Los Hermanos Queen

30. Un dia, varios asesinatos

Una vez listas Faviola y yo salimos de su habitación y bajamos las escaleras hasta llegar a las puertas del castillo donde nos esperaba Jared que me miro con deseo pero sin perder ese brillo de amor, Jared sabía que Faviola iba a ir por que ella se lo dijo.

Jared- ¿están listas?- Faviola iba a contestar pero yo me adelanté.

Aisha- si no estuviéramos listas no hubiésemos bajado-

Jared- cierto, que pregunta tan estupida, v... voy a buscar la camioneta- camina hasta salir del castillo.

Faviola- ¿por que eres tan grosera con él?, digo se que jamás quisiste encontrar a tu compañero eterno pero muchas chicas morirían por tener a su compañero a su lado y tú qué lo tienes, no aceptas lo que sientes por él-

Aisha- aún que no lo parezca, lo estoy protegiendo, él no se merece a alguien como yo una asesina experta que tiene enemigos hasta en el mundo humano, lo estoy protegiendo de mi y de mis enemigos-

Faviola- deberías darle una oportunidad, él se sabe defender a demás los licántropos no se atreverían a ir en su contra-

Aisha- lo intentaré- sonrió notablemente feliz en ese momento llegó Jared en la camioneta, se bajo me abrió la puerta de copiloto yo sonreí y me subí, juro que escuché a su lobo aullar de felicidad.

Marina- Ares y Jared están muy felices-

Aisha- Marina creo que necesitaré de tu ayuda-

Marina- tu solo déjate querer y asesina a cualquier estupida que se le acerque o le coquetee-

Aisha- ok eso haré- cerré la conexión.

Faviola iba en la parte de atrás, Jared ya iba en el asiento de chofer enciende la camioneta y arrancamos.

Faviola- el camino es muy largo así que yo me voy a dormir- por el espejo retrovisor veo cómo se acuesta en los asientos de atrás.

Jared- ¿tú no quieres dormir?- negué.

Aisha- no tengo sueño y tampoco estoy cansada- él asintió con la vista fija en la carretera.

Nos quedamos en silencio y es uno de esos silencios incómodos, además sentía que él quería hablarme pero no sabía que decir hasta que se decidió y habló.

Jared- ¿y que es lo que te g...gusta hacer?-pregunto nervioso.

Aisha- ya sabes que es lo que me gusta hacer- dije tranquilamente.

Jared- si pero... ¿además de asesinar qué más te gusta hacer?-

Aisha- me gusta entrenar, nunca me ha gustado estar sin hacer alguna actividad física- seguí contestando todas sus preguntas y cuando estaciono la camioneta en el aparcamiento del centro comercial despertó a Faviola estaba un poco despeinada.

Faviola- jodete Jared, déjame dormir-

Aisha- entonces ¿no quieres ir de compras?-

Faviola- prefiero dormir- asentí y solo Jared y yo bajamos de la camioneta, Jared le puso los seguros a la camioneta y caminamos hacia el centro comercial.

Había muchos seres sobrenaturales y ni un solo humano eso me agrada, entramos a varias tiendas donde yo lo arrastraba, después de varias horas, me cansé así que nos quedamos sentados en una banca viendo a los demás.

- oh diosa ¡Jared bebé eres tú!- gritó una chica alta de cabello castaño, ojos azules, buen cuerpo aún que no tan bueno como el mío, la verdad era linda.

Jared- Paris- se levantó y la iba a saludar pero yo lo jale y lo volví a sentar y esa tal Paris se quedó en su lugar.

Marina- acabemos con esta zorra- asentí, sentí mis ojos volverse rojos, mis garras salir y mis colmillos crecer.