Elige la vida [ Trainspotting ] .

Renton

Elige la vida. Elige un empleo. Elige una carrera. Elige una familia. Elige un televisor grande que te cagas. Elige lavadoras, coches, equipos de compact disc y abrelatas eléctricos. Elige la salud, colesterol bajo y seguros dentales. Elige pagar hipotecas a interés fijo. Elige un piso piloto. Elige a tus amigos. Elige ropa deportiva y maletas a juego. Elige pagar a plazos un traje de marca en una amplia gama de putos tejidos. Elige bricolaje y preguntarte quién coño eres los domingos por la mañana. Elige sentarte en el sofá a ver teleconcursos que embotan la mente y aplastan el espíritu mientras llenas tu boca de puta comida basura. Elige pudrirte de viejo cagándote y meándote encima en un asilo miserable, siendo una carga para los niñatos egoístas y hechos polvo que has engendrado para reemplazarte. Elige tu futuro. Elige la vida... ¿pero por qué iba yo a querer hacer algo así? Yo elegí no elegir la vida: yo elegí otra cosa. ¿Y las razones? No hay razones. ¿Quién necesita razones cuando tienes heroína? Mi nombre es Mark Renton pero todo el mundo me llama Renton, Rents o Rent Boy. Soy una adicto a la heroina, bueno, heroína y todo lo que tenga que ver con demás mercancias. Caballo, éxtasis, cocaína , cannabis... En fin de todo un poco. Siempre piensas que puede beneficiarte aunque en el fondo sepas que solo estas metiendo mierda en tu cuerpo y que cualquier día tendras un disgusto, pero lo peor es que aún sabiendo ese riesgo lo volverás a hacer, volverás a recaer y a levantarte, y cuando estés lo suficientemente levantado y con los ojos bien abiertos, volverás a caer en la trampa de siempre, aunque mas que trampa, lo considero un refugio de este mundo lleno de gilipollas egocéntricos y egoístas, manipuladores y materialistas, pero es de esperar cuando vivimos en esta sociedad. Un gran ejemplo es mi compañero por no llamarlo amigo, Sick Boy, es el cabrón mas retorcido y promiscuo que conozco pero en fin, a caso yo tampoco soy así? Al final del día te preguntas si habrá un camino, una seña, una luz o una pista que te guíe y te haga entender que tus días de puto yonqui han acabado, pero mientras tanto yo seguiré esperando, con mi chute diario, mis jeringas, mis resacones, alucinaciones y amigos.