Broken Girl. | Tom Holland.

Epílogo

Bueno, Olive, jamás llegarás a leer esto porque ya no estás aquí para hacerlo, pero mucha gente me ha dicho que para calmar el dolor sirve escribir, así que supongo que es lo que voy a hacer. 

Nunca quise llegar a esta situación, ni contigo, ni con nadie. No sabía lo que estaba a punto de pasar contigo, con nosotros, y creo que esa fue mi culpa, porque no sabía todo lo que aún vivías solo porque estaba centrado en que la relación estuviera bien, olvidándome que eras tú la primera que tendrías que haberlo estado.

Me importabas muchísimo, Olive, y lo sigues haciendo. Me importaste desde el primer  momento que te vi parada en el salón muerta de vergüenza, y como hablabas, sin mirar a nadie a los ojos y con una voz apenas audible. Cuando te acompañé a casa noté algo raro en ti, supongo que por todo lo que sufrías y lo poco que confiabas en las personas. 

Me enamoré perdidamente de ti, Olive, me enamoré de tu forma de no llamar la atención, de tus ojos azules sin ningún brillo, pero que con el paso de los meses adquirieron el más bonito que yo haya visto, me enamoré de tu pelo negro ondulado y de todas esas marcas de guerras que tenías en tu cuerpo. Me enamoré absolutamente de ti entera, y eso nadie podrá lograrlo. Porque lo que tú lograste en apenas un mes, nadie más podrá hacerlo.

Igual fui un imbécil al hacerlo, pero sentía algo en ti que no sentí nunca en nadie antes, y necesitaba saber de ti, necesitaba estar contigo cada día de mi vida, necesitaba arreglar todas las partes rotas que tenías.

Pase lo que pase, y conozca a quien conozca, siempre será a ti a la que lleve en mi cabeza y en mi corazón, porque has sido tú la que me has completado al cien por cien, aunque con tu ida me hayas dejado vacío por dentro. Eres una de esas personas que son muy difíciles de encontrar, por no decir imposible, y en estos pocos meses que hemos pasado juntos, has sido mucho para mi. 

Llevabas siete años metida en depresión y todo lo que eso conllevaba, solo porque un par de personas no veía lo maravillosa que eras, y empezaron a tratarte mal metiéndote en esa enfermedad. Veía que estabas saliendo poco a poco, y cuando miraba tus brazos y ya solo veía marcas, no sabías lo feliz que me ponía, pero sabía que a ti no te hacía falta nadie para salir, sólo tú misma. Tú eras la que tenía que dar el paso, tú eras la que tenía que dar el cambio, porque solo tú eras la única que tenía la capacidad de darlo, y estoy seguro que lo habrías dado en un tiempo más. Y, ¿sabes? Me hubiera encantado verlo. Me hubiera encantado verte feliz, pero feliz  de verdad, no lo que intentabas demostrar, no la máscara que te ponías día a día con todos. 

Aún sigo esperando que todo esto sea una pesadilla de la cual despierte ya mismo, o una broma y que aparezcas en el Set sonriéndome de la forma que tú sabías que me volvía loco. Porque sí, Olive Endler, me volvías loco con cada palabra que decías, o con cada actitud que tenías, y me encantaba tener ese sentimiento contigo. 

Y sí, ahora soy el nuevo Peter Parker de Marvel, también me hubiera encantado que lo vieras. Todo pasó tan rápido que aún no me lo creo, Tessa se asustó de mi grito y Harry me dijo que podrían haber hackeado la página. Pero, ¿sabes? Ya no tengo la misma ilusión de hacer de Spider-Man si no estás tú aquí para reírte de mi y llamarme ''friki'' para después darme un beso rápido y abrazarme. 

Olive, Sunshine, de verdad que te quiero lo más grande, que nunca me olvidaré de tus apodos hacia mi, como ''Marvel Boy'' y lo mucho que me gustaba que me lo dijeras, tampoco me olvidaré de lo poquito que hemos vivido, pero que ha sido lo mejor de mi vida, por el simple hecho de que he estado contigo. 

Eras muy fuerte, ¿sabes? Pero a la vez de cristal, y lo que tú has aguantado y vivido estoy seguro de que nadie más podría haberlo hecho. Estoy orgulloso de ti y de como empezaste a afrontar tus problemas, hasta que todo se destruyó de nuevo. 

Quería que fueras feliz, que lucharas por tus sueños, que vieras el mundo, quería que hicieras todo eso conmigo, como lo teníamos planeado. 

Esto se me está atragantando, no puedo para de llorar al recordar lo poco que hemos vivido juntos, pero lo bien que hemos estado.

Hay luces que nunca se apagan, Olive, y tú eres una de ellas. 

Gracias por estos meses juntos, espero que donde estés ya no sufras y que sí seas la chica feliz a la que ansiaba ver. 

Te quiero, Sunshine, te quiero muchísimo. 

-Tom. 

- Hey, chico, ¿estás listo? Ya ha terminado el descanso -Dice Robert Downey Jr. desde la puerta y yo alzo mi cabeza para mirarle. 

Quito las lágrimas que salen de mis ojos con el dorso de la mano y asiento.- Sí, vamos -Me levanto de la silla y dejo la carta en uno de los bolsillos de mi chaqueta colgada en el perchero. 

- Ella está bien donde quiera que esté, lo sabes, ¿verdad? -Dice apretando mi hombro. 

- Quería que estuviera bien conmigo -Sollozo y me tapo la cara con las manos.

Robert no tarda en estrecharme entre sus brazos.- Ella aguantó mucho, Tom, y estoy seguro que lo hizo por ti. Pero cuando ya no podía sostener más peso sobre sus hombros, decidió irse. Así es la vida de caprichosa, te pone en un lugar en el que estás de puta madre, hasta que dices ''hasta aquí'' y es cuando decides irte. Y eso hizo Olive, no pudo aguantar más y decidió marcharse. 

- Lo sé, y espero que ahora esté bien y tenga la vida que se merecía -me separo y miro al hombre con el que he cogido tanta confianza en tan poco tiempo.

- Estoy seguro de que así es -me sonríe y salimos para seguir grabando. 

***

Pues se acabó. 

Hasta aquí Broken Girl.

Me he tardado muchísimo en hacer el epílogo pero porque no me estaba resultando para nada fácil. 

Muchísimas gracias a todas las personas que han apoyado la historia desde el comienzo, a las que han votado y comentado, y hasta a lxs lectorxs fantasmas. 

Ahora estoy haciendo otra historia se llama Underoos, es de Peter Parker. 

Si queréis podéis pasaros y leerla. Nunca antes he hecho una historia de superhéroes, así que dadle una oportunidad, ¡por favor! 

Muchas gracias a todos, y gracias por leer.