Bad roomies (VCC#2)

Capítulo 26

El sonido de alguien llamándome al móvil me despertó. Dios, que dolor de cabeza. Al dejar de sonar me acomodé y noté a alguien detrás mía, abrazándome. Abrí los ojos, giré la cabeza y vi a Drake. Me salió una sonrisa y me acomodé más cerca de él.

Entonces me di cuenta de que se trataba de él. Abrí los ojos de golpe. Miré debajo de las sábanas y suspiré aliviada al comprobar que tenía mi pijama puesto, aunque este contara sólo de una camiseta. Tenía dos opciones:
A) Quitarlo de golpe, provocando que lo tirara al suelo.
B) O retirar su brazo poco a poco.

Estuve barajando ambas ideas, hasta llegar a la conclusión que era mejor la opción b. Pero entonces sonó el móvil de nuevo. Mi cabeza iba a estallar.

—Me cago en la puta ya, joder— dijo Drake despertándose y cogiendo el móvil. Me incorporé y le miré—. ¿Qué?— preguntó bordemente— Sí, está aquí, ahora te la paso— dijo rodando los ojos, extendiéndome el móvil. Se volvió a tumbar e intentó dormir mientras yo me ponía el teléfono en la oreja.

—¿Diga?— pregunté temerosa. No tenía ni idea de qué hora era ni quién era. Sólo sabía que me dolía muchísimo la cabeza y lo único que quería era volver a dormir.

—¿Becca?—dijeron en la otra línea. Al instante reconocí la voz de mi hermano. Mierda—¿Quién era ese?—Más mierda.

—Drake, el novio de una amiga, que estamos aquí en casa pasándolo bien— soy una pésima mentirosa pero yo creo que eso iba a colar. No podía decirle que vivía con tres chicos, y menos aún que estaba en la misma cama con uno de ellos. Ni siquiera recordaba cómo habíamos acabado aquí.

—Oh, me alegro. Estarás más feliz cuando te diga que alguien te está esperando en el aeropuerto— Muchísima más mierda. Era él. Seguro que era él el que estaba en el aeropuerto y tenía que ir a recogerlo—. ¿Becca?— dijo confundido.

—Perdón, estoy bastante sorprendida. Viniste sin avisar ni nada— sonreí nerviosa aunque sabía que él no me pudiera ver.

—Sí, bueno, te avisé cuando te fuiste— joder. ¿Qué iba a hacer ahora? Reí nerviosa.

—Deja que me prepare y le digo a mi compañera que vayamos a por ti.

Colgué, dejé mi móvil en la mesita de noche y me apresuré a levantarme. Cerré los ojos y me toqué la cabeza, debido al gran dolor. Notaba como palpitaba.

—Me cago en la puta— dije en voz baja, a regañadientes.

—¿Quién era y qué te pasa?— me preguntó Drake, con el pelo despeinadísimo y los ojos aún entrecerrados.

—Mi hermano. Mierda. No puede saber que vivo con hombres si no me llevara de vuelta a casa seguro.

—Bueno, idearemos un plan.

—Pero es que tiene que ser ya— dije abriendo la puerta para ir a despertar a los demás. Volví un momento a mi cuarto—. Por favor, prepárame algo para el dolor de cabeza que me va a estallar— y entonces llamé de puerta en puerta, oyendo quejidos de parte de todos.

—Vale, chicos, tengo muchísima prisa y tengo que saber con certeza que habéis entendido el plan a la perfección.

—Que sí, Becca— dijo Alissa rodando los ojos—. Yo soy tu amiga soltera. Aaron y Alice son novios y Drake y Dylan también. Y Drake se llama Aaron y Aaron se llama Drake— no podía quedar un chico soltero y, la voz de Drake era mucho más parecida a la de Aaron. Y como dije que estaba con el novio de mi amiga pues... y además, Aaron no tienen tanta confianza con los demás para hacer de gay.

—Vale, muchísimas gracias, me tengo que ir ya, volveré en un rato— dije, yendo a la puerta junto a Alice y Aaron, pues ahora eran "novios".

Bajamos y subimos al coche lo más rápido que pudimos. Partimos de inmediato y en cuestión de veinte minutos habíamos llegado al aeropuerto.

—Por fin estás aquí, pensé que no llegarías nunca— dijo Scott.

—Yo también te he echado de menos— dije abrazándolo. Me respondió el abrazo y luego nos separamos. Nos dirigimos al coche—¿Cuándo vuelves a casa?— pregunté, pues veía que llevaba una mochila bastante llena de cosas.

—Mañana a primera hora, pero mamá me dijo que te trajera cosas. Ya sabes como es ella.

—Sí...— sonreí anhelada. Subimos al coche en la parte trasera.

—Bueno, él es Drake, el chico con el que hablaste esta mañana— dije señalando a Aaron en el asiento del piloto— y ella es Alice— dije apuntándola con el dedo.

—Encantada— dijo Alice.

—Igualmente— contestó mi hermano.

En el trayecto pusimos música para amainar el silencio incómodo. Alice debería ir para actriz porque se acercaba y le susurraba cosas a Aaron mientras le ponía la mano en la pierna. Hubo un momento que vi como él se revolvía en su asiento, pero no le di importancia.

—Ya hemos llegado— dije. Mi hermano se agachó para asomarse por mi ventanilla y poder ver el lugar en el que vivíamos. Salió del coche y yo junto a él.

—¿Qué te parece?— pregunté nerviosa.

—Bien— dijo encogiéndose de hombros, dándole una mirada de aprobación. Ni siquiera era mi casa casa, pero quería saber que opinaba sobre ella.

Subimos por el ascensor y saqué la llave. Al abrir la puerta lo único que esperaba era que todo saliera según lo previsto. Suspiré y giré la llave del todo. Al entrar se podían oír risas de parte de Dylan. Nos acercamos al salón y pudimos contemplar cómo Alissa estaba en un taburete de la isla y Drake tenía puestas sus piernas sobre su supuesto novio. Se levantaron y se acercaron a nosotros para saludar a mi hermano.

—Bueno, él es Scott, mi hermano mayor— dije cogiéndolo por la cintura, acercándome a ellos— y ella es Alissa, Dylan y Aaron— se dio dos besos con cada uno de ellos y luego procedió a pasar su mirada por la casa.

—Es más grande de lo que pensaba— dijo.

—Eso me dicen todas— dijo Aaron susurrando. Le pegué un codazo pero Scott lo oyó y se rió.

N/A: Holaaaaa.
Hasta aquí el capítulo de hoy. Espero que os haya gustado.
En multimedia Scott.
Besos, tita Ángela.