darle un pequeño puñetazo en el hombro.

***

Entramos en la sala de baile, entré rezando para que Miriam no estuviera allí. No había tenido suerte, allí estaba otra vez, llevaba un conjunto rojo y una gorra. Me estaba poniendo muy mala viéndola así vestida, para que mentir.

-Mimi, no te vayas muy adelante, por favor. -le dije tirando de su brazo.

Hizo como si no me hubiera escuchando y agarró mi mano colocándose en primera fila, maravilloso, nunca adivinarían quien estaba en la segunda fila prácticamente detrás de Mimi. Si, Miriam.

- Eella bailarina. -dijo Miriam dando un abrazo a Mimi en cuanto la vio.

-Leona. -le saludó Mimi en el abrazo con una sonrisa.- ¿Cómo puede ser que viviendo en un pueblo no te haya visto desde hace tanto?

-Miriam, eres una exagerada. -dijo la leona cruzándose de brazos.- Esque...estos días estuve un poco mala y no tenía muchas ganas de salir. -dijo para mirarme, eso hizo que Mimi se girara.

Hubo un silencio incómodo y Mimi me miraba cada vez con los ojos más abiertos, esperando que dijera algo.

-Hola Miriam. -dije mirándola, con una media sonrisa.

-Hola. -dijo Miriam sería y haciendo un movimiento de cabeza.

Mira, no podía más, le iba a decir un par de cosas, ¿cómo podía ser tan borde? Sin embargo no pude hacer nada porque la clase empezó.
Ya que no podía decirle nada, iba a hacer que ella me quisiera decir algo al acabar la clase, o que al menos me mirara mucho durante ella. Tenía que aprovechar eso de estar delante suyo de espaldas.

"Por favor, algo sensual, por favor", pensé para mí esperando bailar algo con lo que pudiera hacer que Miriam me mirara.

Por una vez la suerte se puso de mi parte. Me pasé toda la clase moviéndome de la forma más sensual que pude, y funcionó, pillé a Miriam varias veces mirándome por el espejo, algunas veces se mordía el labio, otras solo me miraba el culo intentando seguir la coreografía. No pensé que le fuera a afectar tanto, pero me encantó que lo hiciera.

Cuando acabó la clase, se fue rápido, sin despedirse de Mimi, ni de mi, aunque eso era algo cosa sabía que ni siquiera pensaba hacer.

-Mimi, ahora vuelvo. -le dije sonriendo.