One Last Time -Jongdae/Chen-

Capítulo 15

Airi

Ver aquella lápida fue como revivir todo el dolor que me hundió tanto y que se supone, ya había superado. Fue recordar el vacío, la soledad, la desesperación y frustración que había sentido. Pero, él estuvo ahí, el soporte que tanto necesité, lo sentí tan solo en aquel momento cuando me abrazó y no pude evitar devolverle el abrazo.

Se sentía tan bien estar con él. Siempre adoré aquel intenso calor que su cuerpo emitía. Él era una de esas personas que siempre estaba calientito, recuerdo que no pasé ni una sola noche fría a su lado. Y su olor. Su fragancia era la misma, el mismo olor a hombre por el que había estado completamente enamorada por tanto tiempo.

Pero las cosas eran diferentes, yo ya no sentía nada por ese hombre y Luhan no tardó en recordármelo cuando vio que Jongdae me dejaba en mi departamento después de visitar a nuestro hijo.

Cuando entré a mi departamento, me encontré con Luhan parado al lado de la puerta esperándome. Al parecer había pasado por la ventana justo cuando me bajaba del auto de Jongdae y, en pocas palabras, se puso como un venado celoso.

-¿Por qué tuviste que ir justamente con él? Me dijiste que irías con Irene mañana.

-Luhan, por favor, no es para tanto.

Le expliqué la situación pero no lo calmó en lo más mínimo. De verdad nunca lo había visto así de celoso y llegué a asustarme un poco. No porque pensara que podría hacer algo, sino porque, no iba a permitirme estar con una persona celosa que no confiara en mí.

-No puedo Airi, no puedo dejarlo pasar como si nada. Eres mi novia y... ¿tienes idea de cómo me estoy sintiendo?

-Por favor Luhan, solo fuimos al cementerio, no a una cita romántica.

-Pero, ¿por qué tuviste que ir? ¿por qué con él?

-Porque quería ver a mi hijo, necesitaba ver a mi hijo. No he ido a su tumba desde que me fui de Corea y hoy se cumplen tres años de su muerte, necesitaba verlo. Por favor entiéndelo.

Luhan se sentó en el sillón de mi sala y suspiró antes de hablar.

-¿Por qué tuvo que ser con él?

-Porque no tenía con quién más ir. Porque te lo dije, no quería ir sola y te pedí que me acompañaras, pero no pudiste... o no quisiste. La verdad no estoy segura de eso.

-No pude Airi. Me era imposible faltar a esa reunión y lo sabes.

-Ya no importa Luhan, ya déjalo por favor –dije muy cansada de todo- Ha sido un día muy difícil y solo quiero descansar un poco.

Fui a encerrarme a mi habitación deseando que él se calmara. Estaba de acuerdo en que podía ser molesto para él, pero tenía que entenderme.

Pero no fue tan fácil dormir, por más que intentaba no pensar en nada y solo despejar la mente, los reclamos de Luhan seguían en mi cabeza repitiéndose y repitiéndose. Empecé a pensar que tal vez había hecho mal en ir con Jongdae al cementerio cuando recordé que él creía que había regresado por él. Tal vez, el haber aceptado ir juntos a visitar a mi hijo y el abrazo que nos dimos, podía confundirlo y apoyar su estúpida teoría de que había regresado por él. Al principio podía tomarlo como broma sin importancia, pero lo conocía y sabía que él podía molestarme con ese abrazo de ahora en adelante. Definitivamente no quería eso y no dudaría en dejárselo muy claro.

Quería olvidarme de ese abrazo, de verdad no quería pensar en eso, pero por esa misma razón, mi mente jugó conmigo haciéndome soñar con él.

No era nada muy claro, ni tampoco quería recordarlo, pero la sensación de estar con él, sentir su calor, su olor, aquella paz y tranquilidad que solía transmitirme y sobre todo... su amor. Era un hecho que una relación como la nuestra no podría ser olvidada como cualquier cosa. Nos enamoramos muy jóvenes, nos casamos y estuvimos a punto de tener un bebé. Pero bueno, las cosas cambian y las personas pueden desenamorarse y enamorarse de otras personas, justo como nos había pasado a nosotros. Así que no tenía de qué preocuparme, mis sentimientos por él fueron muy fuertes y seguramente, era esa la razón por la que había soñado con él.