Deja de llorar, Shawn.

6.1K 276 80
                                    

(Tercera y última parte)

Narra t/n.

Cameron había terminado demasiado borracho. Así que, con la ayuda de Lucas logramos que dejará la fiesta a un lado y fuera a dormir.

Lo arrope, acomode un balde a su lado (por si necesitaba vomitar) y deje un beso en su frente.

Luego de unos minutos me reuní con mi ayudante en el pasillo. Hablamos de temas randoms hasta que unos pasos pesados nos llaman la atención.

-Esto no puede ser verdad.

Antes de que unos ojos mieles bañados en sangre me encuentren, intento esconder mi cuerpo detrás de Lucas. Pero al parecer no fui muy rápida.

-¡Hola, mi bebé! -exclama Shawn a la vez que levanta sus brazos.

-Oh, no.

Doy un paso hacia atrás, pero él llega a inmovilizarme con sus brazos. Lucas se pone a un lado de nosotros y me pregunta con la mirada: "¿Te lo quito yo o tu puedes hacerlo?"

Me remuevo entre los brazos de Shawn, pero este sólo me aprieta aún más. Lucas pone una mano sobre su espalda y le da unas palmaditas.

-Creo que debes ir a dormir, campeón.

-Sí, debería ir a la cama -musita.

-Vamos, te acompañó hasta tu habitación -ofrece Lucas.

-No -se remueve para que lo deje libre-. Quiero que me acompañe t/n.

Me mira seriamente esperando mi respuesta. Junto todas mis fuerzas para no poner los ojos en blanco.

-Está bien, vamos Mendes.

Con una sonrisa victoriosa Shawn me guía por los pasillos de la casa. Llegó un momento que enredo sus brazos en mi cuerpo con la excusa de que sentía que iba a desmayarse. Creí que eso podría ser lo peor, pero me equivoque. Ahora se encontraba secando sus lágrimas porque había "asesinado" a alguien.

-Oh, Shawn, deja de llorar, por favor.

-No puedo parar.

-Si continúas llorando me harás llorar a mí también... ¡Y no pienso llorar porque mataste a un grillo por accidente!

-Que insensible eres, ese grillo podía ser una madre. Y se la he arrebatado a los pequeños grillos bebés.

-Maldita sea la persona que te dejo beber.

Nunca en su vida se había pasado de copas, esto es tan nuevo para él como para mí.

-Acuéstate, iré al baño a buscar algunas cosas.

-Está bien, bebe.

Pongo los ojos en blanco y suspiro, pero no lo corrijo. Está borracho, no sabe lo que dice.

Reviso el baño hasta que encuentro algunas aspirinas y un balde. Escucho murmuros en la habitación, me resulta bastante raro porque no creo que el borracho hable solo a menos de que se esté quejando. Me acerco un poco y espió. Shawn está dándome la espalda y habla con alguien más. Supongo que es un amigo cercano, pero lo que más me sorprende es que se ve bastante sobrio.

-Me dijeron que estabas muriendo de un coma alcohólico.

-No estoy borracho, solo finjo para que t/n me preste atención.

-Qué triste es tu vida, hermano.

Salgo de mi escondite, revelando mi cuerpo y enojo. El chico, cuyo nombre no tengo ni idea cual es, abre sus ojos al verme.

-Yo me voy, hermano. Suerte.

Estoy segura que Shawn está confundido por la forma en que se ha escapado. A pesar de ello, no se tarda en sumar uno más uno y maldice por lo bajo para luego encararme.

-¿A qué estás jugando, Shawn?

-Puedo explicarlo -me cruzó de brazos esperando impaciente su nueva mentira-. Quería borrar lo que paso en el club, no me gustaría que te quedaras con una mala idea sobre mí.

-Oh, porque lo última vez que te vi es un hermoso recuerdo.

-Aquella vez te mentí -abre sus ojos y se lleva la mano a la boca. Dando a entender que ha revelado algo que no debía.

-¿Qué?

-Nada.

-Dime, ahora.

Con un suspiro de derrota me confiesa la verdad.

-Aquella vez, en el hotel, te mentí.

Sacudo la cabeza sin entender.

-Me miraste a los ojos y dijiste que ya no me querías.

Asiente y baja la vista avergonzado.

-¡¿Me mentiste?! -exploto-. Me pasé noches llorando por tus palabras, cuando no eran de verdad. ¿Porque nos hiciste esto, Shawn? -me altero cuando no responde-. Te odio, no te das una idea de cuánto.

-No te merezco.

Abro los ojos exageradamente, y Shawn tiembla un poco bajo mi mirada.

-¿Me puedes decir cuántos años hemos salido?

-Siete.

-Exacto, siete putos años a tu lado, para que luego vengas y digas que ya no me quieres. Creí que te habías cansado de mí.

-Lo siento.

-Entonces, ¿me pase noches llorando por ti y lo único que consigo es un lo siento?

Toma asiento en la cama y se entretiene jugando con sus dedos.

-Éramos una pareja, Shawn. Tenías que compartir lo que te preocupaba conmigo y aún más si yo tenía que ver.

-No ibas a dejar que nos hiciera esto.

-Por supuesto que no, porque no tiene sentido. ¿Crees que seguiría a tu lado si pienso que me merezco alguien mejor que tú? ¿Crees que mis padres me hubieran dejado ir a recorrer el mundo contigo si no pensaban que tú eras el indicado?

-¿Tu papá creía que iba a casarme contigo?

-¡Comenzamos a salir cuando teníamos trece años! -le grito en la cara-. Mi papá hasta había comprado conjuntos de bebe para nuestros hijos.

Bueno, creo que debí mantener eso en secreto.

-No es justo que tuvieras que cancelar o poner en pausa tus planes para pasar el tiempo conmigo.

-Mi plan de vida era estar contigo, lo demás eran segundas opciones.

-¿Ahora cuál es tu plan de vida?

-Bueno, espero que sea volver contigo. ¿Cuál es el tuyo?

-No sé.

-Si lo sabes -lo acuso rápidamente.

-Sí, lo sé. Pero tengo miedo de arruinarlo otra vez.

-¿Qué es lo que quieres?

-No pido mucho, solamente te quiero a ti.

Se me escapa una tierna sonrisa. Sin dejar pasar otro segundo me lanzo sobre él, ambos caemos sobre el colchón riendo. Me encargo de besar todos los rincones de su cara, Shawn termina de juntar nuestros labios a la vez que murmura varias promesas de amor.

..........

SEGUIMOS CON EL MARATÓN.

Imaginas - Shawn MendesDonde viven las historias. Descúbrelo ahora