|Bad baby|Libro#1|Jeff The Killer Fanfiction|

Capitulo 2

—¡Si! Por milésima vez que les digo que necesito una maldita orden o algo que me proteja, no se, policías rodeando mi casa o algo parecido ¡para que un idiota no venga y me asesine!—me estaban sacando de mis casillas esos oficiales que solo me miraban como si estuviera loca.

—¿En donde dice usted que sucedió el percance?—pregunta uno de los oficiales detrás de su escritorio. Como si no prestara atención a nada de lo que decía.

—Carretera a West Valley, ya les dije como tres veces—conteste malhumorada.

Uno de los oficiales, un hombre rubio de aspecto recio entro a escena y entonces se acerco conmigo. Este sonrió de forma cálida.

—Nosotros nos encargaremos de todo, solo déjenos información personal suya. Ya sabe, dirección, algún teléfono de casa al que podamos contactarla, ya que usted menciono con anterioridad que había dejado su bolso en donde había ocurrido el incidente. Por lo pronto puede encargarse de bloquear sus tarjetas para que el sujeto no se aproveche de ello. De todas formas ya nos ayudo con un boceto del sujeto, nos encargaremos de buscarlo.

—Lo se... Pero necesito ayuda, no quiero que me asesine o me busque ¿entiende? En ese bolso tengo mi maldita tarjeta con datos personales—dije.

—Ese tranquila señorita Parker. Su único trabajo ahora, es ir a su casa, pronto mandaremos una patrulla para allá así que no tiene de que preocuparse...

Asentí rodeando los ojos y finalmente le di la espalda y salí sin dirección alguna, mas que el auto en el que había logrado llegar donde la policía. Moví apenas un poco mi cabello alborotado y talle mi rostro con ambas manos. El auto estaba frente mio, por lo que rápidamente entre en el y conduje hacia central park. Presione apenas un poco el acelerador mientras evadía los autos. Respire hondo mientras miraba el interior del auto de reojo. Conducir parecía una eternidad en el interior de este auto, sentía miedo, y esos escalofríos habían vuelto.

Cuando había llegado a central park. Aun de noche, estacione el auto frente del parque aprovechando que no había nadie a mi alrededor y mire el interior, buscando respuestas me pase a los asientos traseros y comencé a buscar por todas, partes. Pero parecía ser solo un auto nuevo mas, que no delataba nada mas que el olor a nuevo de los asientos que emanaba de forma instantánea. Luego me detuve y baje del auto. Volví a subir, pero esta vez en el asiento del pasajero, ahí fue donde busque por todas partes, incluso por debajo de los asientos. Y de nuevo había sido en vano. No había respuestas del sujeto. Hasta que salí de golpe del interior y me acerque a la cajuela y al momento de abrir, me encontré con solamente con una maleta. Mi cabello volaba apenas un poco por el viento. Y el cielo comenzaba a nublarse. Entonces me arme de valor y abrí la maleta rápidamente, pero dentro no había nada, por ningún lugar. Por lo que cerré la maleta y la deje en su lugar, cerré la cajuela de golpe y subí al auto de vuelta y conduje hacia la misma dirección a la que iba antes de que todo esto ocurriera.

Sin embargo, para llegar a casa tuve que rodear. Tardando mas de una hora en llegar aun a gran velocidad. Para mi suerte, comenzaba a amanecer. Presione un poco mas el acelerador. Estaba calmada, con un poco de nervios revolviéndome el estomago, normal. Diría yo. Ni siquiera sabia si iba a estar a salvo en mi casa, estaba perdida.

El vecindario en el que había elegido vivir, era mas o menos elegante. Mi trabajo y la paga se adecuaban muy bien a los pagos que daba. Incluyendo la universidad. Pero era sábado. Y apenas estaba comenzando el día para ser las 5 de la mañana. No me apetecía dormir en lo absoluto, es decir, podía siquiera hacer cualquier labor en el día y no necesitar cerrar los ojos durante un largo tiempo. Aun sentía la necesidad de cuidar mi espalda.