Capitulo 11

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DANIEL

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—¿Tu qué crees?.—me acerco a Diego mientras este observa con detenimiento a la mujer tras el vidrio polarizado.

—No lo sé, ya revise los datos de laboratorio y realmente lo que dicen los doctores es cierto, su patrón de ADN no concuerda.—Diego se aleja de mi y se acerca a unos expedientes sobre el escritorio.—Ves  esto, el cromosoma del ADN de esta mujer  tiene casi 50 pares.—lo mire alzando una ceja, no tenía idea de lo que significaba.

—¿Y?...

—Y eso está muy mal Daniel.—me mira abriendo los ojos .—El ser humano normal tiene tan solo 23 pares de cromosomas.—informa, en estos momentos me alegra tener un amigo que estudio medicina humana.—No entiendo nada de esto, nunca vi algo así.

La puerta se abren he ingresan Lucas y Kevin viendo algunos papeles.

—¿Tienen algo?.—Kevin levanta la cabeza y niega.

—No hay nada, ni cuentas bancarias, cuentas virtuales, identidad, pasaporte, perfil, Facebook, twiter, nada.—Lucas  lanza los pales sobre la mesa.

—No puede ser, debe haber algo, lo que sea.—Kevin cruza los brazos y mira el cristal.—Hablaré con ella.

—No.—le cierro el paso antes que de uno más a la habitación de la mujer. —No sin una autorización de mi madre o del mayor.

—No están aquí.—se encoje de hombros.

—Exacto, meteremos en problemas a mi madre y nos sacaran del caso si no hacemos lo que ellos quieres.—le sonrió de lado.—Al menos por ahora. Solo tenemos que tener paciencia.

—Bien pero esto me está cansando, si no tengo respuesta rápido...

—Créeme que las obtendremos, somos especialistas en sacar cosas por las malas y créeme  que lo haremos  si esa mujer no dice nada.

—Oh carajo.—Lucas retrocede mirando el vidrio, frunció el ceño y miramos también su dirección , allí estaba ella mirándonos muy atentamente como si realmente pudiese vernos aunque sé que es imposible.

—No puede vernos.—le recordé mirando a la mujer, su cabello rubio caía sobre sus hombros todo desalineados, su ropa estaba cubierta de suciedad y rasguños, aunque debía admitir que era muy hermosa, con unos ojos verdes agua muy claros y una piel bronceada que parecía suave y apetecible.

No tanto como el de Camil

Sacudí mi cabeza con esa idea, ella ya debía estar muy lejos de aquí, fuera de mi vida para siempre.

—Pareciera que si nos puede ver.— Kevin se acerco al vidrio y la miro , la chica subió la mirada de inmediato a sus ojos provocando que el retrocediera de la impresión. El levantó una mano y la comenzó a mover de un lugar a otro para ver si lo podía seguir.

—¿Encontraron algo?. —todos dirigimos la mirada hacia los ingresantes, mi madre junto  con dos médicos.

—Ella...—digo y la miro pero la mujer nuevamente estaba en la camilla como si nunca se hubiera levantado.—Ella, no ha dicho nada.—esto realmente me está asustando—Teníamos pensado entrar y hablar con ella, cara a  cara para ver si desea algo.

—El mayor mandara a un medico psiquiátrico en la mañana puede que este atravesando por un estado de traumatismo y este en shok.—mi madre saca el celular teclea algo y lo guarda enseguida soltando un suspiro que reconocía.

—¿Sucede algo?.—me acerco a ella, la conozco a la perfección y se cuando algo está mal.

—Tu hermana no me contesta el celular.

Eres mio, Humano©Where stories live. Discover now