El despertar.

2.6K 155 12
                                    


Genevieve.


Despertar a lado de Hadrien, era realmente increíble, sus párpados cerrados dejaban ver sus densas pestañas, su barba de días lo hacían ver todo un hombre, un hombre demasiado sexy. A excepción de su mentón adornado por su escasa barba, su piel se veía demasiado suave, podrían tocarla todo el día sin cansarme, sus rizos castaños esparcidos por la blanca almohada, ¿ya les había dicho que amo sus cejas? Es que realmente estoy celosa de su forma y lo tan pobladas que son. Las sábanas blancas se arrugaban y se enredaban más en su torso, su pecho adornado de varios lunares al aire, bajaba y subía lenta y rítmicamente y sus labios formaban pucheros graciosos y tiernos.

Llevaba unos minutos parada a un costado de su cama y ya extrañaba sentir cerca el calor que su cuerpo transmitía. Cuando desperté en realidad no me acordaba de absolutamente nada, di un salto de la cama y después me di cuenta... que desperté a su lado, en sus brazos y me quede clavada en mi lugar admirando lo que creo es mi lugar favorito en estos momentos.

Sus parpados se abrían poco a poco adaptándose a la luz, sus fuertes brazos quitaron las sabanas que estorbaban su paso, mis ojos y mi boca formaban una o perfecta, no sabía si mi expresión era de horror o de asombro, pero estaba segura que era épica, Hadrien solo vestía unos bóxeres blancos. Sus piernas torneadas y su abdomen marcado lucían irresistibles con esa luz, de seguro era la luz, nadie podía ser tan perfecto. Sus músculos no eran prominentes, eran más bien marcados, ¿ya había dicho que su mentón afilado me vuelve loca?

Bueno todo en él, me vuelve realmente loca.

Paro su torpe paso, quizás al baño, quizás a la cocina...

Demonios, tenía una erección matutina. Lo he dicho y lo vuelvo a repetir, este hombre es perfecto. Restregaba sus manos en sus ojos, y acomodo un poco sus alocados rizos, fijo su mirada en mí. No recuerdo como llegue aquí, ni siquiera si lo hicimos de nuevo, quizás el tampoco se acordaba, pero estábamos ahí, fijos en nuestro lugar, desnudos, esperando algún movimiento.

Pasee mi vista por mi cuerpo, esto le dará asco, mi cuerpo le causa asco a todo el mundo, inclusive a veces a mí misma. ¿desde cuándo me preocupa eso?

Devolví mi mirada hacia él, el tono de sus ojos parecía ahora más oscuro, relamió sus labios y estos se curvaron en una sonrisa juguetona, mientras caminaba peligrosamente hacia a mí.

Corrí a refugiarme a las sabanas, las coloque sobre mi cuerpo, caían de manera graciosa hacia mis pies, con esto casi puedo ser la reencarnación de Marilyn Monroe. Concéntrate Gen.

— ¿Qu...qué paso anoche? — tartamudeó, acomodando mejor la sabana. Borro su sonrisa, que me ponía los pelos de punta, y no diré de que zona me refiero.

— Pensé que eso solo se decía en las películas — dio unos pasos a mi dirección, su ceño fruncido y su nariz arrugada no era buen augurio. Paso los brazos por mi espalda y quito por completo la sabana — Jamás, jamás te vuelvas a esconder de mí, estos días sin ti fueron una mierda... — paso la punta de su tibia nariz por mi mejilla — Ya no soporto tus juegos Gen, quiero verte, quiero tenerte y creo que si soy un puto egoísta, pero solo te quiero para mí — termino besando mi mejilla.

— Hadrien por favor déjame cambiarme y podemos hablar tod...

— No, no quiero que te cambies, después de haberlo hecho dos veces ¿porque no quieres que te vea? — levanto su tono interrumpiéndome abruptamente, se separó de mi — ¿acaso ya tienes a alguien más y es por eso que no me has hablado? ¿es el idiota ese del club?

— ósea que si nos acostamos anoche... — si quizás soy una tonta por pensar que no nos acostamos si estamos desnudos, pero no me acuerdo de absolutamente nada y quiero respuestas.

Paso sus manos por su cabello apretándolos un poco en un puño —Ayer casi mato a un idiota por estar hablando de ti y de que habían hecho un estúpido trio, a tu amiguito no le hice nada no quería que siguiera a tu lado, no quiero que este cerca de ti, ni siquiera quiero que lo vuelvas a ver ¿escuchaste? — soltó en un tono totalmente autoritario extraño en él.

— ¿te refieres a Casper? — pregunte realmente extrañada, a mi amigo se le veía a kilómetros que era pasivo, pero creo que los celos te ciegan... esperen un momento ¿Hadrien esta celoso?

Se escucho una risa sin humor por la habitación, el paso dos de sus dedos por la comisura de sus labios — No se Gen, no me pare a preguntarle el nombre al bastardo que restregaba su pene en mi chica.

Ahora era mi turno de reír, por supuesto que estaba celoso, un sonido rompió mi risa, levante mi celular del piso, "Casper", conteste en altavoz.

— Hola Casper — salude para que Hadrien se percatara de quien era la llamada, su mandíbula se tenso al instante, se giró a la puerta, dejándome una vista de su fabuloso trasero.

—Eres una perra con suerte, ese si es un hombre y no como el que tengo en casa — se escuchó la chillona voz de mi amigo por la línea, y un ronco ¡hey! Detrás de esta, seguramente de su recién levantado novio, ni siquiera sabia la hora que era, demonios mi trabajo. Hadrien paro su paso en seco — se nota a kilómetros que le encanta ser el dominante, estaría encantado de que me amarrara a su cama.

Babygirl XXLDonde viven las historias. Descúbrelo ahora