Mi secreto (KnB)

Perfecto

Pov. Normal

El más alto de la generación milagrosa estaba con su móvil pasando el tiempo como de costumbre mientras comía de una bolsa de papas. Pero si tranquilidad se fue al recibir una llamada entrante, él contestó.

-Diga~. -dijo con la boca un poco llena y tragando lo que ya había masticado.

-Hola Atsu-kun. -dijo una suave voz del otro lado.

-Lin-san? -preguntó el un poco extrañado, era la madre de Himuro- ¿pasa algo?

-Ah, no. Solo te llamaba porque Tatsu-chan quedó solo en casa, te aviso por si querías ir a acompañarlo un rato. Ha estado un poco raro estos días y yo no vuelvo a casa hasta el lunes. -ese día era viernes- Solo eso.

-Ah, okey~ -dijo con su tono normal.

-Jaja.. bien, adiós Atsu-kun.

-Adiós Lin~ -san~ -ambos colgaron.

A decir verdad él también noto como su amigo estuvo raro desde la última vez que lo vio, no hablaban tan fluidamente en sus llamadas y poco se veían, había pasado una semana de aquello.

El grandote se levantó y fue abajo, su padre estaba leyendo el periódico en un sillón y su madre en la cocina, se acercó a ella.

-Ma~ -la llamó, la mujer de ondulados cabellos lilas y ojos grises se dio vuelta ante el llamado de su hijo.

-¿Pasa algo Atsu-chan? -preguntó de forma maternal como si tuviera a un niño pequeño enfrente de ella.

-Quería preguntarte si hoy puedo ir a dormir a la casa de Muro-chin. -preguntó él.

-¿Él ya hablo con su madre? -preguntó, pues sabía que el padre del pelinegro viajaba mucho y seguramente estuviera en América es este momento.

-Si, ella me dijo que está de viaje y que podría ir. -respondió- Vuelve el lunes así que me podría quedar por todo el fin de semana total el lunes es feriado.

-Mmm... Esta bien. -dijo con una dulce sonrisa- Anda a preparar tus cosas.

-Hai~ (Si~) -volvió a su habitación.

Podría ir ahora pero mejor le daría una sorpresa a su amigo e iría a las 10 de la noche, de paso se quedaría a comer.

-La comida de Muro-chin es la mejor... -pensó el mientras baba se le formaba en la boca de solo imaginarlo.

Lo único malo es que faltaban varías horas para las 10 así que armaría su bolso con sus cosas y comería en "entre tiempos de descanso".

Se la paso vagueando (haciendo nada productivo) hasta que fue la hora. Desde su habitación podía oler la bella y exquisita comida de su madre pero no le ganaría la tentación, ya se le estaba haciendo tarde y él estaba seguro de que Himuro le haría un festín este fin de semana.

Bajó, se despidió de su madre y entro al auto en donde su padre lo llevaría a la casa de su amigo. Todo iba como quería pero algo lo molestaba... Era como un mal presentimiento, una incomodidad que decidió ignorar.

Al llegar se despidió de su padre y, después de que le dijera que se cuidara, bajó sus cosas, solo eran dos bolsos y una pequeña mochila (uno de los bolsos tenía en su totalidad comida chatarra). Entro al edificio en donde vivía himuro y subió al piso que correspondía. Tocó la puerta pero no fue atendido, tocó el timbre pero también, volvió a tocar pero nada.