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¿Debía contarle? Esa opción rondaba por sus pensamientos. Adelaide merecía saber que pasó después de que falleciera.
-¿Qué haces? -preguntó una voz a pocos centímetros detrás de él haciendo que se sobresaltara.
Su madre rió al ver la reacción de su hijo.
-¿Por qué me asustas así? -se quejó lanzando un suspiro, luego negó con la cabeza-. Como sea.
-¿Terminaste tu tarea? Ya es tarde, debes ir a dormir -le regañó con voz suave.
-Si... digo, no. Aún no termino -se corrigió.
-¿Es demasiada?
-Algo así -dijo pensativo.
Se sintió culpable por no contarle la verdad a su madre, normalmente siempre había confianza entre ambos y ocultarle lo que le sucedía últimamente le hacía sentir mal, especialmente en este momento que necesitaba un consejo de ella tratándose de Adelaide.
Su madre lo creerá un loco si le llega a contar sobre ella, ¿cómo preguntarle indirectamente sobre un fantasma?
-Termina pronto, no quiero que duermas tan tarde -dijo antes de despedirse y cerrar la puerta.
-Oye mamá... -le llamó antes de cerrarla completamente.
Se debatió internamente si soltar la pregunta o no mientras su madre esperaba que el ruloso hablara.
-¿Crees que un fantasma deba saber cómo murió?
Su madre le miró incrédula por unos segundos.
-Es para mi tarea -se adelantó a explicar- debó hacer una redacción de una historia para mi clase de Literatura y trata sobre fantasmas y cosas así.
Mary suspiró pensándolo unos segundos.
-Si murió asesinado o algo así, creo que no debe saberlo, podría buscar venganza y un espiritú negativo no es algo bueno.
Finn procesó las palabras en su mente.
-Espero que eso responda tu pregunta, descansa cariño.
Finn asintió y permaneció en la misma posición.
Adelaide murió en un accidente de auto, no asesinada, pero tal vez se molestaría con la persona que conducía el auto, persona que provocó aquél accidente. ¿Qué debía hacer entonces?
***
-¿Cómo se llama? -pregunto Finn viendo al felino acercarse a la castaña.
Se encontraban en la pequeña parte del techo desde la que podían apreciar la maravillosa vista de la ciudad.
-Blackie, por que es negro además de que siempre que aparecía por aquí, Cassie solía llamarle así a pesar de no ser nuestro gato -explicó Adelaide.
El felino se acercó a Finn y él le hizo un pequeño cariño en la cabeza.
-Cuando desperté en esta casa él fue la única compañía que encontré -contó con una pequeña sonrisa nostálgica en el rostro mientras acariciaba el gato.
-¿Por qué crees que tu familia se haya ido? -preguntó Finn.
-Tal vez les dolió que ya no estaría en esta casa, al menos me gusta pensar que querían empezar de cero sin mí ahora que ya no estoy -miró hacia la ciudad.
-¿No te da curiosidad saber que es de ellos ahora? -dejó escapar la pregunta.
Adelaide miró a Finn con el ceño fruncido. Su expresión confundió al ruloso puesto que le miraba como si la hubiera ofendido.
-Por supuesto que sí, sin embargo aquí estoy sin poder hacer nada y todo por que no puedo alejarme unos metros de esta casa por que me siento perdida, ¿entiendes? -explicó soltando un suspiro al final intentando tranquilizarse-. Lo siento, es que esto de estar atrapada y sin salida me tiene algo fastidiada.
-Pero no estás atrapada -frunció el ceño Finn murmurando para sí mismo.
-¿Qué? -preguntó Adelaide sin entender.
-Tengo una duda existencial -dijo Finn cambiando del tema-, sí eres un fantasma, ¿puedes ver a otros fantasmas?
Adelaide le miró confundida. ¿A qué venía esa pregunta?
-Sé que no tiene mucho que ver pero me ayudará a responder muchas de mis teorías.
-¿Teorías? ¿Acerca de qué? -preguntó curiosa.
-Te lo explicaré luego...
-Bueno. En realidad nunca he visto algún otro fantasma que no sea yo, lo cual sería raro ¿no? -respondió.
Finn sonrió, aquella respuesta lo ayudó a conectar sus ideas. Tenía que contarle.
-Antes de contarte, debes saber que creo que tú no estas muerta -hizo una pausa. Adelaide le miró confundida-. Creo que tú no eres un fantasma.
Wowow me desaparecí demasiado, de verdad lo siento pero el trabajo me quitó mucho tiempo, intento actualizar lo más que puedo pero estoy saturada de ideas y asuntos personales que atender.
