60

1.7K 177 5
                                    

—¿_________?

—Perdona, es que... Mira. —_________ agarra su mochila y saca el control, con cuidado de que Andy no vea La tempestad—. Se supone que tengo que darle esto a Josh. —Le pasa el papel a Andy—. Tiene que firmarlo. Pero no puedo dárselo. Voy a tener que falsificar su firma o algo así. —Juega con la tarta de fresa y aparta el plato.

—Esto debe de ser nuevo para ti —dice Andy al darse cuenta de la «F» escrita en rojo.

—No me tomes el pelo.

—Se va a notar que es letra de chica a menos que la calques. —Andy mira el papel al trasluz—. Y este papel es demasiado grueso. —Le devuelve el control—. Ya sé lo que me dijiste en el parque, pero creo que puedes estar equivocándote con todo esto.

Quiero decir, ¿estás segura de que no puedes ir y, simplemente, decírselo? Bueno, has sacado muy mala nota, pero sabrá cómo llevar la situación. Firmar un control no es algo tan grave, ¿no?

—Es por lo que significa firmar, lo que representa. Pero si apenas pudo con la entrevista con el tutor. ¿Cómo voy a... ? Es que... Es... Es demasiado. Y tampoco es por la nota, es mas bien por... —_________ niega con la cabeza sin saber qué más decir. Nadie lo entiende, nadie lo pilla—. Seguro que tú crees que es todo un detalle, ¿no? —dice _________, un segundo después, con un tono de urgencia en su voz.

—¿Un detalle? —exclama Andy, desconcertado.

—Que haga ese tipo de cosas por mí, ya sabes, como firmar un control, hacerme de padre.

—¿Un detalle? —repite, sin poder creérselo—. ¿Me tomas el pelo? A mí me parece que debe ser durísimo, pero sigo pensando que tú...

—Te he comprado una cosa —le suelta _________.

—Que has comprado... ¿Qué?

_________ cierra los ojos un segundo. Le sorprende que vaya a dárselo después de todo, pero ya no hay vuelta atrás. Ahora tiene que hacerlo.

—En la librería. —Busca en su mochila y le tiende el paquete a través de la mesa.

Andy saca el libro de la bolsa lentamente. _________ se espera que ponga cara de decepción, de no entender por qué le regala un libro tan viejo y hecho polvo.

—Me encantan los libros usados con anotaciones en los márgenes, es lo mejor —dice Andy mientras pasa las páginas—. Siempre imagino quién lo debió leer antes de que lo hiciera yo. —Hace una pausa para leer uno de los discursos de Próspero—. Tengo un montón de deberes como para leérmelo ahora pero, ¿sabes qué? Que les den, quiero saber por qué es tu Shakespeare favorito. Gracias, es genial. O sea, no tenías por qué hacerlo.

—Pero lo he hecho —dice _________, tan bajo que duda mucho que la haya oído.

—Oye, no has escrito nada —dice Andy con el ceño fruncido.

—Oh, ni siquiera había pensado... Yo, bueno... Ni siquiera sabría qué poner —dice _________ con timidez.

—Bueno, a lo mejor se te ocurre algo después.

_________ mira cómo Andy lee el principio. No cabe duda, su sonrisa es auténtica y _________ no puede evitar pensar que, si no puede hacer algo así por Josh, al menos sí que lo puede hacer por alguien.

La chica de la sonrisa rota. [Andy Biersack y Tú]Where stories live. Discover now