UN SUEÑO HECHO REALIDAD (GEMELIERS)

Capitulo 43: Presentimiento ¿Bueno o malo?

Era... o mejor dicho, eran... ¡LOS GEMELOS! Wow, era la hora de actuar, allá vamos.

- Hola.

- Wow, pareces sorprendida, ya te dije que tenía un hermano gemelo, Dani - dijo Dani.

- Intentar confundir a alguien que ha perdido la "memoria" está muy mal eh. Oh, ahora se supone que debo de caer en el engaño ¿no? -  pensé.

- ¿Y tú eres Jesús y tú Dani? - dije señalando, equivocándome, a posta, obviamente.

- No, yo soy Jesús y él es Dani - dijo Jesús.

- Pero si acaba de decir que...

- Ya, pero es tonto, nació así - dijo y le dio una colleja - ¡Auuuu!

- ¡Tonto tú! - rió Dani.

- Bueno, decirme ¿Qué queríais?

- Ya sé que no te acuerdas de nada, ni de nosotros y tienes que hacer una peli pero queríamos que...

- Ves al grano, Jesús - se quejó Dani.

- Pues que esta semana está llena de firmas y iríamos el Lunes a Barcelona y bueno que si te quieres venir - se tocó el pelo (que mono).

- Vale - dije sin más - Pero sólo hasta la de Barcelona, luego me vendré en tren.

- ¡¿Pero cómo vas a venir sola?!

- En tren - reí - Además, no pasará nada.

- Pues te acompaño - propuso Dani.

- Claro y te pierdes una firma ¿no?

- Eso es verdad... Pues te vienes a todas.

- ¿Una semana?

- Sí.

- Vale ¿Cuando nos vamos?

- Pues mañana por la mañana.

- Vale pues me pasáis a buscar y no os perdáis eh - reímos.

- Pondremos el GPS, tranquila - bromeó Jesús - Bueno, nosotros nos vamos.

- Vale, haré la maleta, adiós.

- Adiós - dijeron al unisón.

Cerré la puerta y fui a mi habitación a preparar las maletas cuando de pronto picaron a la puerta de la terraza de mi habitación, era Dani. Abrí, entró y me dio un beso en la mejilla.

- Se me olvidó despedirme correctamente - no pude evitar sonreír. 

Le iba a decir algo pero vi a Jesús en la terraza, viendo la escena muy sorprendido.

-  En tu familia colarse por el balcón está de moda ¿no? - dije acordándome la noche en que Red apareció en mi vida (el loro). 

- ¿Eh? - preguntó extraño.

Lo ignoré y fui a abrirle a Jesús.

- Hola - dije extrañada.

- ¿Qué haces aquí? - preguntó Jesús a Dani.

- ¿Y tú?

- A despedirme correctamente de Tere - dijo serio y yo me caí al suelo de la risa.

Oí como Dani se lo explicaba a Jesús, pero a él le sentó mal y se fue por la puerta. Se me paró la risa de golpe.

- Déjalo, es muy tonto - dijo Dani.

- Pues a mí me gusta así y no es tonto - solté sin querer y me quedé mirándolo.